Los estudiantes construyen un electroscopio para corroborar la existencia de cargas eléctricas y algunos de sus efectos. Realizan experimentos frotando globos con diferentes materiales como tela, cabello, lana y seda para generar cargas electrostáticas y observar la atracción entre objetos cargados. Concluyen que todos los cuerpos pueden tener cargas eléctricas positivas o negativas y que esto produce fenómenos de atracción electrostática.