Un antibiótico es un medicamento que mata bacterias. Es importante que un médico diagnostique la infección y recete el antibiótico adecuado, indicando la dosis y duración del tratamiento. Las bacterias pueden desarrollar resistencia a los antibióticos debido a su capacidad de adaptación. Para usarlos de forma prudente, se debe acudir al médico ante una infección, cumplir el tratamiento completo aunque mejore antes, y no tomar antibióticos para enfermedades virales.