En un vuelo de British Airways entre Johannesburgo y Londres, una mujer blanca se quejó con la azafata de estar sentada junto a un hombre negro y pidió cambiar de asiento. La azafata le informó que no había más asientos disponibles en clase turista o business, pero ofreció su asiento en primera clase al hombre negro debido a lo detestable que era la mujer. Los demás pasajeros aplaudieron la acción de la azafata.