La escuela estaba experimentando malos resultados académicos y baja moral entre profesores y estudiantes. Un día, los estudiantes y profesores encontraron un cartel anunciando el funeral de la persona que impedía el crecimiento de la escuela en el salón de clases. Al acercarse al ataúd, vieron que adentro había un espejo, mostrando que la única persona que limita su propio crecimiento es uno mismo.