El documento establece un pacto de aula entre profesores y alumnos para promover un ambiente de aprendizaje positivo y respetuoso. Los profesores se comprometen a enseñar con pasión y dedicación, mientras que los alumnos acuerdan participar activamente en clase y esforzarse al máximo en sus estudios. Juntos crearán una comunidad escolar basada en la colaboración, el respeto mutuo y el éxito de todos.