Las pulgas son insectos pequeños y marrones que se alimentan de la sangre de perros y otros animales. Pueden causar irritación e infecciones en la piel como la dermatitis alérgica por picadura de pulga. Tienen un ciclo de vida que incluye huevos, larvas y adultos, y se transmiten fácilmente entre animales, por lo que es importante el control de pulgas para prevenir infecciones.