El documento habla sobre la sociedad del conocimiento y el nuevo rol de las universidades. Explica que las sociedades de hoy se basan más en el conocimiento que en la información. También destaca la importancia de la heterogeneidad y cooperación para la innovación, y propone que las universidades contribuyan más al desarrollo regional trabajando con empresas y organizaciones locales para sumar y aplicar conocimientos. Finalmente, sugiere que los profesores enseñen conocimientos transdisciplinarios y complejos para formar ciudadanos capaces de comprender el mundo actual.