El autor describe su creciente angustia sobre el futuro de la lectura entre las nuevas generaciones, que están más acostumbradas a la cultura audiovisual. Las nuevas tecnologías les permiten experimentar mundos virtuales sin necesidad de libros, y la lectura requiere más esfuerzo que ver televisión o usar la computadora. Aunque algunos jóvenes aún leen libros, el autor teme que en el futuro la cultura libresca sea un recuerdo y que predomine la cultura visual. El artículo analiza cómo fomentar la lectura entre los ni