VNC permite controlar un ordenador servidor de forma remota desde un cliente. Utiliza los puertos TCP 5900 y 5500 por defecto. Aunque no es seguro de forma predeterminada, puede tunelarse a través de SSH o VPN para añadir cifrado. Se instala el servidor VNC en Windows o Linux y el cliente VNC se usa para conectarse al servidor y controlarlo de forma remota.