2. Objetivos de Aprendizaje: Comprender la definición
de la Comunicación Literaria, autor real, autor
literario e implícito en un texto escrito.
Identificar la diferencia entre el narrador y el lector,
entre el narrador protagonista, el narrador testigo y
las intenciones de un autor
Contenido 1: La comunicación literaria: La intención del autor, un significado
para interpretar. El autor real, literario(narrador quien habla) e implícito.
3. El autor Narrativo.
El narrador y el autor son dos seres diferentes.
Cuando se lee un texto, narrativo, es importante
hacer esta separación para evitar prejuicios.
Desarrollo
4. Imagina y escribe el relato. Es quien estructura la
narración y juega con todos los elementos que
intervienen en ella. También se encarga de elegir
un narrador. Esta decisión determinará el estilo que
identificara su obra.
5. Por aparte, al autor literario, es el narrador elegido por
el autor real. Si este narrador es omnisciente, puede
conocer hasta los pensamientos más íntimos de los
personajes. También puede ser el protagonista del
relato o un testigo de la historia. En este caso, el autor
se limita a narrar los sucesos desde su punto de vista,
sin tener una perspectiva, total de los sucesos.
6. A veces, es difícil distinguir el autor real y el autor literario
omnisciente. La diferencia se establece por que el autor
literario forma parte de la realidad literaria.
También existe un autor implícito, que aclara la
interpretación de la historia mediante comentarios críticos y
posturas ideológicas al margen de la narración. Esta
sometido a la voz del autor literario.
7. El autor implícito cumple el rol de expresar la intención del autor real. Tal es
el caso de Don Quijote, en el que Cervantes a través de su autor implícito,
plasma su intención de burla ante las novelas de Caballería, de moda en
aquella época.
Las intenciones de un autor también pueden sr de tipo político, religioso, o
simplemente, de entretenimiento.
El Autor implícito
8. El autor implícito de una obra literaria es el autor
textualizado, es decir, la imagen del autor que proyecta
una obra determinada, o la que se trasluce a través de la
lectura de la obra, a partir de sus juicios intelectuales,
éticos, posicionamientos frente a los personajes y
acciones, construcción de la trama, presuposiciones que
deducimos del texto, etc.
9. Autor es el artista o escritor que ha creado una obra artística
o literaria de su autoría, es decir, original
10. Objetivos de Aprendizaje: Conocer e
interpretar la definición del manierismo y
el barroco interpretando además las
principales características en la literatura
del manierismo , el nombre de las obras y
autores que correspondían a este
movimiento.
Identificar y establecer la diferencia entre
el Manierismo y el Barroco, descubriendo a
demás cual es el elemento fundamental en
Contenido 2: El Manierismo : Concepto; origen;
características; autores
11. El Manierismo es un estilo artístico
difundido por Europa en el siglo XVI,
caracterizado por la expresividad y la
artificiosidad, en tanto que el Barroco es
un estilo artístico caracterizado por la
profusión de adornos. Con frecuencia son
sinónimo de “extravagante” y “complicado”
y en la periodización artística aparecen
asociados, uno como continuación del
otro.
12. Fue una tendencia que abarco al arte en general:
Pintura, Arquitectura, Escultura, y Literatura. Se ubico
aproximadamente entre 1520 a 1610..
Marco el periodo de transición entre el renacimiento y
el Barroco. Represento una reacción ante el clasicismo
renacentusta, pues pretendía cuestionar su ideal
belleza
Manierismo
13. (Para estudiar las obras más importantes de este período,
como son las de Cervantes y de Shakespeare tomaremos
en cuenta algunos elementos en la misma)
El barroco: es resultado y expresión de una profunda
crisis espiritual y moral desencadenada por la
descomposición de la síntesis de valores renacentistas y
por la búsqueda de una nueva síntesis.
14. Así, la cosmovisión del hombre renacentista se disgrega
irremediablemente: los descubrimientos marítimos habían
ensanchada el horizonte terrestre del hombre y la ciencia
copernicana había extendido desmedidamente las
fronteras del cosmos, resultando de estos factores una
nueva concepción del espacio: el espacio como infinito.
15. En contrapunto a esta visión del espacio se desarrolla en
los espíritus una concepción angustiosa del tiempo: el
tiempo como fuga, disolución y muerte, el ser humano,
sabiéndose simultáneamente grande y miserable, ángel y
bestia, eterno y transitorio, siente el terror de saberse
suspendido entre dos abismos: el infinito y la nada.
16. Las antítesis violentas, la tensión de las almas, el
sentimiento de la inestabilidad de lo real, la lucha entre lo
profano y lo sagrado, entre el espíritu y la carne, entre lo
mundano y lo divino, son aspectos diversos de esa crisis
multiforme, religiosa, estética, filosófica, etc., que se verifica
en Europa desde mediados del siglo XVI.
17. En esta atmósfera de crisis, la teorización literaria adquiere desarrollo singular sobre todo
en Italia, en torno a la Poética y la Retórica de Aristóteles, y en torno a problemas tan
importantes como la finalidad de la literatura, la creación poética, el genio creador, etc.
18. En suma, el arte Barroco nace de un nuevo espíritu de invención, de inteligencia, de agudeza, que
se desenvuelva en el plano del descubrimiento de lo real y de sus relaciones insospechadas,
imprevisibles; un descubrimiento alegre, una inteligencia activa, extremadamente móvil, muy
distante del sistema de adquisiciones estables y reposadas en que se había detenido el
Renacimiento; una capacidad inventiva sin freno, como si en el ingenio se libertase muchos
siglos de orden, de pasividad.
19. Fundado inicialmente sobre los contenidos de materia
del Renacimiento, con los mismos elementos
constructivos, el Barroco trae una potentosa
novedad, porque es como un crecimiento, como una
propagación, que viene de lo hondo, de enormes
fuerzas que están aflorando, y que, si a veces lo
contorsionan todo, como la onda de una conmoción
telúrica, otras veces rompen en rica hermosura y en
plenitud.
20. De ahí la abundancia de flores y frutos con que
la arquitectura barroca cuaja los parámetros de
su conocimiento.