El documento describe dos tipos de procesos de producción: procesos lineales y procesos intermitentes. Los procesos lineales se enfocan en la producción continua de un solo producto usando máquinas especializadas, lo que resulta en altos niveles de producción y eficiencia. Los procesos intermitentes involucran la producción por lotes de una variedad de productos usando centros de trabajo multifuncionales, requiriendo una cuidadosa planificación y personal altamente calificado.