1. T E N D E N C I A S P E D A G Ó G I C A S
ANÁLISIS
Es preciso iniciar este análisis desde la premisa que la tecnología y la pedagogía dialogan
armónicamente bajo el paraguas de integración y el enriquecimiento mutuo.
La tecnología hace parte integral de la práctica pedagógica brindando un sinnúmero de
posibilidades pero también de limitaciones de las cuales el profesorado debe tener plena
consciencia ya que sus creencias y comportamientos sobre su misma práctica determinan
el uso de las TIC en clases.
De acuerdo a Veletsianos 2010, “Las tecnologías emergentes son herramientas,
conceptos, innovaciones y avances utilizados en diversos contextos educativos al servicio
de diversos propósitos relacionados con la educación. Además, propongo que las
tecnologías emergentes (“nuevas” y “viejas”) son organismos en evolución que
experimentan ciclos de sobreexpectación y, al tiempo que son potencialmente disruptivas,
todavía no han sido completamente comprendidas ni tampoco suficientemente
investigadas.”
Es un concepto que abarca tanto a las herramientas que enmarca el término como las
ideas sobre su uso en educación, teniendo en cuenta que las pedagogías emergentes no
necesariamente tienen que ser nuevas, “emergente” no es sinónimo de “nuevo”.
Las premisas sobre el uso de las TIC en los procesos de formación pueden suponer
visiones inéditas de los principios didácticos o, como suele ser más habitual, pueden
beber de fuentes pedagógicas bien conocidas, como los postulados de estudiosos y
2. conocidos autores como Beetham, McGill and Littlejohn, Downes, Anderson, Alexander,
Walton, Mayes y Fowler, Cronje, Attwell, Vigotsky, entre otros.
Decimos entonces que las pedagogías emergentes son organismos en evolución que
existen en estado de “llegar a ser” a partir de la realización y difusión de experiencias
educativas y la reflexión y el debate sobre sus posibilidades educativas en las
comunidades que se establecen a su alrededor. Es realmente una coevolución entre
didáctica y tecnología.
Concluyendo puede decirse que desde hace muy poco los centros educativos disponen de
la mínima dotación TIC imprescindible para que los docentes puedan experimentar y, al
hacerlo, evolucionar sus ideas sobre cómo pueden utilizarlas los estudiantes en el
aprendizaje, así mismo, es posible que hayan generado excesivas expectativas, pero sin
duda sus potencialidades e implicaciones todavía no han sido completamente
comprendidas, no han sido completamente investigadas, son potencialmente disruptivas
en relación a la educación institucional tradicional y se generan y difunden
horizontalmente, en una espiral de reflexión-práctica, reflexión sobre los resultados y
difusión entre comunidades de prácticas o redes de lazos débiles creadas
en el seno de las redes sociales.