El modelo de desarrollo en cascada sigue un proceso secuencial de análisis de requisitos, diseño, codificación, pruebas, implementación y mantenimiento. Cada etapa debe completarse antes de avanzar a la siguiente. Aunque es un modelo sencillo, tiene el inconveniente de que los proyectos rara vez siguen una secuencia lineal y cualquier error detectado en pruebas requiere rediseño.