1. - Una foto. Con mi mujer, Julia, disfrutando de su deporte favorito. Andar. Aunque yo soy más de
“salir a correr” a veces es bueno compartir. Por eso andamos juntos. Aquí estamos a las afueras de
la localidad, ese día hicimos una buena ruta. Es quizá la última foto antes de que se declarara el
confinamiento. Luego, en los bares tenemos muchas más, pero esta queda más educativa y molona.
- Un color. Aquí tengo un dilema. Mi color favorito es el Verde, pero me gusta para verlo en mi…
No sé si será por mi Andalucía, o por los mares de olivos que rodean mi ciudad. En cambio, un
color que NO me gusta llevar pero me encanta ver en otras personas es el Naranja. Sí, sé lo que
estáis pensando, algo a nivel neuronal no funciona bien en mi cabeza.
- Una imagen / frase. Me quedo con la frase de Don Bosco, “Educar es cosa del corazón” Si
pretendemos crear aprendizajes duraderos no nos queda otra que emocionar y suscitar en esos
corazones emoción, sorpresa, entusiasmo… Nuestros alumnos deben darse cuenta que son
importantes para nosotros, no basta con que se lo digamos, deben sentirlo. Que cuando nos
enfadamos perciban nuestro dolor, no nuestra ira, que cuando algo hacen bien sientan cercanía,
complicidad y orgullo por nuestra parte.
- Tu comida. Para mí es más sencillo decir lo que no me gusta. NO me gusta ni el chorizo frito ni
las albóndigas. Tampoco me gusta mucho una comida típica que aquí se llama “Andrajos” y es que
cuando era niño me pegué tal tripotá que estuve dos días malo vomitando. En fin… Os adjunto la
foto de lo último que he hecho.
- Una película. Mi actor favorito es Robin Williams y me es muy difícil escoger una de las películas
en las que participa, pero sin duda alguna las que más me han llegado son.
Más allá de los sueños. Patch Adams
2. Si rascas encuentras valores docentes que son bastante potentes. Entrega, trabajo, sacrificio, no
renunciar a tus principios, seguir lo que dicta tu corazón… Son geniales, las recomiendo para este
tiempo de cuarentena.
- Un olor. Este es un punto en el que podría estar horas y horas hablando… Por suerte o por
desgracia tengo un olfato demasiado fino. No son los olores en sí, son los lugares a los que te lleva.
¿Conocéis ese olor que es mezcla de tubería (no desagradable), humedad y tierra? Así recuerdo yo
que olía el patio de mi abuela… Cada vez que entro a algún bajo, o a mi mismo patio y me da ese
singular olor me transporta a esas tardes de pelota y risas con los primos, mi abuelo chinchándonos
y mi abuela gruñendo porque le destrozábamos las macetas…
Otro olor que me fascina mucho es la lavanda. No sabría explicar por qué, pero es singular para mi.
- Una canción… Sin duda alguna “Mi canción optimista” de Indras. Me quedo con la parte de la
letra “Hoy todo vuelve a sonreír, ya lo estás buscando no hay momentos malos” También conservo
alguna reminiscencia de mis tiempos de melena, Heavy y Rock. Destaco al excantante de “La
Fuga” en su nueva banda “Rulo y la contrabanda”.
- Un vídeo… Siempre que he tenido oportunidad he destacado este vídeo. Volvámonos locos.
- Un lugar… Italia. Mi viaje de Luna de Miel, porque no es el lugar, es quién va contigo al lugar.
También en ese viaje conocimos a un grupo de gente joven con los que compartimos aniversario. La
verdad es que puedo presumir que fue un viaje ESPECIAL. (Y el viaje de novios es el único viaje
que haces en tu vida sin mirar cuánto cuestan las cosas, ¡¡eso mola!!)
- Un nombre de algún alumno/a. Son muchos nombres… No propiamente alumnos. Antes de ser
maestro de escuela fui educador en una Casa de Acogida. Muchos niños pasaron y de cada uno me
llevo duras experiencias que me han hecho ser más optimista y a veces relativizo demasiado las
cosas.
- Tu clave docente. Buuuaaaahh… Tendría yo 18 años, verano de segundo de bachillerato, como
buen estudiante me quedaron dos para septiembre. Bien, en ese verano hacíamos un voluntariado en
un barrio de mi localidad. En dicho barrio teníamos actividades formativas, educativas y lúdicas.
Tirados en la plaza del parque; escalones, bancos, en el mismo suelo… Realizábamos una hora
diaria de refuerzo escolar… No se me olvidará; el José. Recordando con él cómo se dividía por dos
cifras… Me miró a los ojos sonrió y me dijo “aaaaaaahhhh, ya lo entiendo, por fiiiiiiin” Ahí algo
se iluminó dentro de mi. Luego, investigando descubrí que lo mío es la Educación Infantil. Porque
es aprendizaje por descubrimiento, es libertad horaria, es PURA MAGIA.