Este documento explica la diferencia entre precios flexibles y rígidos. Bajo precios flexibles, la producción y los precios se determinan en el mercado. Hay seis ecuaciones que describen la oferta y demanda de trabajo y bienes. Con precios rígidos, los precios no se ajustan rápidamente y las empresas ajustan la producción variando el empleo. Los precios pueden ser rígidos debido a costos de menú, información imperfecta, salarios de eficiencia e ilusiones monetarias. La relevancia del modelo de
1. ESCUELA SUPERIOR DE COMERCIO Y ADMINISTRACIÓN<br />UNIDAD TEPEPAN<br /> <br />Precios Flexibles y Rígidos<br /> Unidad de aprendizaje: <br />Análisis de Costos de Comercio Exterior.<br />Profesor: Martínez Martínez Jesús<br />Alumnos:<br />Alemán Milian Andrea.<br />Cervera Beltrán David Augusto<br />Díaz Moreno Ricardo<br />González Suárez Ana Karen<br /> Montes Rodríguez Marco Polo<br />Vásquez Rosales César<br />3NV2-4NV2<br />Octubre 2010.<br />PRECIOS FLEXIBLES<br />La flexibilidad de precios de los productos hace que el nivel de producción (o renta) y el nivel de precios se determinen en el mercado de bienes<br />Por tanto, seis ecuaciones del modelo son:<br />Ecuación de oferta de trabajo<br />Ecuación de demanda de trabajo<br />Condición de equilibrio en le mercado de trabajo (Demanda de trabajo = Oferta de trabajo)<br />Ecuación de oferta de bienes (Función de producción)<br />Ecuación de demanda de bienes<br />Condición de equilibrio en el mercado de trabajo (Demanda de bienes = Oferta de bienes)<br />.<br />Oferta de trabajo: proviene de la maximización de la función de utilidad de los consumidores-trabajadores. Los argumentos de dicha función son: consumo y ocio. Como consecuencia, la oferta de trabajo depende del salario real <br />Si el ocio no entrase en la función de utilidad, el consumidor ofrecería inelásticamente todo su tiempo disponible como trabajo. Inelásticamente significa: con independencia de cuál sea la remuneración, es decir, el salario real.<br />Demanda de trabajo: proviene de la maximización de beneficios por parte de las empresas.<br />Como consecuencia: depende positivamente del stock de capital productivo instalado, del nivel de productividad, y negativamente del salario real<br />Si hablamos de estrategias de precios, pareciera ser un tema medianamente simple. <br />Al trabajar la fijación de precios centrándonos en los costos (práctica más común de lo que uno piensa), nos daremos cuenta que no es complejo. La complejidad estará dada por el buen manejo de los costos. Está de más decir, que esta metodología dista mucho de ser la ideal, ya que en ningún momento se considera al consumidor.<br />El corto ciclo de vida actual de muchos productos, hace que un error en la fijación de precios, pase a ser insalvable.<br />Hoy es una práctica común trabajar con una política de precios flexibles, pero no en el sentido estricto de los manuales de negocios, donde la flexibilidad estaba dada por las cantidades compradas o por la ubicación geográfica. Hoy en día se flexibiliza en función al tipo de cliente. Resulta atractivo obtener el máximo beneficio de cada cliente, según lo que esté dispuesto a pagar. El inconveniente está dado por el avance tecnológico que generó una transparencia en los precios inimaginable años atrás. Si una empresa ofrece descuentos a nuevos clientes, para ampliar su share, es prácticamente seguro que los clientes actuales se enteren y se generen algunos conflictos.<br />Esto no implica que dejemos de lado el targeted pricing, sino que para aplicarlo hay que ser muy cauteloso, analizando no sólo los beneficios sino sus potenciales complicaciones.<br />Consejo: no tome las estrategias de precios a la ligera. No imite a su competencia ni trabaje sólo en función a los costos. Analice sus segmentos y posicionamiento.<br />Cuando los precios son flexibles, una disminución del gasto autónomo de consumo significa un aumento del ahorro de los hogares y del movimiento de ahorro a través de los mercados financieros. Por lo tanto, el tipo de interés real baja y se realizan más proyectos de inversión. El descenso del tipo de interés real también eleva el valor del tipo de cambio y aumenta las exportaciones netas.<br />PRECIOS RIGIDOS<br />Los precios son rígidos, pero eso no quiere decir que sean inamovibles. Puede modificar sin duda los precios en respuesta a las variaciones de la oferta y la demanda. Los precios no son inamovibles. Si persiste la escasez –si la oferta nunca es capaz de contratar más trabajadores al salario inicial. Acaban cambiando en respuesta a una escasez o un excedente imprevistos.<br />Cuando lo precios son rígidos, una disminución del gasto básico (autónomo) de consumo provoca una reducción del ingreso (renta).Como el gasto total de consumo y la renta disminuyen en la misma cuantía, el flujo de ahorro total a través de los mercados financieros no varía y, por lo tanto, tampoco varía el tipo de interés real. El gasto de inversión o las exportaciones brutas no experimentan ningún cambio.<br />¿POR QUÉ SON RÍGIDOS LOS PRECIOS?<br />¿Por qué no se ajustan los precios de una forma rápida y sin problemas para mantener el pleno empleo? ¿Por qué responden primero las empresas a las fluctuaciones de la demanda contratando o despidiendo trabajadores y acelerando o ralentizando sus cadenas de montaje? ¿Por qué no responden primero subiendo o bajando sus precios? <br />Los economistas han identificado algunas de las razones por las que los precios podrían ser rígidos pero no están seguros de cuales son más importantes. He aquí algunas de las explicaciones probables:<br />Los directivos y los trabajadores observan que la modificación de los precios o la renegociación de los salarios tienen costos y, por lo tanto, lo mejor es retrasarla lo más posible. Los economistas llaman a los costos de la modificación de los precios, costos de menú, expresión abreviada que se refiere al hecho de que cuando un restaurante modifica sus precios debe imprimir un nuevo menú y reimprimir un nuevo catálogo puede ser caro o a los clientes puede molestarles que se cambien los precios frecuentemente.<br />Los directivos y los trabajadores carecen de información, por lo que confunden las variaciones del gasto total de la economía con las variaciones de la demanda de sus productos específicos. A esta segunda causa de la rigidez de los precios se la conoce como información imperfecta<br />El nivel de precios es una variable tanto sociológica como económica: depende tanto de los valores que la gente crea que son “justos” como del equilibrio de la oferta y la demanda. Para los trabajadores, una reducción de su salario indica que su empresa no los valora; de ahí que los directivos eviten bajar los salarios porque temen las consecuencias para la moral y la productividad de los trabajadores. Esta causa se la conoce como salarios de eficiencia.<br />Los directivos y los trabajadores sufren una “ilusión monetaria”: confunden las variaciones de los precios nominales con las variaciones de los precios reales (es decir, de los precios ajustados para tener en cuenta la inflación). Las empresas reaccionan a la subida de los precios nominales creyendo, erróneamente, que es más rentable producir más, aunque no lo sea porque sus costos han aumentado en la misma proporción. Los trabajadores reaccionan a la subida de los salarios nominales buscando trabajo más intensamente y haciendo más horas extraordinarias, aunque las subidas de los precios hayan eliminado cualquier aumento del poder adquisitivo real del salario pagado por una hora de trabajo.<br />Todos estos factores pueden ser causas de la rigidez de los precios. Aunque no estamos seguros de que los datos sean lo suficientemente contundentes como para defender de una manera clara y convincente una única explicación.<br />Se puede concluir que:<br />La rapidez con que el modelo de precios flexibles se vuelve relevante depende del tipo de expectativas sobre la inflación que hay en la economía.<br />Cuando las expectativas son estáticas, el modelo de precios flexibles nunca se vuelve relevante.<br />Cuando son adaptativas, el modelo de precios flexibles se vuelve relevante gradualmente, a largo plazo.<br />Cuando son racionales, el largo plazo es ahora: el análisis del modelo de precios flexibles es relevante siempre e inmediatamente.<br />FUENTES:<br />Luis Alberto Suárez – Cristian Martín Poveda, MACROECONOMIA Y POLITICA ECONOMICA <br />http://sistemas.itlp.edu.mx/tutoriales/mercadotecnia<br />