El documento define la convivencia escolar como un proceso de interrelación entre los miembros de una comunidad educativa, incluyendo a alumnos, apoderados, docentes y personal. La convivencia escolar involucra las relaciones interpersonales y la construcción colectiva de una cultura de paz y resolución de conflictos. También señala que la convivencia escolar depende de factores como el diálogo, la tolerancia, el respeto de los derechos humanos y la búsqueda de justicia.
1. 2.1 DEFINICIÓN DE CONVIVENCIA ESCOLAR
Para trabajar estos conceptos tomamos como referencia lo que indican los
documentos que el MINEDUC entrega, ya que buscamos definir de acuerdo a la
realidad educativa más cercana, por otra parte, buscamos trabajar en un
establecimiento particular subvencionado, estos se basan por el marco curricular y
regulatorio que ofrece dicho ministerio, de igual forma tomaremos como referencia
a otros autores, pero daremos especial énfasis a éste.
“La convivencia escolar corresponde a un proceso de interrelación entre los
diferentes miembros de un establecimiento educacional. No se limita solo a la
relación entre las personas, sino que incluye la forma de interacción de los
distintos estamentos que conforman una comunidad educativa, tales como
alumnos, apoderados, equipo docente y paradocente, por lo que constituye una
construcción colectiva y es responsabilidad de todos los miembros y actores de la
comunidad educativa. (MINEDUC (c), 2004, pág. 13)”
La resolución de conflictos se refiere a un proceso de características
sistemáticas y cronológicas cuyo objetivo es hallar la solución a un problema entre
dos o más individuos y mejorar el proceso cotidiano de interrelación que se genera
entre los diferentes miembros de una comunidad escolar. (Casamayor, 2000, pág.
19). Para que el proceso tenga éxito hay una serie de elementos que influyen
tanto en los sujetos que tienen el conflicto como en la persona que se encarga de
guiar la resolución, es decir, el mediador. Lo descrito, anteriormente, apunta
principalmente al mejoramiento de las herramientas de solución de conflictos
escolares, dicho esto, se entiende que este es un factor determinante para mejorar
la convivencia escolar en los establecimientos de la Región de Valparaíso, en
donde a pesar de poseer un equipo docente calificado para la enseñanza y
cumplimiento de metas académicas, no existe experticia en la materia de
2. mediación escolar, las razones son diversas pero la más representativa es que en
Chile hace pocos años que se le comenzó a considerar el rol importantísimo que
tiene la convivencia escolar dentro de la educación, por lo mismo, las instituciones
de educación superior poco a poco modifican sus mallas y ofrecen especialización
en la materia.
2.1.1 Convivencia escolar
La convivencia escolar es definida por Horacio Maldonado como un
fenómeno complejo lo que ha determinado que variadas corrientes disciplinarias
se preocupen de identificar los elementos que la componen. Por otra parte, este
mismo autor menciona la importancia de las relaciones interpersonales de los
alumnos en los distintos ámbitos, como la disciplina, la conducta, las actitudes que
tienen con sus pares y, por último, señala de forma más general a todos los
componentes que participan de la vida institucional. (2004, p. 11)
En los párrafos anteriores podemos notar como en todas las definiciones se
deja fuera a la figura de los adultos dentro del concepto y definición de convivencia
escolar. Lamentablemente se les niega toda participación dentro del proceso de
socialización, pareciera que los adultos no mantienen relaciones interpersonales
con los educandos. Por otra parte, tenemos la importancia de un individuo de
mayor experiencia dentro del proceso del aprender a convivir, es vital entonces,
cambiar esta percepción de convivencia, siendo la más propicia la que mencione a
todos los actores educativos, tanto internos como externos, como la familia, los
mismos alumnos y los profesores, también debe incorporar a los paradocentes,
3. personas encargadas del aseo, del casino, inclusive el equipo administrativo del
establecimiento, ya que son parte del diario vivir de la comunidad.
Asimismo, es necesario dar a conocer esta nueva percepción a todos los
actores; en primera instancia, esta medida busca generar un cambio conceptual
para luego extrapolar la situación a la práctica. Esto, no funciona como la panacea
para los problemas, pero sí es el primer paso para comenzar el proceso de
mejoramiento de las relaciones socioculturales, específicamente del aprender a
convivir.
Otra de las realidades con las que nos encontraremos dentro de los
establecimientos educacionales es la negación de la existencia de conflictos
dentro de estas. una de la razones para explicar dicho fenómeno la entrega
Maldonado, quien explica que el tratamiento que han recibido los conflictos en los
medios de comunicación masivo hace retractarse de cualquier intento de
publicación de los mismos dentro de su comunidad, ya que socialmente, un
establecimiento “conflictivo” es un mal colegio y no prepara bien a sus estudiantes.
(2004, p. 13). En contraposición a lo anterior, tenemos que los conflictos se
encuentran en toda organización comunitaria desde antaño, como las hordas, los
clanes y las tribus. Por lo tanto, es imperiosa la necesidad de generar un cambio
en la visión global del conflicto y verlo como una oportunidad de mejora.
Socialmente es reconocido como un elemento negativo dentro de las relaciones
interpersonales, pero para efectuar dicho cambio es primordial realizar un
compromiso a nivel institucional puesto que se deben llevar a cabo algunas
modificaciones estructurales que se mencionarán posteriormente.
4. 2.1.2 Pasos para comprender la convivencia escolar
Mirta del campo, Daniel Lemme, Gladys Toranzo, entre otros;
confeccionaron los pasos a seguir para comprender el quehacer institucional de la
escuela, específicamente, en la temática de convivencia escolar, en su estudio
citan a Jacques Delors, quien establece cuatro pilares fundamentales en los que la
educación como servicio formador se debe sostener, estos son: Aprender a
conocer, Aprender a hacer, Aprender a ser, Aprender a convivir.(2004, p. 25).
Los dos últimos en relación directa con la convivencia escolar, aunque, los cuatro
aprendizajes son sumamente significativos para el desarrollo del estudiante. El
Aprender a ser depende totalmente de la formación sociocultural que posee el
sujeto y el aprender a convivir alude al traspaso cultural y su relación de estas
características con la sociedad. Concluimos lo importante que es la educación
para la vida en sociedad del alumno, ya que es la clave para que se pueda
desenvolver más adelante en su vida profesional y/o laboral.
5. 2.1.3 Convivencia y emociones
Como hemos mencionado previamente nuestra investigación tiene como
objeto el rol del profesor como mediador de conflictos, sabemos entonces que
trabajamos con una comunidad de personas, ésta última palabra es realmente
importante, puesto que define inmediatamente que cada uno de nosotros somos
distintos el uno del otro, cada cual actúa en determinadas ocasiones impulsado
por las emociones, componente importantísimo dentro de la convivencia.
Parafraseando a Aristóteles, lo que se requiere es una emoción apropiada;
un sentimiento acorde al contexto. (Goleman, 1996, pág. 10)
La sociedad y como lo menciona Murciano, Casanova y Lederach en sus
libros, la comunidad escolar tiende a intentar esconder las emociones, negarlas,
puesto que su expresión es considerada un elemento negativo o peligroso para la
misma. Este es uno de los puntos que se debe modificar, ya que tal como se
mencionó al comienzo del párrafo, hay que educar para el control de las
emociones, Rafael Bisquerra, en su libro “Educación emocional y bienestar” dice
que debemos tener una visión integradora de las persona, pues que son varios
los elementos que se relacionan en este ámbito, entre ellos se encuentra el
comportamiento y el pensamiento, así como todo tipo de impulso fisiológico,
dichos elementos nos definen como humanos y corresponde a los sectores en los
que es primordial poseer cierto “Control emocional” (2006, p. 147). Para realizar lo
anterior, hay una serie de ejercicios que Goleman propone realizar, en primera
instancia se encuentra la relajación, tanto a nivel de pensamiento y de cuerpo,
ejercicios físicos, diversiones o pasatiempos, obtener buenos resultados en algún
proyecto, ayudar a los demás, pero más importante que todos ellos, se encuentra
el cambio de mentalidad y de recibir y percibir los problemas. Primero, verlos
como una oportunidad de mejora, cambiar los elementos negativos a positivos, a
modo de ejemplo, ser capaz de reformular los puntos de vista: “No soporto que
6. sea mentiroso” a “él falta a la verdad”, cosas tan simples como el asumir la
realidad directamente sin la visión del “No”, dentro de la formulación puede
cambiar la recepción de la situación. (Goleman, 1996, p. 33). No existe una
formula correcta para lograrlo, pero es necesario percibir todos los sucesos desde
otra perspectiva para facilitar la visión y lograr comprender lo que sucede.
Luego de esa pequeña introducción, nos preguntamos lo siguiente ¿cuál es
el rol directo que juega la emocionalidad en los conflictos? Uno de ellos es la
percepción, del que ya hablamos, y otro de los más importantes es la motivación;
es importante que los implicados en un conflicto, sean indirectos o no, sepan
cuáles son las consecuencias positivas de resolver un problema, es necesario que
las partes logren identificar y enunciar por sí solas cuales son las ventajas, ya que
esto motivará a los implicados a participar del proceso de mediación de conflictos.
Los aspectos mostrados tienen la característica de ser universales, puesto que se
aplican a todas las áreas en las que se trabaje con un grupo de personas, más en
educación, dónde se interrelacionan constantemente personas de rangos de
edades altos, alumnos, profesores, familias, etc. Por esta razón, es necesario
comprender la importancia de poseer una convivencia escolar sana, no una vista
utópica donde nadie tenga problemas, por el contrario, es necesario asumir la
realidad, que somos seres distintos y, por ende, conflictivos en esencia, la clave se
encuentra en aprender a lidiar con todo lo que implica asumir dicha situación y, en
consecuencia, buscar alternativas efectivas para la resolución de la realidad,
formar cultura de paz dentro de un establecimiento y de esta forma preparar de
forma efectiva a los alumnos como seres que se desenvolverán de la mejor
manera en la sociedad
2.1.4 DISCIPLINA Y CONVIVENCIA ESCOLAR
Uno de los elementos primordiales para que la convivencia escolar sea
regulada dentro de la comunidad es la disciplina, esta última entendida como el
conjunto de normas que hacen posible la convivencia y que refiere de la
7. organización, en este caso, escolar, que actúe como regulador y limitador de las
acciones de los sujetos en cuestión. (Miquel, 2000, p. 66)
Tenemos que entender la disciplina como un elemento positivo, la acepción
utilizada para esta investigación refiere netamente a la necesidad humana con
respecto a seguir reglas y/o patrones dentro de la sociedad. Además, debemos
entender la disciplina como un elemento inflexible, pero a la vez que no requiera
castigos punitivos al cometer alguna falta. Según Miquel y Casanova es esencial
un cambio de visión en la sociedad, los castigos punitivos se encuentran
establecidos en los reglamentos del establecimiento tal como si fueran comunes y
positivos (2000), el problema radica en la reincidencia por parte del sujeto en faltar
al reglamento y obviamente pasando a llevar la disciplina. De acuerdo a lo que
explica Goleman, cuando un sujeto, que se encuentra en una etapa de adaptación
al medio y que además debe seguir una serie de patrones de conducta
obligatorios, rompen una de las reglas, la inteligencia que responde al ámbito de la
relación intrapersonal se activa, haciéndolo sentir capaz de manipular el ambiente
a su antojo. Luego, al recibir el castigo punitivo, no hay posibilidad de que el
aprendizaje que este sujeto tiene sea significativo, por esta razón, la solución dura
solo un momento (de duración indefinida) y vuelve a reincidir (1996) al contrario de
dicha actitud, si generamos como docentes o miembros de la comunidad escolar
la instancia para que el estudiante genere la solución a la falta cometida, sí se
produce el aprendizaje puesto que la construcción fue realizada por él. (Ahumada,
2001, pág. 56)
8. 2.1.5 Influencia de la convivencia en la educación
Como parte de la comunidad escolar, sabemos que existen factores
fundamentales en el proceso enseñanza-aprendizaje que permiten una sana
convivencia y resultados que reflejen la calidad, pero ¿qué sucede cuando estos
factores, mayoritariamente comunicativos y valóricos, no se llevan a cabo de
manera correcta?, según lo establecido por el Ministerio de Educación chileno,
para conseguir un ambiente óptimo para que dicho proceso se lleve a cabo, debe
existir diálogo, tolerancia, solidaridad, el respeto de los derechos humanos e
inclusive la búsqueda permanente de la justicia.
En el estudio sobre la inteligencia emocional (Goleman, 1996, pág. 124), se
indica que todos los seres humanos razonan y actúan de distintas maneras, la
diferencia de pensamientos, posturas políticas, religión, moral, ética, etc. Además
del desarrollo de distintos tipos de inteligencias tiene como resultado la creación
de conflictos de índole inevitable con las personas con las que nos relacionamos
en un entorno repetitivo. Todo lo mencionado respecto a la comunidad escolar
hace alusión a un clima escolar utópico, afortunadamente para el diario vivir, cada
uno de nosotros cuenta con distintas personalidades, pensamos a ritmos distintos,
tenemos gustos, disgustos, etc. Todos estos factores nos hacen opinar y mantener
posiciones cruzadas. Generalmente, cuando cualquiera de los aspectos
mencionados en el párrafo anterior falla, se generan conflictos a nivel social,
intelectual, espiritual, etc.
“A convivir se aprende y se aprende en cada espacio en que se comparte
con otros, como tal es una dimensión del currículum escolar que se debe
intencional y se puede evaluar” (MINEDUC (c), 2004, pág. 1)
El Ministerio de Educación chileno apunta a que, el poder convivir, tolerar,
respetar y mantener un diálogo sano entre alumnos se aprende. Generalmente,
este proceso de aprendizaje cumple su objetivo llevando a cabo ensayo/error, el
9. que los alumnos deben tener entre sí para comenzar a valorar las actitudes y
habilidades mencionadas con anterioridad. Los docentes por su parte, para llevar
a cabo el proceso de resolución del conflicto, priorizan la práctica a la teoría,
solucionando los altercados de forma arbitraria o simplemente por condiciones
innatas que posee la persona. Además, la mayoría de las veces, los profesores
tienden a imponer soluciones a los involucrados, por esta razón, este estudio
busca cambiar esta forma de moldear la convivencia, entregando herramientas y
estrategias efectivas para la resolución de dichos conflictos y para la educación
correcta de los educandos.
Otro de los elementos importantes es la concepción del conflicto dentro de
la educación es la forma por la que se percibe, según lo que apunta Miquel
Massaguer debemos considerar la educación como bidireccional, ya que es un
sistema en función del aprendizaje en el que interactúan distintos grupos de
personas, los alumnos, profesores, apoderados, entorno social, a raíz de esto, al
surgir un desajuste o una tensión este sistema puede dejar der funcional e influye
en uno o más actores de este proceso, por lo que es fundamental saber identificar
y resolver los conflictos en el momento preciso y con la herramienta adecuada
(2000, pág. 65)
De acuerdo al Ministerio de Educación chileno, la misión de cultivar y
mantener las interacciones sociales positivas es difícil, ya que es un proceso que
se encuentra en constante transformación, por esta razón hoy es de vital
importancia con el objetivo de mejorar el ambiente de aprendizaje, asimismo,
mejorar la convivencia escolar posibilita el desarrollo de las competencias básicas
para aprender a ser y a vivir junto a otros contextos diversos y, a veces, también
adversos. (MINEDUC (a), 2004, pág. 4)
