La web 2.0 se basa en la comunicación entre usuarios a través de redes sociales y permite que los usuarios creen y compartan contenido. La web 3.0 está relacionada con la semántica y hace que los contenidos sean accesibles a través de múltiples aplicaciones, convirtiendo la red en una base de datos inteligente. La diferencia principal es que la web 2.0 facilita la interacción social mientras que la web 3.0 busca proporcionar una experiencia personalizada identificando las preferencias de los usuarios.