🗣️ Vive este tiempo final de la Cuaresma con nuestro Viacrucis eudista de realidades. En él te proponemos algunas situaciones actuales, iluminadas por un pensamiento de san Juan Eudes.🙏🏽
Descarga y comparte nuestra espiritualidad.
Vive este tiempo final de la Cuaresma con nuestro Viacrucis eudista de realidades.
1.
2. 2
JUNTOS CAMINAMOS HACIA LA CRUZ DEL SEÑOR
VIA CRUCIS
INTRODUCCIÓN
Como discípulos, estamos llamados a abrazar la cruz y a seguir a nuestro
Maestro por el camino de la cruz. Se trata de un camino de devoción,
como nos lo propone san Juan Eudes, es decir, de entrega completa al
Espíritu de Jesús. De esta manera, viviremos la Pascua del Señor en
nuestros corazones.
Vivimos esta experiencia haciendo camino juntos. También nuestra vida,
en medio de las cruces de hoy, podemos experimentar en los hermanos
la ayuda de Simón de Cirene, la disponibilidad de la Verónica, la
compasión de las santas mujeres de Jerusalén, la compañía y cercanía de
María quien, junto al discípulo amado, junto a María Magdalena y las
otras mujeres permanecieron al pie de la cruz.
Que este Vía Crucis de realidades nos ayude a experimentar el amor
redentor del Señor, que se manifiesta hasta dar la vida por los hermanos.
MEDITEMOS CON SAN JUAN EUDES
Meditación para el Viernes Santo (San Juan Eudes, OC 3, 392-394)
Es el último día (momento) de la vida temporal de nuestro Señor
Jesucristo. Es Jesús, nuestro Dios y Señor, que agoniza y muere en la
cruz. Adorémoslo en el misterio de su vida mortal, en su último día, en
su última hora, en sus últimos momentos, en sus postreros
pensamientos, palabras, acciones y sufrimientos, en su último suspiro.
Démosle gracias, unidos a María y los santos, por cuanto dijo, hizo y
sufrió mientras permaneció en este mundo para gloria del Padre y para
nuestra salvación.
Pidámosle perdón en nombre propio y en nombre de toda la
humanidad, por las injurias y ultrajes que, por nuestra causa, recibió en
esta tierra. Hagamos la intención de hacer y sufrir cuanto él tenga a
3. 3
bien enviarnos. Pongámonos de rodillas ante Jesús, que agoniza y
muere en la cruz.
Roguémosle que nos dé su santa bendición antes de salir de este
mundo. Que su bendición destruya en nosotros todo pecado y toda
inclinación al mal. Bendiga nuestro cuerpo y nuestro espíritu, nuestros
ojos y oídos, nuestra lengua, nuestras manos y nuestros pies, nuestra
memoria, entendimiento y voluntad para que en adelante nos sirvamos
de ellos sólo para su gloria.
Digámosle que queremos morir con él y por él. Morir a cuanto le
desagrada. Que imprima en nosotros la imagen de su santa muerte y
que su muerte nos haga morir santamente.
Dirijámonos también a María. Pidámosle perdón por la muerte cruel de
su Hijo, por los dolores amargos que ha debido sufrir por causa nuestra.
Entreguémonos a ella manifestándole que queremos servirla y honrarla
toda nuestra vida.
En este día nuestro Señor, en la cruz, nos dio a María en calidad de
madre, y nos entregó a ella como hijos, cuando dijo al discípulo amado:
Esta es tu Madre; y a ella: este es tu hijo. Agradezcamos a Jesús
habernos dado por madre a su propia madre. Demos gracias a María
por habernos aceptado como hijos. Pidamos a Jesús nos haga partícipes
de su amor filial para con ella. Roguemos a María que nos mire, ame y
considere siempre como a sus hijos, aunque indignos de serlo. Que nos
proteja y conduzca en todo, y nos sirva siempre de Madre en la vida y
en la muerte. Amén.
4. 4
I Estación: JESÚS ES
CONDENADO A MUERTE
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz redimiste al
mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima Madre
al pie de la cruz.
Veo cómo todas las cosas se confabulan contra ti y se dedican a hacerte
sufrir; que eres como el blanco de todos los ultrajes y contradicciones.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
¿Y yo quién soy para juzgar?
Muchos vivimos pendientes en que se equivocan los demás, para reírnos,
criticarlos y juzgarlos, pero sobre todo muchas veces nuestras críticas se
convierten en señalamientos y juicios, hoy Jesús nos invita a mirarnos en el
espejo y vernos a nosotros mismos antes de señalar y de juzgar. Vivamos
dispuestos a compartir la misericordia de Dios con los demás.
ORACIÓN:
Señor Jesús, ayúdanos a aceptar y comprender los errores de los demás, tú que
eres misericordioso como el Padre, danos la gracia de poder vivir sin juzgar y
señalar a nuestros hermanos, que no condenemos a nadie injustamente. Tú
que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
5. 5
II Estación: JESÚS CARGA LA
CRUZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
¡Qué sumisión la tuya a la voluntad de tu Padre! ¡Qué humillación la de
tu alma santa a la vista de todos los pecados del mundo, que te echaste
encima! ¡Cuánta caridad hacia nosotros, qué paciencia y mansedumbre
para con tus enemigos!
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Asumir con responsabilidad los compromisos
Jesús toma, abraza y carga la Cruz con amor, pues precisamente esa era su
misión, su compromiso de dar la vida por la Redención de toda la humanidad.
Muchos ante las responsabilidades y compromisos, se sienten incapaces y
optan por dejar todo a medias, o tirado y desisten. Jesús nos enseña a afrontar
con valentía, amor y disposición los compromisos en medio del dolor.
ORACIÓN:
Señor Jesús, danos espíritu de fortaleza y amor, para asumir con amor nuestra
cruz de cada día, que podamos responder a nuestros compromisos y
responsabilidades siempre con la mejor disposición y entrega. Tú que vives y
reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
6. 6
III Estación: JESÚS CAE POR
PRIMERA VEZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
«Te amo, amantísimo Jesús, te amo, bondad infinita, te amo con todo
mi corazón, con toda mi alma y con todas mis fuerzas, y quiero amarte
más y más» (San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Fracasos que nos desaniman
Jesús, caes bajo el peso de la Cruz, pero te levantas y sigues adelante. Todos
sabemos que en la vida hay momentos de altas y bajas, momentos tristes y
otros alegres, unos más fáciles y otros algo complicados, pero, aunque
sintamos que no podemos, es momento de levantarnos, limpiarnos y seguir
adelante, un cristiano no se deja vencer fácilmente, por el contrario, estamos
llamados a luchar siempre con esperanza. ¡Ánimo! que con Jesús todo es
posible.
ORACIÓN:
Señor Jesús, danos ánimo cuando pareciera que no podemos seguir en el
camino. Que en las crisis y los fracasos que podamos experimentar en nuestra
vida, podamos levantarnos y seguir adelante como tú lo hiciste. Tú que vives
y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
7. 7
IV Estación: JESÚS SE
ENCUENTRA CON SU MADRE
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz redimiste
al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima Madre
al pie de la cruz.
“¡Jesús, Hijo único de Dios e Hijo único de María! Te contemplo y adoro
viviendo y reinando en tu santísima Madre, como el que eres y lo
realizas todo en ella”. (San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
El dolor de María, el dolor de tantas madres
En el camino hacia el Calvario, Jesús, te encuentras con tu Madre. Sufre al
verte azotado, coronado de espinas, condenado y cargando el madero de la
cruz. Es la Madre Dolorosa que sufre en el silencio y se acuerda las palabras
de Simeón cuando fuiste presentado en el Templo, es la mujer fiel que confía
siempre en el Padre Celestial. Hoy tantas madres sufren el abandono y olvido
de sus hijos, y en muchos casos el verlos alejarse en caminos de perdición, en
las pandillas, las drogas y el alcohol.
ORACIÓN:
Señor Jesús, que junto a tu cruz viste el dolor de tu afligida Madre, mira con
amor el dolor de tantas madres que sufren en silencio el ver a sus hijos
perderse en malos pasos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
8. 8
V Estación: JESÚS ES
AYUDADO POR EL CIRINEO
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
madre al pie de la cruz.
“Te adoro, te amo y te bendigo en todos tus sufrimientos. Pero, sobre
todo, contemplo y adoro en ti las santas disposiciones con que has
padecido”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Compartir y apoyar a los hermanos
La Cuaresma nos invita a vivir la Caridad, la solidaridad y limosna, a ser
desprendidos y compartir de lo que tenemos, no nos quedemos en lo material
y económico ya que al escuchar al hermano estamos siendo hoy como Simón
de Cirene, que ayudó a aligerar el peso de la Cruz a Jesús. Que en medio del
estrés y la falta de tiempo que muchos vivimos podamos dedicar espacios para
compartir, dialogar y ayudar a nuestros hermanos que sufren.
ORACIÓN:
Señor Jesús, haz que podamos vivir con disposición y generosidad, y que como
Simón de Cirene ayudemos a nuestros hermanos sin esperar nada a cambio.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
9. 9
VI Estación: LA VERÓNICA
LIMPIA EL ROSTRO DE
JESÚS
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Tú eres, Jesús purísimo, la pureza misma y con purísimo amor me
amas. También yo quiero amarte con el amor más puro posible”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Limpiar el rostro de los migrantes y marginados
Muchos vivimos de apariencias pensando en agradar a los demás, pero se nos
olvida que debemos agradar a Jesús. Hoy estamos llamados para que sin
importar el qué dirán y las críticas seamos valientes como la Verónica que no
dudo en acercarse a limpiar el rostro del Señor. Que podamos limpiar el rostro
de Jesús en tantos que sufren la exclusión, la marginación, el rechazo, la
xenofobia, la pobreza y la discriminación de todo tipo.
ORACIÓN:
Señor Jesús, que sufres en el más pobre, en el extranjero, en el habitante de la
calle, en el enfermo, en el privado de libertad y en tantos hermanos, haz que
podamos como la Verónica limpiar en ellos tu rostro, y experimentar la
ternura de Dios en lo más desfavorecidos. Tú que vives y reinas por los siglos
de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
10. 10
VII Estación: JESÚS CAE
POR SEGUNDA VEZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Quiero, amado Jesús, agotar y consumir todas las fuerzas de mi
cuerpo y de mi corazón en amarte”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Depresión, soledad y miedo
Jesús vuelve a caer bajo el peso de la Cruz y en esta segunda caída pensemos
en tantos jóvenes y adultos que sufren la depresión, la soledad y en sus
corazones abunda el miedo. Muchos de nuestros jóvenes se sienten solos y sin
fuerzas para seguir en la vida, es momento de pensar en tantos que sin tener
una mano amiga han caído en el suicidio.
ORACIÓN:
Señor Jesús, fuerza de los débiles, te pedimos por todos aquellos que hoy se
sienten solos, desanimados, sin fuerzas, deprimidos y angustiados sin saber
que hacer con sus vidas, tú que afrontaste con amor la cruz, ayúdanos a cargar
con las nuestras con el mismo amor. Que vives y reinas por los siglos de los
siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
11. 11
VIII Estación: JESÚS
CONSUELA A LAS MUJERES
DE JERUSALÉN
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
madre al pie de la cruz.
Te ruego que unas mis penas y trabajos a los tuyos; que con los tuyos
bendigas los míos; que te sirvas de ellos como si fueran tuyos para dar
gloria a tu Padre y en honor de tu santa pasión. (San Juan Eudes, OC,
Vida y Reino)
El gran valor de la mujer en nuestra sociedad
Jesús consuela a las mujeres. Desde la Cruz eran unas cuantas que le
acompañaban. Pensemos en tantas mujeres que luchan día a día como madres
solteras, niñas y jóvenes víctimas de incestos y abusos, mujeres que por
diversas situaciones de vida venden su cuerpo, para que puedan dejarse
abrazar por la Misericordia de Jesús y puedan mirar la vida con esperanza y
seguir adelante.
ORACIÓN:
Señor Jesús, consuelo de los que sufren mira el dolor de tantas mujeres, y
tiende hacia ellas tu mirada bondadosa para que levantadas de su condición
puedan alabarte por siempre. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
12. 12
IX Estación: JESÚS CAE POR
TERCERA VEZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Te veo tan abrumado de dolor y tormentos en cada porción de tu
cuerpo y de tu alma que pareces trocado en dolor y en sufrimiento. Por
eso el Profeta le llama varón de dolores”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Desempleados, frustrados sin esperanza
Pensemos en Jesús cada vez más débil y sin fuerzas cae por tercera vez.
Muchas personas se sienten frustradas y fracasadas por no contar con la
oportunidad de estudiar, otros siendo profesionales se les ha hecho difícil el
conseguir un empleo. Que cuando sientas que ya no hay salida puedas mirar
la Cruz del Señor y confiar en que después del dolor viene la gloria, confía y
no pierdas la fe.
ORACIÓN:
Señor Jesús, esperanza de los que en ti creen, te pedimos por todos los que
estudian y los profesionales que se sienten fracasados por el desempleo, haz
que puedan conseguir un trabajo digno y puedan realizarse como personas y
profesionales. Que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
13. 13
X Estación: JESÚS ES
DESPOJADO DE SUS
VESTIDURAS
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Me doy a ti, buen Jesús, para sufrir contigo lo que te plazca. Te ofrezco
lo que he padecido y habré de padecer en toda mi vida”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Desnudar al otro con el bulling
Jesús sigue sufriendo cuando criticamos y nos burlamos de nuestros
hermanos, hoy es muy notorio vivir en ambientes en donde la burla y el bulling
es algo aparentemente normal. ¿Por qué nos gusta exhibir y dejar en ridículo
a los demás? Jesús sigue siendo desnudado cuando con nuestras malas
palabras dejamos por el suelo la dignidad de los demás.
ORACIÓN:
Señor Jesús, tú que quieres que todos nos amemos como tú nos amas. Has que
dejemos a un lado la burla y el bulling para vivir en armonía y en gracia como
hermanos. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
14. 14
XI Estación: JESÚS ES
CLAVADO EN LA CRUZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Sé muy bien, Salvador mío, que mi mezquino e imperfecto corazón
no es digno de amarte. Pero tú sí eres digno de ser amado y has creado
este pobre corazón sólo para que te ame”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Fake News que destruyen y matan
Jesús nos ha enseñado que la verdad nos hará libres, pero hoy en día en las
redes sociales es muy común ver como se corren rápidamente los Fake News
o noticias falsas. Así como se condenó a un justo y se dejó en libertad a un
criminal como Barrabás, muchas veces seguimos repitiendo la misma historia,
cuando difamamos y calumniamos a los inocentes, a los sin voz, a aquellos
que no tienen como defenderse, seguimos clavando en la cruz con nuestras
actitudes y pecados al mismo Señor.
ORACIÓN:
Señor Jesús, que clavado en la cruz injustamente, perdonas a los que te
calumnian e injurian, haz que en medio de tantas noticias falsas podamos
siempre optar por las que son verdaderas. Tú que vives y reinas por los siglos
de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
15. 15
XII Estación: JESÚS MUERE
EN LA CRUZ
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Te contemplo y adoro, Jesús en tu agonía y muerte en la cruz. Adoro
cuanto tuvo lugar en ti en el último instante de tu vida: tus últimos
pensamientos, palabras, acciones, sufrimientos”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
El abandono a los enfermos y adultos mayores
Jesús, mueres en el silencio, abandonado de tus discípulos, solo unos cuantos
te acompañan junto con María tu Madre. Es momento de pensar en tantos
enfermos que están en cama y en los hospitales que unen su dolor a tu pasión
y tu cruz, junto a ellos nuestros pensamientos se dirigen hacia los adultos
mayores, muchos de ellos olvidados y que en su interior sufren el dolor del
abandono de sus familiares. En ellos Jesús sigues muriendo hoy, perdónanos
Señor por tanto olvido.
ORACIÓN:
Señor Jesús, tu muerte redentora en el madero de la cruz es salvación para
todos nosotros, perdona la indiferencia y abandono con nuestros hermanos
enfermos y adultos mayores que viven en soledad, y dales el consuelo que
tanto necesitan. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
16. 16
XIII Estación: JESÚS ES BAJADO DE LA CRUZ Y
PUESTO EN BRAZOS DE SU
MADRE
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz
redimiste al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
“Madre de Jesús, besa, por favor, en nombre mío, la llaga sagrada del
costado de tu Hijo, y, por este santo beso, dale centuplicado todo el
amor que yo le hubiera debido dar en toda mi vida”.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
El silencio e indiferencia ante el aborto
Viernes Santo, tarde de pena y llanto, en que la Virgen recibe en sus brazos al
Hijo muerto que es corazón de su corazón, aquel que fue traspasado por
nuestros crímenes ahora está muerto el que es la misma vida. El Dolor y la
soledad de María siguen presente hoy en tantos abortos que se realizan, tantos
inocentes que son privados de la vida antes de nacer.
ORACIÓN:
Señor Jesús, ante el dolor y la soledad de tu madre Santísima por tantos
abortos cometidos, ten misericordia y purifícanos de todos nuestros delitos.
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
17. 17
XIV Estación: JESÚS ES
SEPULTADO
L/. Te adoramos, oh Cristo, y te
bendecimos.
R/. Porque con tu Santa Cruz redimiste
al mundo.
L/. Alabada sea la Pasión y Muerte de
Nuestro Señor Jesucristo.
R/. Y los dolores de su Santísima
Madre al pie de la cruz.
Te ofrezco mi muerte y el último instante de mi vida en
honor de tu santa muerte y de tu último instante.
(San Juan Eudes, OC, Vida y Reino)
Enterrar nuestros pecados para nacer a una vida
nueva
El mismo Jesús nos ha dicho que: “Si el grano de trigo no muere queda
infecundo, pero que si muere producirá mucho fruto” (Jn. 12, 23-24) Que
podamos en este tiempo de gracia y conversión morir a nosotros mismos para
renacer a una vida nueva. Que podamos a igual que San Juan Eudes, sentir
odio por el pecado y así poder desprendernos de las cosas del mundo para vivir
con una actitud renovada y a la luz de la Pascua poder continuar y completar
la misión de Jesús en la tierra.
ORACIÓN:
Señor Jesús, tú no te quedas en el sepulcro, tú te levantas triunfante para ser
el vencedor de la muerte y el pecado, disipa en nosotros todo lo que sea
obstáculo a la vida de gracia y has que vivamos en ti y para ti por siempre. Tú
que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
Padre Nuestro y Ave María.
L/. Pequé, Señor, pequé.
R/. Ten piedad y misericordia de mí.
18. 18
ORACIÓN FINAL
Señor nuestro Jesucristo, hemos caminado contigo en tu Vía Crucis y nos
hemos detenido en nuestras propias vidas y en tantas cosas que debemos
cambiar y que con tu ayuda seremos capaces de afrontar. Por el Bautismo,
estamos injertados en Ti, por eso queremos que nuestras vidas, sean un reflejo
de tu misma vida.
Bendice Señor a todos los miembros que conformamos la gran Familia de tu
Iglesia, haz que vivamos siempre unidos a ti que eres nuestra cabeza,
santifícanos a nosotros, a nuestras familias y amigos.
Ayúdanos a abrazar nuestra cruz de cada día con amor como lo hiciste Tú, y
así podamos levantarla como estandarte de victoria reconociéndote como el
único vencedor de las tinieblas y de la muerte. Y para decirte con todas las
fuerzas de nuestro ser:
“¡QUEREMOS SEÑOR JESÚS, QUE VIVAS Y REINES EN NUESTROS
CORAZONES” Amén.
C/. Madre llena de aflicción.
R/. De Jesucristo las llagas grabadas en mi Corazón.