La Guerra Civil Española estalló en 1936 como resultado de la sublevación militar liderada por el general Francisco Franco en contra del gobierno republicano electo. La guerra tuvo una dimensión internacional significativa, con Alemania, Italia y Portugal apoyando a los rebeldes con soldados y equipo militar, mientras que la Unión Soviética apoyó al gobierno republicano de manera similar. Aunque las potencias acordaron no intervenir oficialmente, en la práctica esto favoreció a los nacionalistas debido a la ayuda que recibieron de los