Tenemos que empezar a cuestionarnos la calidad de la información y educación que recibimos, una educación en TICs dirigida a crear meros consumidores y que nos forma en eras de la productividad imperante en la era actual. Actualmente estamos al servicio de la tecnología, pero… ¿no es hora de decir basta, cuestionar los valores imperantes y proponer que la tecnología esté al servicio de la ciudadanía? Pero para ello debemos entender la tecnología como un medio y no como un fin en sí mismo. El fin somos nosotros y el desarrollo de la comunidad tal y como la entendemos, la pensamos y la queremos.