Este documento analiza cómo la industria cultural influye en la experiencia estética de los niños y niñas. Explica que viven inmersos en una sociedad del espectáculo donde las imágenes manipuladas promueven el consumo. Las series, programas y videojuegos generan ideas estéticas y roles, aunque también pueden fomentar valores. Algunos videojuegos se inspiran en obras de arte y ofrecen experiencias estéticas complejas. Por ello, es importante educar la mirada infantil para que comprendan estas ficciones.