El documento describe la importancia de la estimulación temprana para niños con Síndrome de Down menores de 5 años. Recomienda que los padres se comuniquen con un equipo multidisciplinario para guiar el desarrollo del niño. Explica ejercicios para mejorar la autonomía, capacidad de comprender palabras y establecer relaciones afectivas entre 1-2 años y 2-4 años. Finalmente, muestra la mayor participación de las madres que los padres en actividades de estimulación temprana.