El documento resume cuatro relatos/derrotas:
1) Un capitán se rinde y es condenado a muerte pero sobrevive, se hace pasar por muerto y acaba suicidándose.
2) Un hombre cría a un bebé solo en la montaña tras la muerte de su esposa, pero el niño termina muriendo.
3) Un profesor de chelo es encarcelado y juzgado injustamente durante la guerra civil.
4) Una familia sufre acoso por parte de un profesor hasta que el padre se su
1. Resumen por relatos/derrotas:
Primera derrota: 1939 o Si el corazón pensara dejaría de latir
El relato comienza cuando el capitán Alegría se entrega al bando opuesto
exclamando que es un rendido, no que se rinde, debido a que eso ya lo hizo
antes de entregarse.
Esta rendición había comenzado un par de meses atrás debido a que en
realidad no entendía el sentido que tenía esa guerra, ya que el otro bando
era un "ejercito civil" que no podría ganar frente a los militares.
Cuando llegó a la trinchera enemiga, le quitaron su pistola y él obedeció
a la perfección las órdenes que le fueron dadas, unos le preguntaron el por
qué de su entrega él contestó que el Comité de Defensa de Madrid estaba a
punto de rendirse, pero no le creyeron.
Fue conducido en una furgoneta hasta Madrid, al Cuartel General, ya allí
se tranquilizó porque volvía a estar en un ámbiente familiar. Nadie le
prestaba atención debido a que estaban muy ocupados cargando
documentos, podría haber escapado si hubiera querido. Finalmente dos
soldados lo llevaron a un calabozo del sótano, donde se encontraba otro
preso, enfermizo.
Al día siguiente, evacuaron la Capitanía hasta que solo quedaron los dos
prisioneros. El nuevo ejército fue ocupando el edificio. Pronto empezaron a
llegar nuevos prisioneros, después de un par de días comenzaron a
trasladar a los presos. Lo llevaron al aérodromo de Barajas donde juzgaban
a los militares de graduación. Allí eran humillados.
Cuando por fin fue llamado y se produjo el Acta del Jucicio Sumarísimo,
el capitán es condenado a morir fusilado. Le preguntan el por qué de su
traición, él responde que el avance de las tropas nacionales hacía inevitable
la derrota de los republicanos, pero es mandando a callar. Culpable de
traición es condenado a muerte.
Escribe tres cartas de despedida; una a Inés, su novia, otra a sus padres y
2. la última a Franco.
Cuando llegaron una mañana a Arganda del Rey un sacerdorte impartió
la bendición y el pelotón de fusilamiento disparó. El capitán Alegría
despertó en la fosa común entre los muertos, una bala le había rozado la
cabeza. Fue capaz de arrastrarse fuera.
Lo encontraron en los campos de La Acebeda cuando descubrieron que
estaba vivo tras intentar quitarle las botas, una anciana decidió cuidarlo.
Tras unos día continuó so camino hacia Huérmeces, su pueblo, donde
quería morir.
Cuando llegó a Somosierra se encontró con una patrulla de carretera que
actuaba con desgana, arrastrándose hacia ellos iba diciendo entre sollozos:
"soy uno de los vuestros".
Segunda derrota: 1940 o Manuscrito encontrado en el olvido
Cuando se buscaban unos documentos en el Archivo General de la
Guardia Civil se encontró un sobre que contenía un cuaderno, el sobre fue
encontrado en 1940 junto a los cadáveres de un adulto y de un niño de
pecho. Estaban tumbados sobre un saco y tapados con una manta blanca.
Lo que relataba el cuaderno es lo siguiente:
El padre del niño ha perdido a su mujer, Elena, cuando esta estabada
dando a luz a un recién nacido. El hombre piensa en dejar morir al niño ya
que la vida sin ella no tiene sentido. Pide que quien encuentre los cadáveres
lleve sus restos y los esparza por los montes, culpable de haber podido
evitar lo ocurrido. El niño ha dejado de llorar, pero aún respira.
Va recordadon como las caricias de Elena, como ella se empeñó en
seguirlo cuando escapó de los fascistas, también recuerda a su amigo
Miguel. Se pregunta si ella hubiera querido que el niño viviera, el llanto del
niño lo levanta y sintiendo pena le da un trapo mojado en leche aguada
hasta que se queda dormido. Hace una cuna improvisada con lo que puede.
Él todavía no ha comido y decide que tiene que enterrar a Elena. Está
lloviendo y de su sustento (dos vacas abandonadas) una tiene la mastitis y
3. hay que sacrificarla. Va escribiendo en el diario, relatando que hace frío y
que pronto nevará, así que tiene todo el invierno para decidir cómo morir.
Ha matado a la vaca enferma, una parte la ha ahumado y otra parte la ha
congelado. La otra vaca es la que da leche. El niño vive y se ha hecho el
centro de su vida. Cuando encuentra los restos de una cabra montesa decide
usarlos como alimento. El niño va creciendo, tiene miedo de que él enferme,
de que la vaca muera, de ser descubiertos...
Vuelven a tener comida cuando mata a un lobo que merodeaba por allí. El
frío los debilita, el niño, la vaca y él están muy debilitados. Les falta
comida, y ya no queda más vaca, porque si mata a la otra no podría
conservarla en los neveros porque los lobos se la comerían.
El niño está enfermo, con fiebre y ha tenido que matar a la vaca para
alimentarlo. Besa al niño por primera vez. Pierde el lápiz y empieza a
reconocer el sentimiento de la soledad, tiene la sensación de que todo
acabará cuando acabe el diario.
El niño ha muero sin nombre pero decide llamarlo Rafael, el resto de las
páginas es el nombre escrito, repetido sin parar "Rafael", menos la última
página en la que hay escrito "Infame turba de nocturnas aves".
A continuación se encuentra una nota del editor en la que se cuenta que
visitó el pueblo de Caviedes, en Santander. En la que descubrió que don
Servando fue ajusticiado por republicano y su mejor alumno se fue a la
guerra, los padres del alumno llamados Rafael y Felisa murieron. Nadie
supo más de él, era un poeta de nombre Eulalio Ceballos Suárez. No se sabe
si él fue el autor del manuscrito, pero es probable.
Tercera derrota: 1941 o El idioma de los muertos
El relato comienza con Juan Senra, un profesor de chelo, prisionero. Fue
llamado a declarar, el coronel Eymar actuaba de juez, con él estaban el
capitán Martínez, el alférez Rioboo y el teniente Alonso que ejercía de
4. Secretario del Tribunal.
Cuando le preguntó el coronel si conocía a su hijo le dijó que sí, en la
cárcel de Porlier, cuando lo transladaron de la checa de Chamberil al
Cuerpo de Enfermeros por estudiar tercero de Medicina y Música. El hijo
del coronel era Miguelito, fusilado por los rojos, cuando le preguntarion de
qué hablaros Juan respondió que de él, que nunca habían hablado de la
patria.
Fue arrastrado al calabozo y perdió el conocimiento, al amanecer lo
separaron para llevarlo a la segunda galería de la cárcel, donde iban los
que aún no había sido condenados. Eduardo López le asaltó con preguntas,
dando por buenas las respuestas. Eduardo pertenecía al Partido Comunista,
organizador de la resistencia en Madrid, se ocupaba de organizar
actividades en la cárcel que mantuvieran ocupados a los condenados.
La noche anticipaba la muerte, a las cinco empezarían a llamar a
reclusos, los meterían en un camión y los llevarían a fusilar al cementerio
de la Almudena, aunque él aún debía de ser juzgado y condenado. No fue
llamado al día siguiente y se entretuvo con un muchacho. Este se llamaba
Eugenio Paz, tenía dieciseis años y era de Brinete. Se hizo republicano para
ir en contra de su tío, que maltrataba a su madre que trabajaba para él. Lo
arrestaron por violar el toque de queda cuando iba a reunirse con su novia
en un portal del barrio de Salamanca.
Al día siguiente lo volvieron a llamar al tribunal, le preguntaron que por
qué lo mataron, y él contestó que ni lo había arrestado ni lo había matado,
que era un enfermero que trabajaba en la cárcel a la que lo llevaron y que
habló con él muchas veces, se calló que Miguelito mató a un pastor para
robar sus corderos y venderlos y que el hijo del pastor le había clavado un
bieldo en la barriga y tuvo que ser operado, por eso lo conoció. De nuevo
fue llevado a la segunda galería, preguntándose por qué seguía vivo cuando
sus compañeros no lo estaban.
Decidió escribir una carta a su hermano pero solo pudo escribir un
párrafo. En el desayuno se le acercaron algunos presos sospechando que
era un chivato, les contó la verdad y lo dejaron tranquilo.
5. Fue llamado por el cabo y conducido a una celda, allí encontró a un
moribundo al que debía de mantener con vida hasta las seis del día
siguiente para que pudiera ser fusilado. El enfermo era Cruz Salido,
redactor jefe de El Socialista, pidió a Juan que lo matara, aunque sabía que
no podía pedir eso así que no dejó de hablar sin permitir a Juan que le
ayudara en ningún momento, logró morir antes del amanecer, el sargento
decidió fusilarlo igualmento y devolvieron a Juan a su galería. Allí este
continúa con la carte a su hermano.
Poco a poco comenzaron algunas visitas de familiares y comenzaron
rumores que traían esperanza. Un preso al que llamaban el Rorro siempre
estaba solo, su verdadero m¡nombre era Carlos Alegría, un capitán que se
rindió poco antes de que se dispusieran las armas. Fue juzado, condenado y
fusilado, pero sobrevivió y fue enviado al cuartel de Conde-Duque. Él decía
llamarse Carlos Alegría, que había nacido el 18 de abril de 1939 en una
fosa común de Arganda. Un día consiguió arrebatar el fusil a un centinela y
se suicidó.
Al día siguiente fue llevado a un cuartucho del sótano donde lo esperaban
el coronel Eymar y su mujer, ella le enseño una fotografía de su hijo y Juan
siguió inventando historias de valentía y generosidad que otros
protagonizaron puestas en Miguelito.
Pasado unas semanas volvió a encontrarse con el coronel Eyre y su mijer,
intercambiaron historias. Al final la mujer le dio un bocadillo de arenque.
Debía continuar la carta a si hermano y la continuó hasta agotar todo el
papel. Cuando fue llamado de nuevo los guardias tuvieron que llevarlo a
rastras y no aceptó la comida de la mujer, les contó la verdad, que
Miguelito era un ladrón, un asesino y un traidor, que él mismo mando su
ejecuciós, que fue un cobarde, que lloró y suplicó (aunque eso era mentira).
Dos diás después fue llamado, juzgado y condenado.
Cuarta derrota: 1942 o Los girasoles ciegos
Se narra la historia de una familia, la cuando han de esconder al padre,
Ricardo, en un armario debido a los tiempos. La familia son los padres de
6. Elena (la mujer del segundo relato).
Se cuentan las desgracias de la madre, Elena, costurera de ropa íntima y
traductora de documentos, y su hijo Lorenzo el cual es enseñado por un
diácono. La vida trascurre con relativa tranquilidad hasta que el diácono se
fija en el muchacho, a través del cual conoce a su madre. Todo el problema
empieza cuando el profesor se da cuenta de que el niño no recita el Cara al
sol del final de cada clase. Un día el profesor decide sancionarle haciéndole
que lo recite él solo después de clase, lo cual no hace. Llega la madre y él
queda embelesado.
A partir de ahí empieza una sucesión de acosos, de visitas al hogar,
llamadas para que vaya a hablar con él... En una de sus visitas rutinarias el
diácono quiso introducir al joven en la iglesia. En otra de sus visitas va al
baño y pregunta sobre una cuchilla encontrada y ella miente diciendo que
es suya, de sus piernas cuando en realidad es de su marido.
La familia habla sobre fugarse a Francia, para librarse del diácono
decide mentir sobre que su hijo se va a someter a una operación y que
estará un tiempo ausente en la escuela.
Durante ese tiempo el diácono deja el sacerdocio y en una de sus visitas
decide provocar quedarse a solas con la mujer, a la que intenta forzar, a lo
cual el marido no puede evitar socorrer a su mujer y lo agrede, lo cual
desemboca en un grito para avisar a la policía. Debido a esto, el padre de
familia decide suicidarse tirándose por la ventana.
7. Elena (la mujer del segundo relato).
Se cuentan las desgracias de la madre, Elena, costurera de ropa íntima y
traductora de documentos, y su hijo Lorenzo el cual es enseñado por un
diácono. La vida trascurre con relativa tranquilidad hasta que el diácono se
fija en el muchacho, a través del cual conoce a su madre. Todo el problema
empieza cuando el profesor se da cuenta de que el niño no recita el Cara al
sol del final de cada clase. Un día el profesor decide sancionarle haciéndole
que lo recite él solo después de clase, lo cual no hace. Llega la madre y él
queda embelesado.
A partir de ahí empieza una sucesión de acosos, de visitas al hogar,
llamadas para que vaya a hablar con él... En una de sus visitas rutinarias el
diácono quiso introducir al joven en la iglesia. En otra de sus visitas va al
baño y pregunta sobre una cuchilla encontrada y ella miente diciendo que
es suya, de sus piernas cuando en realidad es de su marido.
La familia habla sobre fugarse a Francia, para librarse del diácono
decide mentir sobre que su hijo se va a someter a una operación y que
estará un tiempo ausente en la escuela.
Durante ese tiempo el diácono deja el sacerdocio y en una de sus visitas
decide provocar quedarse a solas con la mujer, a la que intenta forzar, a lo
cual el marido no puede evitar socorrer a su mujer y lo agrede, lo cual
desemboca en un grito para avisar a la policía. Debido a esto, el padre de
familia decide suicidarse tirándose por la ventana.