Este documento establece las normas generales sobre la administración de los sacramentos a católicos y no católicos. Indica que los ministros católicos solo pueden administrar los sacramentos lícitamente a católicos, salvo excepciones. Establece casos en los que un católico puede recibir lícitamente los sacramentos de la penitencia, eucaristía y unción de los enfermos de un ministro no católico, como cuando es imposible acudir a un ministro católico. Tamb