La Semana del Prematuro busca crear conciencia sobre la prematuridad como problema de salud pública. Se han logrado avances importantes en el cuidado del niño prematuro, incluyendo nuevos tratamientos, tecnologías y un mayor protagonismo de la familia y la lactancia materna. Aún así, existen desigualdades regionales en la tasa de mortalidad neonatal, por lo que es necesario continuar trabajando para brindar un cuidado de calidad a todos los recién nacidos.
1. DEL 4 AL 10 DE OCTUBRE: “SEMANA DEL PREMATURO”
Grandes avances en la atención del
niño prematuro
Hoy se puede saber incluso si el bebé en gestación será prematuro y, con el
tratamiento indicado, reducir a la mitad la posibilidad. Más conocimiento sobre
los órganos en formación, la especialización de la enfermería, nuevas
tecnologías y nuevos fármacos, la promoción de la lactancia y el protagonismo
de la familia en el cuidado, son las claves de la evolución.
2. Por primera vez, el país se adhirió a la
Semana del Prematuro, del 4 al 10 de
octubre, una iniciativa de UNICEF para
reflexionar sobre la prematuridad como
problema de salud pública y el
prematuro como ser social con
necesidades especiales.
En el Hospital Universitario Austral
(HUA), puntualmente, se realizará un
“Homenaje a los Niños Prematuros” el
viernes 8, para los bebés que hayan sido
pacientes del Servicio de Neonatología,
El Dr. Keller en la Unidad de Cuidados sus familiares y el equipo de salud que
Intensivos Neonatales del HUA. los cuidó.
“El nacimiento pretérmino se produce antes de la semana 37 de gestación. Entre los
factores que pueden provocarlo espontáneamente figuran: las enfermedades del feto
(retraso del crecimiento, anomalías urinarias, de la pared intestinal o del sistema nervioso
central), los problemas de la placenta (acretismo, ruptura espontánea de membrana,
corioamnionitis) o las patologías de la madre (hipertensión arterial, enfermedades
autoinmunes, respiratorias, tabaquismo, infecciones)”, explicó el Dr. Rodolfo Keller,
coordinador de la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) del Austral.
Nacer prematuro exige a los órganos en formación el desafío de vivir fuera del útero. “El
objetivo del equipo de Neo es que la transición a esta vida exterior sea lo menos
traumática y libre de complicaciones que sea posible. Afortunadamente, se lograron
avances importantes que disminuyeron las consecuencias neurológicas (retraso
madurativo), sensoriales (problemas auditivos o visuales), respiratorias (enfermedad
pulmonar crónica) y nutricionales (retraso del crecimiento)”, añadió el especialista.
Además del avance del conocimiento médico, el desarrollo tecnológico y farmacológico, los
principales factores que optimizaron la calidad de la atención del prematuro fueron: una
mayor capacitación de la enfermería, la inclusión de la familia en el cuidado y la
promoción de la lactancia materna.
Saber si el bebé será prematuro (y reducir las posibilidades)
De los 11.000 niños que mueren anualmente en nuestro país antes de los 5 años, un 54%
fallece antes del mes de vida por malformaciones congénitas y prematuridad. ¿Es posible
evitar estos problemas o anticiparse a ellos? Sí.
El Dr. Adolfo Etchegaray, jefe de la Unidad de Medicina Fetal del HUA, afirmó que “existen
métodos para identificar a las mujeres que tienen un riesgo alto de parto prematuro
severo (antes de las 34 semanas)”. Y agregó que, mediante el tratamiento prenatal
con progesterona, se puede reducir esta posibilidad “en hasta un 44%”.
Debido a que la mayoría de los partos prematuros espontáneos ocurren en mujeres sin
antecedentes previos (la mitad de los casos, en primerizas), Etchegaray enfatizó la
necesidad de que todas las embarazadas tengan una evaluación del riesgo durante el
segundo trimestre. Esto se realiza mediante una ecografía transvaginal especial en la que
se mide la longitud del canal cervical a las 22 semanas, en el mismo momento en el que
se hace la ecografía morfológica detallada, que descarta defectos congénitos graves en el
bebé. “En aquellas pocas mujeres en las que el riesgo de parto prematuro está
aumentado, se indica tratamiento con progesterona, así como un seguimiento
personalizado para prolongar la gestación”, informó el experto.
Cuando, a pesar de todo, el parto prematuro sucede, “saberlo de antemano permite
acelerar la maduración de los órganos más vulnerables del bebé (los pulmones, el cerebro
y el intestino) mediante el tratamiento prenatal con corticoides, preparar las estrategias
de cuidado futuras en la UCIN y programar cirugías complejas en caso de ser necesarias”,
concluyó el Dr. Etchegaray.
La desigualdad, un agravante
“De acuerdo a estadísticas locales, la tasa de mortalidad neonatal (es decir, el número de
niños de entre 0 y 27 días de vida extrauterina que mueren cada mil nacidos vivos) pasó
de 10,5 en 2003 a 8,5 en 2007. Pero existen diferencias regionales: mientras que en
Capital Federal la tasa es de 5,4, en Formosa alcanza el 15,3”, detalló el Dr. Keller,
3. Mortalidad neonatal, en números
- En el mundo, el 99% de las 4 millones de muertes neonatales anuales ocurre en los
países más pobres.
- La Dirección de Estadísticas e Información en Salud (DEIS) del Ministerio de Salud de
la Nación, reportó que de cerca de 750.000 nacidos vivos en el 2008, el 8% fueron
prematuros.
- La mortalidad neonatal representa el 38% de las muertes de chicos menores de 5
años.
- En la Argentina muere el 40% de los recién nacidos con menos de 1.500 gramos,
mientras que en los países desarrollados y con buenos servicios de Neonatología esa
cantidad no supera el 15%.
- Se calcula que si todos los recién nacidos tuvieran acceso a un cuidado similar,
morirían 2.116 bebes menos por año.
- En el HUA nacen cerca de 2.000 bebés al año de los cuales 1.9% pesan menos de
1.500 gr. De estos sobreviven el 90% (datos del último año).