2. No des tus Nombres Religiosos por que te hechizan:
Manual del buen brujocondriaco.
3. Mucho se habla de mantener en secreto, nuestros Signos y
nombres de Santo, porque supuestamente con ellos nos pueden
hacer mucho daño con hechicerías. En lo personal pienso que no
podemos caer en tantas paranoias y pensar en que todo el mundo
nos quiere "embrujar".
Estoy de acuerdo en que si tienes todos tus nombres esa es una
información personal y hasta cierto grado confidencial y se la das al
que te parezca que pueda tenerla. Si es bajo el contexto de
privacidad, pues no hay nada discutible en ello, es una cuestiónde
preferencias.
En términos religiosos, simplemente me parece un ejercicio
simplemente paranoico.Dentro de nuestra vida religiosa, el
"esconder" nuestro nombre o signo es algocasi imposible, ya que
cuando estamos Moyugbando en distintas ceremonias"abiertas al
público", le decimos a Orunmila, a los Ocha y a todo el
mundo,quienes somos con Nombre y apellido, nombre de Santo,
signo de Ifá, Nombre de Ifá y todas nuestras generales. Así que
mantenerlos en "secreto" es un ejercicio que además de inútil, es
"comprarnos" un falso sentido de seguridad, ya que no solo con el
nombre nos pueden hacer hechicerías.
Esta actitud de agente secreto, es lo que lleva a muchos religiosos a
caer en"secretismos" innecesarios o imposibles y entonces no nos
queda más remedio que darle crédito al humorista español Jaume
Perich cuando dijo:
La religión sirve para ayudarnos y consolarnos ante unos
problemas que no tendríamos si no existiese la religión.
Esta es solo mi opinión personal con respecto a ese punto. Sé que
habrá quien discrepe, pero simplemente, a mi concepto, uno no
puede vivir la vida encerrado en una burbuja, solo porque le quieren
hacer hechicerías o daños. Por lo menos en mi caso, no estoy en la
religión para vivir mi vida como un "BRUJOCONDRÍACO" ¿Y tú?.
Muchos de nuestros “dogmas” fueron creados a base de
supersticiones que no tienen fundamento en Ifá. Tales son el uso de
cuatro velas encendidas, el uso de la sal en nuestras obras, el uso
de tatuajes o hasta la donación de órganos y tantos otros que en
realidad nada tienen que ver con Ifá o sus prácticas y dogmas.
4. Analicemos las cosas a la luz de la razón, pero apliquemos los
conceptos basados en verdaderos tabúes y no en supersticiones.
La superstición es a la religión, lo que la astrología es a
la astronomía, la hija loca de una madre cuerda.
Voltaire.