3. Nace en Francia y se desarrolló en la primera mitad
del siglo XVIII (1730-1770).
Es un estilo artístico que se convierte en el puente
entre las formas barrocas y el neoclasicismo y
romanticismo posterior.
Es aristocrático, refinado y frívolo por lo que la
temática estará orientada a resaltar estos aspectos.
No obstante, depende de la influencia de cada país.
Utiliza formas barrocas exageradas y gusto por la
decoración oriental.
Sobre todo destaca:
Decoración interior de edificios:
Estuco o yeso.
Formas onduladas e irregulares.
Pintura
Dibujo difuminado.
6. Se caracteriza por la grandiosidad propia del
poder absoluto, unido a la sensibilidad hacia
la rareza y el exotismo.
Los edificios se caracterizan por un trazado
externo simple y una decoración interna
fastuosa.
10. Se utiliza, sobre todo, la porcelana como
material, aunque también se utiliza el
mármol y el estuco.
Temática variada:
Temas mitológicos.
Bíblicos.
Retratos.
Amour menaçant,
1757
Étienne Maurice
Falconet
13. Se dejó influenciar por el decorativismo del
Rococó.
Denominada como “pintura galante”.
Gramas cromáticas claras y formas delicadas
y curvilíneas.
Predominio del color sobre el dibujo
técnica: Pastel.
14. Tiépolo es el mayor y más importante
fresquista de la Italia del siglo XVIII. Pinta
frescos y óleos sobre techos y paredes de
palacios e iglesias. Los temas
representados suelen ser mitológicos o
bíblicos dependiendo del lugar a que
estén destinados.
Sus obras se dominan por la composición
movida, heredada del Barroco, la
elegancia, los colores pastel y una
luminosidad sólo comparable al brillo del
vidrio.
En 1761, año en que Carlos III le había
propuesto la decoración de los techos del
Palacio Real.
Joven con loro, 1729,
Giambattista Tiépolo
17. La aparición de Mercurio a Aeneas, 1757,
Giambattista Tiépolo
18. Solimena fue el mayor representante de la
escuela napolitana de la primera mitad del
siglo XVIII. Tuvo una carrera muy productiva,
son numerosísimos los frescos que realizó
para diferentes iglesias de Nápoles. Le
llegaban encargos de todos los puntos de
Europa, ya que fue uno de los pintores más
reconocidos. Creó una verdadera estela
pictórica que muchos continuaron. Se sabe
que Fragonard estudió a fondo su trabajo en
S.Paolo Maggiore, y que incluso llegó a copiar
algunas de sus composiciones.
Su estilo es muy vigoroso, en clara deuda con
el Barroco, en el que se había formado. En
1762, también Tiépolo se encontraba en
España.
21. El martirio de San Plácido y Santa
Flavia, 1697-1708
Francesco Solimena
22. Reynolds es uno de los
retratistas más famosos del
Rococó inglés.
Los retratos de Reynolds son de
una tierna melancolía. Los
personajes que prefiere son las
mujeres y los niños a los que
dota de una dulzura
estremededora. Reynolds solía
idealizar, e incluso dar un aire
mitológico a los personajes que
representaba.
29. Gainsborough es uno de los
retratistas más sobresalientes de
la Inglaterra rococó. Fue pintor de
selecta clientela, e incluso llegó a
ser pintor del rey Jorge III. En sus
retratos trata de apartarse de
cualquier síntoma académico en
pro de su personal estilo. Suele
infundir una profunda psicología a
sus personajes a la vez que les
otorga un suave movimiento por
medio de su hábil pincelada. Tuvo
preferencia por el retrato
femenino.
Mr y Mrs William Harllett, 1785
Thomas Gainsborough
34. El señor y la
señora Andrews,
1748-1749
Thomas
Gainsborough
35. Boucher nace en París, se formó en un
ambiente de decoradores a cuya
cabeza estaba Lemoyne. Él le
introduce en los temas mitológicos y en
el mundo del desnudo. Boucher es
amante de la sensualidad femenina, las
mujeres bellas y los ambientes
exquisitos. Su gran protectora es
madame de Pompadour, amante de
Luis XV, de la cual fue profesor de
dibujo. Boucher fue nombrado pintor
del rey. A partir de este momento
empezará a sufrir grandes críticas por
parte de los ilustrados. Según ellos, el
arte debía ser didáctico y no recrearse
en frivolidades. El gusto por el
Neoclasicismo empezaba a imponerse.
40. Watteau se convirtió en el pintor galante por
excelencia. Con 18 años se trasladó a París y
comenzó a hacer reproducciones de cuadros
conocidos. Trabajó en tiendas del Sena donde
vendía estas reproducciones. Sintió gran
desprecio por el arte oficial. Trabajó con
Claude Gillot, que le impulsó hacia el
conocimiento del mundo de la Comedia del
Arte italiana, cuyos personajes aparecen
representados en sus producciones pictóricas.
Watteau es el pintor de la vida alegre. En
sus delicados y brillantes paisajes se mueven
figuras con deliciosos vestidos de seda. Este
ambiente idílico de su pintura no se
corresponde con el de la vida de Watteau.
Era un hombre muy enfermo, solitario y de
difícil carácter. Su tuberculosis no le dejaba
vivir la vida fácil que pintaba. Quizá por eso,
en sus obras se aprecie una suave
melancolía.
46. Fragonard comenzó su carrera
como abogado, pero sus dotes
de pintor enseguida le llevarían
al estudio de Boucher . De éste
aprende el color, dibujo,
perspectiva, la pincelada suelta
y el movimiento. Marchó a
Roma con 20 años. Allí combinó
la práctica del dibujo del natural
con el estudio de decoración.
Admiró profundamente a Tiépolo
del que extrae importantes
enseñanzas. En Italia
permaneció 10 años, después
volverá a Francia para pintar
pinturas históricas.
53. Neoclásico
Características:
Arte burgués, austero y racional, basado en la
imitación de los modelos artísticos clásicos.
Arquitectura:
Imita las formas griegas y romanas. Utilizarán la
piedra como materia y se recuperan los órdenes
arquitectónicos, las cubiertas arquitrabadas o
abovedadas y las formas sencillas.
Racionalidad
Orden
Funcionalidad.
Estabilidad.
Gusto por las formas puras líneas rectas, severas y
austeras.
59. Pintura:
No hay referentes clásicos de pintura. Se basará en la
tipología escultórica.
Inspiración en el orden y equilibrio de la Antigüedad.
Despreocupación por el color e importancia del
dibujo.
Temática mitológica e histórica (aparecen hechos de
la Rev. Francesa).
Principales autores:
Jacques-Louis David.
Dominique Ingres.
Neoclásico
60. Jacques-Louis David (París, Francia, 30 de
agosto de 1748-Bruselas, Bélgica, 29 de
diciembre de 1825) fue un pintor francés de
gran influencia en el estilo neoclásico.
Buscó la inspiración en los modelos
escultóricos y mitológicos griegos,
basándose en su austeridad y severidad, algo
que cuadraba con el clima moral de los
últimos años del antiguo régimen.
Más tarde David llegó a ser un activo
participante en la Revolución francesa, así
como amigo de Maximilien de Robespierre;
en realidad fue el líder de las artes bajo la
República Francesa. Encarcelado tras la
caída de Robespierre del poder, más tarde
se alineó con el advenimiento de otro
régimen político, el de Napoleón Bonaparte.
Fue en esta época cuando desarrolló su
'Estilo Imperio', notable por el uso de
colores cálidos al estilo veneciano.
67. Jean-Auguste-Dominique Ingres, más
conocido como Dominique Ingres,
(Montauban, 29 de agosto de 1780-París; 14
de enero de 1867), fue un pintor francés.
Ingres no es, en sentido estricto, neoclásico
ni académico, sino un ferviente defensor del
dibujo. Resulta a la vez clásico, romántico y
realista.1Ingres constituye un claro
exponente del romanticismo en cuanto a los
temas, el trazo abstracto y las tintas planas
de intenso colorido. Algunas de sus obras se
enmarcan en el llamado «Estilo trovador»,
inspirándose en el ideal estético griego y
gótico, además de en las miniaturas de los
libros de horas de Fouquet. Igualmente, es
ejemplo de orientalismo, pues muchos de
sus cuadros, especialmente desnudos
femeninos, están dominados por un sentido
irreal del exotismo propio del siglo XVIII.
73. Escultura:
Temática mitológica.
Falta de originalidad estética y tipológica.
Estéticamente equilibradas y falta de dramatismo.
Materiales mármol y bronce.
Neoclásico
74. Antonio Canova (Possagno, 1 de
noviembre de 1757-Venecia, 13 de
octubre de 1822) fue un escultor y
pintor italiano del neoclasicismo.
Su estilo estuvo inspirado en gran
medida en el arte de la Antigua
Grecia y sus obras fueron
comparadas por sus contemporáneos
con la mejor producción de la
antigüedad, fue considerado el
mejor escultor europeo desde
Bernini. No tuvo discípulos directos,
pero influyó en la escultura de toda
Europa sobre su generación,
manteniéndose como una referencia
durante todo el siglo XIX,
especialmente entre los escultores
de la comunidad académica.