La toxocariosis es una infección causada por los parásitos Toxocara canis y Toxocara cati que afectan a perros y gatos. Cuando los humanos son infectados, las larvas migran por el cuerpo causando una respuesta inflamatoria. Esto puede causar síntomas como eosinofilia, granulomas hepáticos, infiltrados pulmonares y afectación ocular o neurológica. El diagnóstico se realiza mediante pruebas serológicas que detectan anticuerpos contra los parásitos.