El documento describe a Apolodoro de Damasco, el arquitecto de Trajano que diseñó el Foro de Trajano en Roma. El Foro de Trajano era el mayor y último de los foros imperiales, y unió las dos áreas monumentales de la ciudad separadas por las colinas. Se componía de una gran plaza, una basílica transversal prolongada por exedras, y un espacio porticado con la columna Trajana flanqueada por bibliotecas.