Este programa de 12 sesiones busca mejorar la calidad de vida de personas con riesgo cardiovascular a través de actividades físicas, conciencia corporal y aprendizaje sobre factores de riesgo. Cada sesión cubre un tema como medición de pulsaciones, escala de esfuerzo, fortalecimiento muscular y tai chi. Los participantes aprenden a monitorear su cuerpo durante el ejercicio y a implementar estilos de vida más saludables de manera autónoma.