Este documento discute la desmotivación en la educación peruana y sus consecuencias. Indica que la falta de motivación entre estudiantes secundarios y universitarios conduce a altas tasas de deserción y bajo rendimiento. Atribuye esto a la ausencia de metas y proyectos de vida entre los estudiantes, así como a expectativas irrealistas de los padres y profesores. Finalmente, recomienda que los estudiantes desarrollen proyectos de vida con metas a corto y largo plazo, y que las escuelas

1. DE LA EDUCACIÓN BÁSICA A LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA: LA DESMOTIVACIÓN Y SUS CONSECUENCIAS
¿Por qué es importante la motivación para el ser humano?
La motivación es un proceso psicológico que tiene significativas consecuencias tanto para el comportamiento de una persona
como para sus sentimientos. Es importante que una persona esté motivada para estudiar o trabajar, pues así siente alegría por
lo que hace y, de esa manera, tiene mejores resultados. Pero no se trata únicamente de motivación a secas, sino de una buena
calidad de motivación.
Uno de los mayores problemas que afronta la educación en el Perú a nivel general, es la desmotivación, estudiantes que desde
la escuela secundaria les falta claramente un nivel alto de compromiso con sus procesos formativos, carecen de metas, de
proyectos de vida que orienten su desarrollo educativo, esta problemática que se presenta en las aulas de educación básica,
repercute en la educación superior universitaria pues también se encuentra a jóvenes con falta de entusiasmo y deseos de
romper las barreras que nos propone este mundo globalizado y modernizado que enfrentamos en el siglo XXI, como
consecuencia de esto se tiene altos niveles de mortalidad académica y deserción escolar en educación básica y en la educación
superior universitaria, profesionales con un bajo nivel de competencia y con poca pasión por su carrera.
¿Cómo se relaciona una buena motivación con la perspectiva del futuro que tiene un individuo?
Existen dos tipos de motivación, la que mantiene uno mismo que conocemos como intrínseca, y la que proviene de factores
externos conocida como extrínseca, ambas son importantes para el rumbo del estudiante en cualquier nivel de educación;
cuando una persona está muy bien motivada, además de tener metas extrínsecas, tiene motivaciones intrínsecas. Si los
estudiantes realizan acciones de manera obligada y no tiene iniciativa propia, definitivamente no se están preparando
adecuadamente, un estudiante que no tiene aspiraciones, sin iniciativa y sin una meta a seguir, solo está haciendo las cosas
como si fuera una máquina, a donde ingresamos ordenes y solo las ejecuta, sin embargo, al desarrollarse de manera
consciente, y con ánimos de un desarrollo profesional de superación, puede ver las consecuencias y la importancia de lo que
haces ahora, es decir, trabaja su educación y formación en función de algo, que a futuro ese algo se convertirá en un logro
personal.
Es importante que los padres y los profesores no eleven demasiado las expectativas que tienen en sus hijos y alumnos. Muchos
chicos se desmotivan porque sus padres esperan mucho de ellos, entonces sienten miedo de no vivir a la altura de estas
metas. Así también, ocurre que cuando un joven se encuentra en un programa de estudio que es demasiado exigente para ellos
o demasiado fácil. Hay que buscar que los cursos reten a los jóvenes pero sin exigirles más de lo que pueden, se debe lograr
que los estudiantes se involucren solos y no por exigencia.
¿Cuáles son los factores que originan la desmotivación en las personas?
La desmotivación puede originarse por diversos factores, depende del contexto socio cultural donde se desarrollen los
estudiantes y jóvenes, de manera general podemos considerar los siguientes aspectos:
 Nuestros niños, niñas y jóvenes no han desarrollado su habilidad para exponer sus ideas y presentar sus planteamientos
desde sus primeros años, por lo cual al avanzar en grados y llegar a la adolescencia y más aun en la juventud, no
participan en clase generándose dinámicas de clase donde solo el maestro desarrolla un monologo.
 Nuestros niños, niñas y jóvenes no han estructurado Proyectos de Vida donde el estudio sea uno de los pilares
fundamentales que lograra darle calidad de vida para su futuro.

2.  Los padres han perdido sus niveles de autoridad en relación con sus hijos por lo cual la exigencia ha disminuido, además
de ello, han dejado de ser modelos de superación académica e intelectual.
 Las familias han descuidado la formación en valores básicos relacionados con la escolar (responsabilidad, libertad,
esfuerzo, trabajo), eso repercute en su formación profesional universitaria.
 Los medios de comunicación han saturado con imaginarios negativos que presentan el facilismo, la delincuencia, los
escándalos, entre otros como falsos valores.
 Las escuelas han perdido la imagen de los docentes comprometidos que reflejan su vocación y cariño por educar
cambiándose en algunos momentos por lejanos academicistas que esperan únicamente desarrollo intelectual en sus
estudiantes y mecanización de tareas sin uso práctico real a la vida cotidiana.
Conclusiones:
1. Los Jóvenes en la actualidad no cuentas con planes de superación a corto, mediano o largo plazo, lo que les limita solo a
vivir el día a día sin prever acciones futuras en bien de su formación profesional y por ende de su vida personal.
2. En la docencia hay mucho aun por aportar, renovar y meditar, pues nos falta lograr que nuestros estudiantes abracen
sueños, persigan oportunidades y que ambicionen ser mejor cada día, nos estamos dejando llevar de la situación y
estamos haciendo de nuestro trabajo un trabajo rutinario y no emprendedor.
3. Si la escuela enseña, la familia forma; se está perdiendo los valores que hay en el hogar, los padres, que son los pilares
de la familia, se están dejando llevar por sus ocupaciones y no se trabaja en un dialogo común entre todos los integrantes
del hogar, con la finalidad de ser mejores como familia y establecer normas de convivencias adecuadas, las cuales
seguirán en la escuela y la formación superior.
4. Los jóvenes salen de la educación básica sin preparación para poder asumir los retos que presenta el sistema, resultan
siendo vulnerables a la proliferación de falsos modelos que nos presenta los medios de comunicación, no saben utilizar la
gran cantidad de información que se presenta hoy en día y terminan por mal utilizarla, como consecuencia se tiene tantos
embarazos adolescentes, empleos informales, delincuencia juvenil y ahora mucho más organizada, universitarios que solo
asisten para tener contento al padre de familia y no por motivación propia, entre otros.
Recomendaciones:
1. Debemos orientar a los niños, niñas y jóvenes a que estructuren sus proyectos de vida con altos niveles de motivación
escolar potencializando entonces la motivación intrínseca o interna de cada uno y complementada por la motivación
extrínseca o externa que los acompaña a lo largo de su vida.
2. Los docentes debemos de seguir innovando, investigando y preparándonos, para los cambios vertiginosos que presenta
la sociedad actual, que ayudemos a los estudiantes a trazarse metas, a nivel de inteligencia emocional entonces
requerimos maestros empáticos, líderes que jalonen sueños y proyectos en sus estudiantes.
3. Las familias deben de fortalecer la inteligencia emocional en los niños, niñas y jóvenes aprendiendo a reconocer sus
emociones educados en valores de responsabilidad, libertad, trabajo y esfuerzo, garantizando así que en toda su
escolaridad, tanto básica como universitaria, sean estudiantes comprometidos con lo que hacen.
4. Padres y docentes tenemos una gran misión, debemos lograr que niños, niñas y jóvenes estén preparados para ser
actores activos en su medio social capaces de manejar posibles conflictos que los afecten a ellos o al grupo, que estén
preparados para asumir posiciones frente a los estereotipos dados por los medios masivos de comunicación y las nuevas
tecnologías.