Artículo para una revista (inventada) sobre la educación y el impacto de las TIC en nuestros días.

1. Revista Educa en un “click”
Publicación mensual Madrid (España) Número 1
Octubre
2014
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“Tiqueando” el futuro de la educación
Yolanda Calonge Maestu (@yolandatic)
Estudiante de Grado en Educación Primaria
Universidad Pontificia Comillas
Introducción
Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) están llamadas a desempeñar un papel fundamental en lo que hoy en día se conoce como la sociedad del la información, SI (Coll, 2009). La educación progresa y lo hace con paso firme y fuerte para enfrentarse a los nuevos desafíos y oportunidades que la sociedad ofrece.
Se convierte en una necesidad el hecho de estudiar y de estar informados sobre las TIC, sobre cómo son y cuáles son sus características, pero sobretodo, sobre cuál es su influencia en nuestro entorno más cercano, la escuela.
Nuestra realidad cambia y la educación, también.
Nos encontramos con una realidad cambiada si la comparamos con unos años atrás, ahora en las clases tenemos como compañeras a las pizarras digitales interactivas, quedando a un lado la típica pizarra de tiza para escribir. Nos abrimos ante la creación de nuevos entornos comunicativos y expresivos, ante un abanico lleno de oportunidades y experiencias educativas (Cobo, 2009). Las escuelas son el escenario donde las TIC actúan, es ahí donde se da paso a la competencia digital que muchos profesores anhelan, a la posibilidad de comunicarse con los demás por muy lejos que estén, al intercambio y transmisión de información, al paso de nuevos recursos e innovaciones tecnológicas que agilizan el aprendizaje, al descubrimiento de las necesidades y dificultades que muestran los alumnos y al reto que supone una actualización en conocimientos tecnológicos tanto para los profesores, padres o alumnos (Cobo, 2009).
La formación y la actualización del profesorado es, sin duda, el camino a seguir para incorporar los nuevos recursos tecnológicos en el mundo de la educación (Mayorga, 2011; Madrid, 2011; Núñez, 2011). Me atrevo a decir que, junto al equipo docente, se

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podrían incluir los padres, ya que ellos también forman parte del aprendizaje y de la educación innovadora de sus hijos. Si analizamos un poco y comparamos la utilización de las TIC en nuestros días con la de hace unas décadas, las tecnologías y su uso han cambiado.
En primer lugar, se encuentra la actitud del profesorado que está dispuesto a abrirse a los nuevos servicios que ofrece la web 2.0 tales como blogs, redes sociales, wikis,… Pero igualmente, nos encontramos con profesores cuya actitud es negativa y un tanto desconcertante ante esta evolución tecnológica en las escuelas, impidiendo la colaboración, el trabajo en equipo y el intercambio de información entre sus compañeros (otros profesores), padres o alumnos (Mayorga, 2011; Madrid, 2011; Núñez, 2011).
Por lo tanto, se va abriendo un nuevo horizonte en el área educativa, donde las TIC se sitúan en el primer puesto. Vamos caminando hacia una escuela con aulas vinculadas y orientadas al uso de las tecnologías y recursos digitales, donde el profesor actúa como guía y orientador de sus alumnos, por lo que tiene que estar preparado y formado sobre la nueva realidad que habita en su centro escolar (Mayorga, 2011; Madrid, 2011; Núñez, 2011). El uso de las TIC implican una transformación sobre el profesor y, a su vez, un compromiso por parte del mismo que apuesta por el cambio, provocando la integración de dichos conocimientos en su aula (Gallego, 2010; Gámiz, 2010; G, Santiuste, 2010).
La formación del profesorado: ¿qué se espera de él?
Partimos de un triángulo. Éste permite hacer un breve esquema sobre lo que se intenta incorporar a lo que cualquier docente aspira con respecto al carácter competente que se espera de él: formación, innovación e investigación (Gallego, 2010).
El centro escolar busca unos profesores con unos rasgos de personalidad, actitudes, conocimientos y habilidades que den lugar a nuevas actuaciones. Quiere profesionales que sepan utilizar las nuevas tecnologías, que dominen nuevos conceptos informáticos y que los lleven a las aulas para ponerlos en práctica, (Gallego, 2010; Gámiz, 2010; G, Santiuste, 2010) estableciendo metas, regulando los aprendizajes de su alumnado favoreciendo sus progresos, fomentando el aprendizaje significativo y la novedad, potenciando el sentimiento de capacidad y de pensamiento crítico, atendiendo las dificultades y desarrollando nuevas actitudes positivas ante la nueva era de la información y la comunicación (Mayorga, 2011; Madrid, 2011; Núñez, 2011).
No se olvida la competencia que los profesores tienen que desarrollar: la competencia digital, ya que no solo abarca el campo de la educación, sino que engloba otras áreas
La formación del profesorado es, sin duda, el camino a seguir para incorporar los nuevos recursos tecnológicos en el mundo de la educación.

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como las profesionales, las de ocio o las de la comunicación con los demás (Gallego, 2010)
Dicha formación se orienta hacia la enseñanza de un alumnado que necesita ver en su profesor a un guía, tal y como he mencionado antes, pero además, precisa de un asesor, motivador, facilitador de recursos, adaptador y productor de materiales y evaluador de su progreso (Cebrián, 2003). El profesor que necesitan estos alumnos sabe adaptar lo que ha aprendido en sus cursos de formación sobre TIC, sabe desarrollar los talleres y facilitar los materiales de apoyo que sean necesarios para que sus alumnos, por mucha variedad o diversidad que haya, trabajen y sean, igualmente, competentes.
La formación tiene unos objetivos que, el profesorado, irá adquiriendo, como ir en busca de la mejora de las prácticas educativas, una continua actualización y reciclaje y un significativo y productivo desarrollo personal y profesional (Gallego, 2010; Gámiz, 2010; G, Santiuste, 2010).
Para finalizar con el tema de la formación de profesorado, cabe destacar que los centros educativos no cambian, lo que cambian son las personas (Fullan, 1994). A pesar de que esta cita tenga unos veinte años de antigüedad, hace referencia a nuestro presente más cercano, ya que por mucho que pasen los años, son las personas, en este caso los docentes, quienes deciden seguir progresando con el fin de alcanzar una competencia, como es la digital, para poder resolver problemas eficientemente partiendo de los nuevos recursos tecnológicos que el avance y la sociedad ponen a nuestro alcance (Gallego, 2010; Gámiz, 2010; G, Santiuste, 2010). Un centro escolar tiene que ir en busca de la innovación, la investigación y del desarrollo de una mejora en el ámbito de la enseñanza utilizando las TIC, y no dejarse llevar por el estancamiento de las viejas rutinas y maneras de enseñar.
Enseñar con las TIC, ¿es posible?
Antes de nada y si nos queremos centrar un poco más sobre cómo y de qué manera nuestros alumnos aprenden, una de las teorías pedagógicas que mejor lo explica es el constructivismo, pero, ¿conoces cuál es la relación que se establece entre esta teoría y el uso de las nuevas tecnológicas?
Para empezar, es conveniente volver y recordar la teoría para conocer más adelante, cómo los alumnos pueden aprender y cómo es posible que lo hagan empleando las TIC. Hablamos de una teoría que se basa principalmente en la construcción del conocimiento del aprendizaje, en la forma en la que se entiende y se reconoce (VV.AA, 2010), ya que son las personas las que van entendiendo todo lo que le rodea de su realidad. Tales como Vygostky con su teoría sobre la “Zona de Desarrollo Próximo” o
“Los centros educativos no cambian, lo que cambian son las personas”

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Ausubel con su aprendizaje significativo, entre otros, siguen y estudian esta teoría más minuciosamente (G, Cabezas, 2011).
Los profesores quieren que sus alumnos se abran ante los nuevos recursos que la sociedad ofrece, pero además no olvidan cómo aprenden. Saben que su aprendizaje tiene que ser prolongado en el tiempo y útil (G, Cabezas, 2011); aunque, también es verdad que muchos alumnos necesitan un poco más de apoyo y de ayuda por parte del profesor para adquirir ese aprendizaje, por lo que precisa la interacción con ese guía, el profesor (Vygotsky, 1987). Aún así, aunque nuestros niños necesiten ayuda o detectemos sus dificultades, no hay ningún impedimento para trabajar en clase con las TIC. Un profesor bien formado y cualificado puede sacar muy buen provecho de las tecnologías; puede hacer que en su clase se preste más atención si realiza actividades tanto grupales como individuales con ordenadores, tablets o con la pizarra digital interactiva, entre otros.
Igualmente, el uso de las TIC puede tener muchas ventajas, según para lo que las empleemos, ya que por un lado, equipa a los estudiantes de habilidades útiles que le servirán para su futuro profesional, y también, pueden ser una herramienta útil para resolver problemas, para realizar actividades,… (Nicholson, 1995). Actúan como mediadoras entre el alumno o el profesor con el contenido que se pretende aprender o enseñar y también entre los mismos profesores y sus alumnos. Se tiene en cuenta que es un medio para la información y para la comunicación (Coll, 2009).
Además, gracias a Internet y a la Web 2.0 junto a sus aplicaciones, un profesor perfectamente puede emplear el modelo constructivista en su clase creando blogs, wikis (G, Cabezas, 2011) o empleando una metodología PLE (Personal Learning Environment) para intercambiar información, para comunicarse con otras personas o para conseguir nuevas herramientas y fuentes de aprendizaje (Adell, 2011), lo que supone una transformación en el proceso de enseñanza- aprendizaje (Hawkridge, 1990). La utilización de Internet y de la Web 2.0 no actúa solo en la escuela, ya que abarca y satisface las necesidades formativas en muchos escenarios más, con lo que hace posible un cambio de la educación y modelos tradicionales, conduciendo en sí hacia una mejora potencial del aprendizaje y de la calidad de la enseñanza (Coll, 2009).
Conclusiones
Nosotros, los profesores, somos conscientes, o al menos deberíamos ir poco a poco siéndolo, de que la realidad de las aulas, la forma de enseñar, la manera de aprender de los alumnos y los recursos han cambiado. Tenemos ante nosotros un nuevo enfoque y se orienta hacia el conocimiento y la utilización de las tecnologías.
Los profesores quieren que sus alumnos se abran ante los nuevos recursos que la sociedad ofrece, pero además no olvidan cómo aprenden.

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Hay una gran incertidumbre por saber cómo será el proceso de enseñanza- aprendizaje, cómo serán las actividades que se programen o sobre cómo se atenderán las necesidades y las características de los alumnos.
Cada alumno tiene unos talentos determinados y únicos, muestran muchas virtudes entre las que se encuentra la creatividad y se hace presente en su proceso de aprendizaje (Robinson, 2009) y, lo mejor de esto, es que las TIC pueden jugar a su favor. Ayudan a que la enseñanza sea dinámica y diversa, atendiendo a las capacidades y talentos de nuestros niños.
Bibliografía
Cobo, J.C. (2009). El concepto de tecnologías de la información. Benchmarking sobre las definiciones de las TIC en la sociedad del conocimiento. Zer, 14(27), 295- 318.
Coll, C. (2009). Aprender y enseñar con las TIC: expectativas, realidad y potencialidades. En Los desafíos de las TIC para el cambio educativo (pp. 113-126). Madrid: Fundación Santillana.
Entornos personales de aprendizaje (PLE) | Humano Digital por Claudio Ariel Clarenc. (s. f.). Recuperado 30 de septiembre de 2014, a partir de http://www.humanodigital.com.ar/entornos-personales-de-aprendizaje- ple/#.VCsVMLQcRdj
Gallego, M.J., Gámiz, V., G. Santiuste, E. (2010). El futuro docente ante las competencias en el uso de las tecnologías de la información y comunicación para enseñar. EDUTEC. Revista electrónica educativa, (34), 1- 18.
G. Cabezas, S. (2011). ICT in Education: New Horizons to Constructivism. International Foundation Program.
La competencia digital-Jordi Adell - YouTube. (s. f.). Recuperado 30 de septiembre de 2014, a partir de https://www.youtube.com/watch?v=tjC1LOC0r1g
Madrid, D., Mayorga, M.J., Núñez, F. (2011). La competencia digital de los docentes: formación y actualización en Web 2.0. Etic@ net, (11), 213- 232.

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VV.AA. (2010). A close look in to role of ICT in Education. International Journal of Instruction, 3(2), 63- 76.