Roger Schank argumenta que la educación debería enfocarse en la felicidad de los estudiantes en lugar de sus calificaciones. Propone que la escuela debería aprovechar los intereses de los estudiantes para crear equipos de aprendizaje y utilizar enfoques basados en la práctica y la motivación intrínseca. Además, sugiere que los docentes deben diseñar actividades emocionantes que involucren la participación activa y enseñar habilidades para la vida real en lugar de enfocarse únicamente en las notas de