Trabajo final filosofía

CENTRO DE ESTUDIOS UNIVERSITARIOS DEBAJA CALIFORNIA
Doctorado en Educación
LA CONSTRUCCIÓN DEL CONOCIMIENTO CIENTÍFICO Y LAS
IMPLICACIONES PEDAGÓGICAS COMO MECANISMO DE EVALUACIÓN
FORMATIVA PREESCOLAR
Mtra. Carmen Gabriella Quintana Marín
Maestría en Educación, Centro de Estudios Universitarios de Baja California
Instituto de Servicios Educativos y Pedagógicos de Baja California
gabriellaquintana.marin@gmail.com
RESUMEN
El artículo propone una revisión del Estado del Arte y, en consecuencia, realizar un
ejercicio reflexivo respecto de la relevancia, tanto del pensamiento filosófico, como
científico; en aras de proveer de conocimiento hipertextual. Todo ello, en función de construir
una base epistemológica para los procesos de evaluación formativa en preescolar que se
apoya en la corriente filosófica del constructivismo.
El propósito de la propuesta se perfila hacia el reconocimiento de que, como sociedad
del conocimiento, se necesita comprender tácitamente la función del conocimiento científico.
Por ende, el método de investigación científico abona a esas aspiraciones. Para ello se realizó
una investigación documental. Los resultados a los que se llegaron son un sustento
epistemológico de la naturaleza epistemológica como tal. Concluyendo que el rigor
metodológico es la clave de toda esta dinámica.
Palabras clave: ciencia, conocimiento, evaluación, filosofía, método.
ABSTRACT
The article proposes a review of the State of the Art and, consequently, to carry out
a reflective exercise regarding the relevance of both philosophical and scientific thought; in
order to provide hypertext knowledge. All this, in function of building an epistemological
base for formative evaluation processes in preschool that is supported by the philosophical
current of constructivism.
The purpose of the proposal is outlined towards the recognition that, as a knowledge
society, it is necessary to tacitly understand the function of scientific knowledge. Hence, the
scientific research method supports these aspirations. For this, a documentary investigation

was carried out. The results that were reached are an epistemological support of the
epistemological nature as such. Concluding that methodological rigor is the key to all this
dynamic.
Keywords: science, knowledge, evaluation, philosophy, method.
INTRODUCCIÓN.
Las pretensiones del presente proyecto apelan al reconocimiento epistemológico que
es sumamente necesario en ejercicios como los que se elaboran en función de los procesos
de evaluación formativa en preescolar. Para tal propósito, es menester reconocer la situación
actual que competen a las premisas metodológicas y, en consecuencia, respecto del escenario
de la construcción del conocimiento que es la base de todo.
Dada la propuesta académica acotada en el párrafo anterior, se reconoce la relevancia
de este tipo de ejercicios epistemológicos, con el fin de, en primera instancia, proponer un
reconocimiento hipertextual del escenario actual de ese tópico y; en segunda instancia,
estimular precisamente, en varios niveles ese espíritu de hipertextualidad que se ha señalado.
Resulta pues importante, este resultado que se logre a partir de esta investigación para
que se revisen, analicen y refuten, de ser necesario; algunas ideas que requieran otros
investigadores y/o docentes y, en consecuencia; se puedan mejorar los niveles de diálogo
académico. A fin de cuentas, eso es parte del dinamismo epistemológico que será
desarrollado a lo largo del tiempo.
Luego entonces, lo que se pretende aportar en este trabajo, es sustentar la correlación
entre la dinámica de los procesos de construcción del conocimiento científico, para vincularlo
de manera pertinente, con las implicaciones pedagógicas que revisten en el trabajo propio de
los mecanismos de evaluación formativa en preescolar. Todo ello, bajo el escenario
epistemológico de la teoría constructivista.
Por ello es que se reconoce la factibilidad del proyecto en ese sentido. Se debe
subrayar que el objetivo impera en el hecho de que se reconocerá la vertiente del desarrollo
de la construcción del conocimiento dentro de las acciones principales de la actividad del
método científico de carácter hipotético. Así, se concluirá que es tarea del investigador,

recopilar un cuerpo teórico y partiendo de ello, argumentar epistemológicamente un
fenómeno estudiado.
Y precisamente, reconociendo que esto es una labor de revisión epistemológica, se
requiere en primera instancia de un acto metodológico base que consiste en la revisión de un
Estado del Arte que se correlacione con las pretensiones académicas de este proyecto. Es lo
que ineludiblemente se realizó en este artículo y, por ende, queda plasmado a lo largo del
texto en cuestión.
El procedimiento fue concretamente revisar algunas referencias que permitieran
elaborar un esquema reflexivo y discursivo, para tal fin, se realizó una revisión de fuentes
directas dentro de un esquema de análisis hermenéutico y epistemológico dadas las
necesidades del proyecto y relacionado con el tema de interés como mecanismo de
investigación.
A raíz de ese ejercicio delimitado en los párrafos anteriores, se reconoce la pertinencia
concluyente de que las implicaciones teóricas son de gran peso. No solo por lo que compete
a las cuestiones de rigor de revisión del Estado del Arte pertinente y referenciado en el
apartado correspondiente, sino porque permite esencialmente, reconocer la función del
conocimiento científico argumentativamente.
Al reconocer y aplicar los referentes teóricos pertinentes, así como las
consideraciones claves de lo que se inscribe en el método científico; es claro que a partir de
ello fue plausible establecer ciertos preceptos pedagógicos en función de los referentes de los
procesos de evaluación formativa en preescolar. En ello reside la praxis de todo el ejercicio
metodológico de investigación y delimitación teórica.
Para lograr el cometido del proyecto sustentado en el artículo se trabajará en las
siguientes ideas argumentativas. En primer lugar, sobre el entendimiento, según autores, del
escenario actual de la filosofía, de tal manera que se entiende la premisa de que el
conocimiento no puede ser inasequible. De ahí la importancia del pensamiento filosófico y
científico.
Sobre todo, porque no se debe olvidar que se vive en una sociedad del conocimiento
como un ente epistemológico. De ahí que sea imperativo revisar las funcionalidades del
conocimiento científico que resulta de una investigación científica como creadora de ese

conocimiento que requiere la sociedad. Lo anterior, por supuesto, descansa en ciertos
referentes teóricos dentro de una metodología científica, de carácter hipotético. De ello se
subraya la pertinencia de las consideraciones claves del método científico que abonan al tema
propuesto de rescatar preceptos pedagógicos como referente evaluativo.
ESTADO DEL ARTE O PRECISIONES TEÓRICAS
Para la parte que compete a la revisión del Estado del Arte y en consecuencia del
lineamiento de lo que es el mecanismo de reflexión sobre la relevancia del quehacer del
pensamiento filosófico y científico para abordar determinados aspectos fenomenológicos que
van, desde la estructuración de un cuerpo teórico, hasta la parte de la praxis nominal de la
razón de todo este esfuerzo metodológico, es menester que se reconozca como punto de
partida, lo que debe considerarse como parte del escenario actual de la filosofía y para ello,
Azcárraga (2003), afirma que la filosofía de hoy no se encuentra en su mejor momento,existe
una decadencia, una pérdida de su esplendor frente al auge y el progreso de la ciencia, tanto
así, que como se verá más adelante, puede ser tema de debate. Se parte de la idea de que hay
cierta crisis.
Lo cierto, en todo esto es que, independientemente de la crisis que se esté viviendo
desde el plano filosófico, ello no debe ser un componente restrictivo del conocimiento como
Azcárraga (2003), sostiene que el conocimiento no debe considerarse como inasequible en
el sentido de que se nos cierre todo acceso a él. Y parte del recurso epistemológico reside en
esas áreas de oportunidad que se exploran en este artículo.
Lo que debe quedar claro es que un salvoconducto epistemológico en todo esto, es lo
que compete a la importancia del pensamiento filosófico que se inscribe en desarrollarse un
saber determinado, el cual pueda evidentemente sustentarse desde la perspectiva de la
validación del conocimiento científico pertinente, como en este caso, lo que alude a los
preceptos pedagógicos; sin que, por ello, claro está, se abandone o decante el espíritu crítico
y humanista.
Puesto que lo que interesa en esta dinámica reflexiva es la posibilidad del
conocimiento tácito, es pertinente que dentro del esquema del pensamiento filosófico se apele
a una corriente dada; por ejemplo, la filosofía de la ciencia. Y ello con la finalidad de tratar

el filtro del falsacionismo y el reconocimiento de un paradigma, idea de la cual Asensi y otros
(2002) argumentan que es mejor enfocarse en ello en vez del criterio de verificación
definitiva.
Es importante en todo esto, reconocer la importancia del pensamiento científico que
se complementa en función del desarrollo del pensamiento filosófico, particularmente en
relación al rubro de la filosofía de la ciencia. Para ello se debe superar categóricamente el
debate de la relación entre filosofía y ciencia; al menos en el sentido de superar para este
ejercicio esas premisas y avanzar en los objetivos del mismo.
Es por ello que resulta interesante, en ese sentido, partir de la idea de Bunge (2014)
que declara que en la ciencia descansa un conjunto de ideas que construyen lo que se
denomina conocimiento racional, además de sistemático, verificable y falible, que es el
soporte de todo saber. Y que es el punto de partida para la delimitación de un cuerpo teórico
y la dirección de la praxis a ejecutar en este proyecto.
Además, dentro del rigor del pensamiento científico, se debe tener en claro la idea de
lo que Bunge (2014) sostiene de la ciencia de que se debe considerar una ramificación clave
de la misma en tanto que, ciencias formales y ciencias fácticas, ya que de ello dependerá la
naturaleza de todo proceso de investigación. Y precisamente en esto último descansa lo que
se revisa más adelante, el recurso de la metodología de investigación.
A propósito, la metodología de investigación, como se revisará puntualmente
después, descansaría en los preceptos de lo que Bunge (2014) sostiene, respecto de que se
pretende epistemológicamente demostrar y/o probar una fenomenología revisada; y la
ciencia lo que busca es en esencia, verificar hipótesis que es la labor de todo proyecto de
investigación.
Cabría preguntarse ¿por qué es importante lo que se ha desarrollado hasta aquí? Y la
consideración sería en el sentido de que, debemos tener en cuenta que somos una sociedad
del conocimiento y que, por ende, respondemos a un ente epistemológico. De hecho, Aguilar,
Bolaños y Villamar (2017) manifiestan que la sociedad del conocimiento es alimentada por
ese resultado epistemológico.
Todo este escenario lleva a la premisa de abordar teóricamente lo que se concibe
como la función del conocimiento científico en todo este proceso de la gestión, tanto del

devenir del pensamiento filosófico, como científico. Y es pertinente no olvidar, desde el
plano historicista, del cual Aguilar, Bolaños y Villamar (2017) declaran debe ser la de los
filósofos naturalistas de Jonia en Grecia, como esencia y referencia.
Luego entonces, es claro que la relevancia de la funcionalidad científica descansa en
la posibilidad de que se elabore un conocimiento de carácter social que dé respuestas a
necesidades fenomenológicas. En ese sentido, es interesante que Asensi y otros (2002)
manifiestan como una posibilidad, superando ciertas convenciones, responsabilidad de la
ciencia para describir una realidad, dicho mecanismo.
Como se infiere, a partir de este momento intelectual y metodológicamente, se
rescatan los preceptos hacia la investigación científica, la cual es parte de la creación de un
conocimiento dado. En este caso, se hace el rescate de un modelo teórico que permita, en la
praxis, gestionar los preceptos pedagógicos dados. Esa es la bondad metodológica de la
investigación.
Queda claro pues que, se requiere tratar la noción de la construcción del conocimiento
acotado a los objetivos planteados y un recurso para ello es la investigación científica como
creadora de conocimiento. Luego entonces, la ciencia; Asensi y otros (2002) sostienen que
constituye la base que va más allá de un sistema de ideas, es producto de una actividad
científica y filosófica.
Además de ello, Asensi y otros (2002) plantean esquemáticamente que el proceso de
investigación tiene su origen en el momento en que se plantea un problema sin que se
conozca su solución. Y en este caso, en este momento del artículo se contraviene hacia la
intención de delimitar los alcances de las implicaciones pedagógicas, en función de cómo se
podría diseñar un mecanismo de evaluación formativa en preescolar.
Luego entonces, el punto de partida es evidentemente revisar aspectos teóricos puesto
que como proponen enfáticamente Aguilar y otros (2017) de las revisiones teóricas nos
llevan a la construcción del conocimiento, dígase, en un mecanismo de contextualización.
En cierto sentido, este apartado está llevando hacia ese logro sustancialmente.
Finalmente, teniendo en consideración los beneficios de la investigación científica;
es factible tener en alta estima que precisamente todo conocimiento científico, descansa en
un soporte teórico que ineludiblemente, abarca ciertas referencias fenomenológicas y como

corolario, en nuestras intencionalidades epistemológicas, se pueden revisar los preceptos
pedagógicos que sean necesarios.
Es imperativo considerar en este ecosistema metodológico, lo que contribuye a la
delimitación y rescate de los referentes teóricos pertinentes que tendrían cabida en le gestión
dentro de un método, por ejemplo, hipotético. En los siguientes párrafos, dentro de este
esquema de revisión del Estado del Arte, se pondrán a consideración algunas líneas
argumentativas al respecto.
Para introducir a ciertos postulados teóricos, que darán muestra de cómo fueron
evolucionando históricamente las intencionalidades epistemológicas; se debe
ineludiblemente iniciar con Popper quien, Asensi y otros (2002) afirman que él llevó a la
polémica, sobre la idea de irracionalidad. Debe reconocérsele el imperativo de encontrar
un estatuto epistemológico, y a partir de ello, tener en consideración el espíritu revisionista
de los esquemas teóricos que se circunscriben en la noción de los paradigmas.
De lo anterior, la filosofía de la ciencia, que es parte de nuestro interés del
pensamiento filosófico y científico; se perfila hacia el debate de la revisión de los postulados,
lo que sería la contraparte de Popper y que señala Briones (1996) que para Kuhn todo se
sustenta en paradigmas que permiten una investigación científica. Y es esa idea la que le da
un espíritu crítico a todo esto.
Se ha señalado en el párrafo anterior, la idea de que, en términos historicistas, se
puede reconocer que se han venido dando diversas expresiones en ese contexto, para lo cual,
se considera lo que afirma desde el punto de vista filosófico Senior (2001) quien sostiene que
tanto el racionalismo, como el empirismo, han dado cuenta de ese ejercicio reflexivo en el
siglo XX, en donde de manera particular, la matemática de la vida ha impactado, y alentado
la ciencia.
Se puede inferir que, lo anteriormente subrayado hace hincapié a ese comportamiento
epistemológico que se sustrae de un ejercicio que da como resultado el deseo de saber, esto
es, dar una respuesta, al menos hipotética, sobre un fenómeno que se está estudiando en un
momento dado y que, muchas veces requiere de la ruptura esquemática de ciertos paradigmas
para poder avanzar. En ello reside la dinámica de lo que es la labor de la metodología de la
investigación claramente.

Rescatando ideas de los párrafos anteriores, es interesante analizar el cómo se dio esa
transición del paradigma matemático que predominó durante muchísimo tiempo. Al respecto
responde Senior (2001) en ese sentido que el trabajo de Saccheri, sin pretenderlo en un
inicio, abrió la puerta a esa posibilidad de refutar la teoría euclidiana y dio pie no solo al
cambio contenido en el paradigma sino a la predisposición de que es factible cuestionarse
sobre cualquier paradigma.
Se ha llegado en cierto modo, a la parte medular del artículo, en tanto que desarrollo
de ideas. Y ello obedece a la noción de rescatar y sustentar ciertas consideraciones claves
sobre lo que está inscrito en el rigor del método científico. Sobre todo, porque se corresponde
con la idea vertebral del trabajo en cuestión.
Se debe tener en cuenta, de entrada, lo que es concebido en términos generales,
aunque suficientes, dadas las características de este artículo, como método científico.
Nominalmente, Asensi y otros (2002) sostienen la idea última de obtener un conocimiento;
aunque estas puedan abordarse, desde dos teorías diferentes. Y como se puede notar, es algo
que se está desarrollando en este proyecto.
Es más, respalda la noción, aunque con un enfoque determinado, Aguilar y otros
(2017) al sostener la interrelación entre las disciplinas científicas y el quehacer filosófico
dentro del esquema epistemológico de métodoinvestigación. Que es lo que quedó manifiesto
cuando se reflexionaba sobre la importancia del pensamiento filosófico y científico
paulatinamente.
Ahora bien, salta a la vista la inquietud respecto de cómo es que se elaboran los
contenidos hacia un esfuerzo de construcción y/o refutación de un cuerpo teórico, partiendo
de la actividad del método científico y debemos partir de la idea que Bunge (2014) sostiene
que la investigación como tal, no debe categorizarse como algo errático sino más bien
metódico; luego entonces, en el tratamientode las hipótesis, estos deben de sustraerse de los
hechos. Lo cual evitaría ciertos dolores de cabeza en la labor académica.
Lo primero que se exige en este proceso y/o protocolo es el trabajar con la noción de
la hipótesis. Para fines de delimitación conceptual, podemos rescatar la idea de Bunge (2014)
quien considera que toda información sustraída y que descansa en una etapa inicial en

hipótesis, respecto de una realidad dada, debe tratar de comprobarse. Y es parte sustantiva
de este proyecto.
Por ende, la construcción de un cuerpo teórico descansaría en el espíritu del rigor para
darle soporte a la ciencia con ese nuevo conocimiento plausible. En el caso de Bunge (2014)
todo tiene que ver con tener en cuenta que el método científico no ofrece recetas infalibles
para llegar a una verdad dada y por ello debe el investigador, apegarse a un esquema de
trabajo dado en esa premisa revisada en este mismo párrafo.
El investigador científico, en ese sentido, deberá de manera inexorable, apegarse al
espíritu de comprender, y también, al espíritu epistemológico dado para, poder si es factible,
sustentar una hipótesis y/o construir un cuerpo teórico pertinente. Al respecto Bunge (2014)
sostiene que la hipótesis es resultado de un enunciado factico y no de una mera enunciación
dada sin sustento metodológico. Interesa pues al investigador darle soporte.
Hasta aquí, se ha hecho referencia a la parte que deriva de la construcción y posible
sustentación de las hipótesis; es menester hacer lo mismo en función de la parte de la teoría.
Sobre todo, entendiendo que eso es parte de la labor del investigador y, se debe considerar lo
que Bunge (2014) afirma en el sentido de que este no debe asumirse como un conjunto de
cuestiones de hechos sustraídos de un fenómeno sino de un referente hipotético como tal.
No se debe olvidar que todas estas variables que se han revisado en el presente
apartado deben de estar insertas en la idea de que, se tiene que construir para intereses
epistemológicos, lo que se concibe como lo hace Carbajosa (2011) al sostener que debemos
entender la esencia del paradigma como marco referencial y en ese orden de ideas, el
esfuerzo investigativo debe de rendir frutos.
El paradigma, en ese sentido, se corresponde con la idea de que, es la razón de ser del
espíritu de la inquietud epistemológica de todo investigador. Como sostiene Carbajosa (2011)
en el sentido de que nos lleva al referente de las formas de investigar y en ese camino de la
aspiración al conocimiento, debe uno tener cierto dominio de lo que se pretende desarrollar,
como el proyecto en cuestión.
En el presente caso, y dadas las necesidades de la pertinencia metodológica, de
acuerdo a los planteamientos teóricos en función de lo que es la labor del investigador, es
pertinente considerar la metodología de enfoque cualitativo, y para ello se debe considerar lo

que Carbajosa (2011) argumenta que ello le da sentido y significación a las personas que se
evalúan y es parte de la razón del proyecto de evaluación.
Además, la pertinencia de aplicar este enfoque obedece a lo que Carbajosa (2011)
menciona sobre que, a partir de la evaluación cualitativa,es posible reconocer, por ejemplo,
estructuras cognoscitivas, todo ello responde a las necesidades docentes, por supuesto y es
lo que se pretende lograr definir. Sobre todo, porque en los procesos de evaluación se
considerarían ítems de las cualidades de los niños en preescolar.
Hasta este punto, de lo que va del artículo, se han abordado evidentemente
consideraciones filosóficas y científicas en cuanto a la dinámica del pensamiento humano. Y
como corolario de ello, se ha precisado de una dinámica de consideraciones metodológicas;
ahora es pertinente abordar algunos preceptos pedagógicos como referente de un mecanismo
de evaluación.
Luego entonces, como punto de partida, en lo que respecta a los preceptos
pedagógicos, Aguilar y otros (2017) sostienen que las operaciones cognitivas son el soporte
de esa dinámica de evaluación que estimulan actividades como la memorización e
interpretación de un fenómeno, lo cual, hace hincapié en que se debe ser capaz de discernir
sobre posibles construcciones de un mecanismo de evaluación.
Con todo esto, lo que se debe tener en consideración es lo que compete a los preceptos
fenomenológicos que permitirían construir un esquema de evaluación con diversas
teorizaciones; a partir de la premisa de los fundamentos necesarios y que Aguilar y otros
(2017) mencionan que, en la dinámica educativa, ha sido este un aspecto de reflexión por
parte de la filosofía y en donde la premisa del Estado, que descansa en la función social, ha
sido clave.
Y a propósito de evaluación dentro del nivel preescolar, Aguilar y otros (2017)
sostienen que ellos consisten en poder determinar en cierto grado cuáles han sido los
contenidos educativos que han podido asimilar los niños y, en consecuencia, tener la
capacidad el docente de hacer una evaluación integral. Ese es el punto de origen que se ha
de considerar en la gestión curricular. Todo este escenario se reconoce dado el tratamiento
de este apartado desarrollado en el documento. Se considera pues, que se tiene la posibilidad
de conocer los referentes mínimos para abordar un proyecto como este.

Por todo esto, es una premisa concluyente que, se considere el conocimiento
adquirido por los alumnos de preescolar, desde la perspectiva del constructivismo, como
garante de, los procesos de evaluación cualitativa. Para ello debe tenerse en consideración lo
que Carbajosa (2011) sostiene en el sentido de que precisamente el conocimiento que se
evalúa, se construye en un escenario de contextualización de carácter pedagógico.
Luego entonces, como Carbajosa (2011) afirma debe de tenerse en cuenta que la
evaluación cualitativa es el mecanismo metodológico viable para tales propósitos, porque se
apega al establecimiento de las condiciones óptimas para la gestión de un pensamiento
crítico. Esa será la directriz pedagógica que se debe de implementar en los esfuerzos de
evaluación formativa preescolar.
CONCLUSIONES
De acuerdo a lo desarrollado en el presente artículo, queda claro que, es
fundamentalmente necesario gestionar un esquema de construcción de una base de
características epistemológicas, que permitan, entre otras cosas, implementar los alcances
dados de los procesos de evaluación formativa, como es el caso. Ha quedado claro cuando se
ha revisado el Estado del Arte.
Y es que, precisamente, la base epistemológica se sustrae del trabajo de la
investigación científica bajo una metodología de enfoque, dadas las necesidades, de carácter
cualitativo. Es a partir de ello que se delimita el fenómeno a estudiar y los esquemas de
evaluación pertinente desde la perspectiva teórica y práctica. Los preceptos pedagógicos son
la razón de ser de esto último.
Todo esto se ramifica epistemológicamente cuando se rescata la correlación existente
entre lo que viene siendo la dinámica de los procesos inherentes a la construcción del
conocimiento científico dado. Esto es, a partir de que se es capaz de delimitar el cuerpo
teórico, no solo de la parte de la metodología de la investigación a aplicar en el proyecto sino,
en lo que compete a la parte de la fenomenología a estudiar; todo tiene cabida.
Ahora bien, desde el momento en que se considera lo anteriormente señalado, es
menester que se reconozca y asuma proactivamente el escenario actual de la filosofía de la

ciencia, así como de la propia ciencia; para que se identifique intelectualmente que se ha
“superado” el debate sobre los alcances de tal o cual y, enfocarse a las cuestiones de madurez
epistemológico.
Debe quedar claro, que la delimitación de lo que se conoce como cuerpo teórico,
precisamente se complementa con la dinámica de la dirección estratégica de la praxis dentro
de un ejercicio de investigación como el que se avoca en este ejercicio. Todo para conocer y
reconocer la naturaleza de los esquemas factibles de evaluación formativa escolar.
Queda manifiesto que la investigación científica, en todo este escenario, ha permitido
conocer lo que se inserta en una dinámica epistemológica y al mismo tiempo, acerca al
diseño, implementación, análisis, evaluación y reorganización; del bosquejo que permita los
procesos de evaluación formativa en preescolar.
Y a propósito de ejercicio metodológico, se reconoce que, en la labor educativa, en
lo que compete a la parte del Estado del Arte, ha quedado claro que nadie está exento de
limitaciones de cualquier tipo. De hecho, es parte de las actividades de un investigador. Y
ellas en términos generales se inscriben en el desarrollo de la praxis hermenéutica.
Sobre todo, entendiendo que el rubro de la filosofía de la ciencia, por mencionar uno
de tantos cuerpos teóricos que se involucran en una temática como la desarrollada en este
artículo, lleva al esfuerzo de delimitar lo mejor posible, los requerimientos de información
pertinentes para el Estado del Arte. Sin embargo, eso es parte del comportamiento intelectual
del investigador.
Ello da pie a seguir subrayando la idea de que cualquier tipo de referente relativo a la
noción de paradigma debe constantemente monitorearse. Esto es, se ha construido un Estado
del Arte que, independientemente de que el investigador se cuestione sobre la satisfacción
dada de los requerimientos de información trabajados por él, está abierta la posibilidad de
que en la labor de hipertextualidad otros investigadores profundicen en lo aquí propuesto.
Se ha logrado en esencia, el cometido señalado en este ejercicio de reflexión,
investigación y argumentación de cara al proyecto mismo. Se tienen las pautas sustanciales
para que se decida diseñar, aplicar, analizar, evaluar y reorganizar cualquier tipo de
mecanismo de evaluación formativa en preescolar. Y, sobre todo, en el entendido de que se
está ante una dinámica teórico-práctica inagotable.

Los objetivos, por ende, quedan satisfechos en ese sentido. Se llega a comprender con
pulcritud, las bondades de la epistemología y ello inserto en la teoría filosófica del
constructivismo que es una dinámica filosófica que se adapta a los procesos pedagógicos de
evaluación dada la metodología cualitativa que se permite gestionar. El enfoque
epistemológico se sustenta en ese sentido.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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