El equilibrio ácido-básico requiere la integración de tres sistemas: el hígado metaboliza proteínas y produce iones hidrógeno, los pulmones eliminan dióxido de carbono, y el riñón genera nuevo bicarbonato. Aunque la producción de iones hidrógeno aumente, el organismo mantiene relativamente estable la concentración a través de mecanismos tampón y la acción reguladora de los pulmones y el riñón.