11. Que clase de vendedor eres?
* El “perseverante”: Es bastante
común encontrarlo. Aprovecha el
estrecho sistema de pasillos de los
galpones de ventas para ponerse a
mitad de camino del potencial
cliente y abarrotarlo a preguntas.
“¿Qué anda buscando?”, es
apenas la primera. Si uno comete
el error de dar una pista, por
ejemplo diciendo “un calzado para
mi nene”, él (o ella) responderá
con un larguísimo listado de
marcas, precios y promesas de
duración de todas las zapatillas y
zapatos que tiene. Y si usted
insiste en dar referencias, puede
llegar a salir a los dos días y
medio.
12. Que clase de vendedor eres?
* La sedentaria: Evidentemente, su consigna
de vida es “¿Para qué ponerse nerviosos si eso
hace mal?”. Generalmente es mujer, y desde
que llega a su puesto hasta que se va está
sentada en una silleta tomando té. Incluso, con
los años aprende a decir el “¿qué anda
buscando?” sin necesidad de mover la boca. Lo
increíble es que nunca cierran, lo que da a
entender que les va bien.
13. Que clase de vendedor eres?
* El emboscador : Su principal aliado es el poco espacio
para circular. Ve venir a su presa desde 20 metros antes,
y se esconde entre vestidos floreados y estuches para
celulares. Cuando la víctima cruza a su lado, la atrapa y
se convierte en perseverante. Uno termina comprando
algo como quien paga un rescate por sí mismo.
14. Que clase de vendedor eres?
El experto en todo: En su puesto vende desde
reproductores de mp3 hasta aparatología para
consultorios odontológicos y ropa Armani
trucha. No importa lo que le preguntes, sabe
de todo, y siempre resulta que, si preguntás,
todo lo que él tiene es exactamente lo que
necesitás. Por supuesto que al llegar a tu casa
descubrís que te ensartaste como un
reverendo pel…
15. Que clase de vendedor eres?
El chanta: Te quiere hacer creer que las marcas que figuran
en ropas y zapatillas son reales. “Estas naic son las que usa
Ginóbili, y están a 2.000 dólares el par, pero a vos te las dejo
en 55”, te dice. Generan en uno la infinita pena de escuchar
a veces a clientes muy pel…, o que vienen de otros lugares,
que dicen: “¡Mirá, los relojes Cartier a 30 pesos!”, y se
compran ocho.
16. Que clase de vendedor eres?
El heavy: No sabés por qué m… se puso a vendedor si desde que te acercás a su
puesto te mira con cara de “venís a joderme preguntando algo y te abro con
una navaja desde el ombligo hasta la garganta”. Suele tener los ojos inyectados
en sangre, algún tatuaje, y cada duda tuya le cae como una patada en el
páncreas, razón por la cual te contesta entre gruñidos. Por miedo a que te
apuñale por la espalda mientras te vas, terminás comprándole cosas caras.
17. Que clase de vendedor eres?
La guía: En su puestito tiene tan pocas cosas, que hasta te dan ganas de
venderle algo vos a ella. Pero se siente tan culpable de su escasa oferta,
que cuando le pedís lo que no tiene, recorre toda la red de pasillos hasta
encontrar el puesto en el que te pueden vender lo que necesitás. ¿Irá a
comisión o es una princesa cumpliendo una maldición?
18. Que clase de vendedor eres?
El promesero: No importa lo que le pidas, si unos vaqueros de
talle raro o un repuesto para turbina de jet, él siempre te va a
responder lo mismo: “Ahora no tengo. Pero para la tarde te
consigo”.
19. Que clase de vendedor eres?
El regatero: Te hace sentir un boludo total, porque comprobás con él que
nunca sabrás el precio real de sus mercaderías. Cuando te acercás a su
puesto, si mirás con cierto interés una camiseta de fútbol, te dice: “Es la
del Manchester original, en cualquier lado está a 300 pero te la dejo a 70
porque ya es la última”. Como te ve dudando, reaparece con: “Dame un
50 y estamo”. Vos hacés una evaluación del contenido de tu bolsillo, y te
manotea lo que tenés en la mano mientras te pasa la camiseta: “Bueno,
15 y listo”.