Este documento proporciona estrategias para organizar el aula y la enseñanza cuando hay niños con TDAH. Recomienda ubicar al estudiante lejos de distracciones, con compañeros tranquilos, y permitir movimiento ocasional. Además, sugiere estructurar las tareas en periodos cortos, enseñar rutinas y técnicas de estudio, y establecer reglas claras para regular la conducta impulsiva.
2. Sentarlo lejos de distractores
(imágenes, murales, ventanas...
).
Acordar con el alumno/a
señales privadas para
reconducir su atención o
reforzar su conducta adecuada.
Ubicar al alumno/a en un pupitre que le
permita al profesor/a el contacto visual.
Sentarlo al lado de compañeros/as de
comportamiento tranquilo y estructurado.
Si el cansancio y la inquietud
en el alumno/a es creciente,
realizar un breve ejercicio de
relajación para toda la clase.
Permitir la movilidad con una
excusa útil (enseñarnos la
tarea, repartir material, borrar
la pizarra…).
ESTRATEGIAS PARA EL AULA
UBICACIÓN DEL
ALUMNO/A EN EL AULA
3. La actitud del profesor/a
determina la dinámica del aula.
ESTRATEGIAS PARA EL AULA
CLIMA EN EL AULA
Aunque requieren supervisión y adaptaciones, el TDAH
no exime del cumplimiento de las responsabilidades.
Actitud de respeto mutuo,
asertiva y que potencie la
autoestima.
Ser pacientes.
Hablar de manera tranquila
en un tono adecuado, si
observamos inquietud en el
alumno/a.
No buscar culpables, buscar
soluciones.
Creer en el alumno/a:
programar situaciones en las
que pueda tener éxito.
Captar su atención: variando
el tono de voz, gesticulando,
dramatizando, etc.
4. Brindar al niño/a la
posibilidad de trabajar
independientemente en
un pupitre aislado para
evitar distractores..
Tener recursos para
cuando el alumno/a no
sea capaz de permanecer
en la silla.
Situar la mesa cerca de la
pizarra.
Tratar de que no emplee
materiales muy
aparatosos que le hagan
perder tiempo y
despistarse.
Estructurar las tareas en
tiempos cortos y que
permitan la coexistencia
de diferentes ritmos.
Si realizamos trabajos en
grupo, es deseable que
estos sean pequeños.
Procurar que tenga goma,
correctores o bolígrafos que
se borran para que pueda
corregir los errores.
Si en los turnos, colas o
esperas tenemos problemas
de impaciencia, podemos
ofrecerle un papel de gestor.
ORGANIZACIÓN DEL
ESPACIO, TIEMPO Y ESTRUCTURA DE
LA CLASE
5. Supervisión frecuente y
uso de recordatorios. Establecer una
rutina diaria.
Enseñar y enfatizar la rutina y la estructura, la organización y la planificación en todos
los aspectos: material escolar, presentación de tareas y desarrollo de contenidos.
Apuntar los deberes
en la pizarra.
Prepararle anticipadamente para las
novedades y cambios en la rutina.
ESTRATEGIAS DE ORGANIZACIÓN,
PLANIFICACIÓN Y CONTENIDOS
Enseñarle a utilizar
la agenda.
Enseñarle técnicas
de estudio.
Enseñarle a realizar
y utilizar un plan de
trabajo.
6. Establecer una rutina diaria claramente estructurada en la clase.
ESTRATEGIAS DE ORGANIZACIÓN,
PLANIFICACIÓN Y CONTENIDOS
Comenzar presentando la estructura del tema con un
esquema en la pizarra. El alumno/a debe leerlo y copiarlo.
Impartir los contenidos más
relevantes y exigentes al
comienzo de las clases.
Fomentar la estimulación y la motivación: alternar actividades breves,
novedosas, con diferente formato (visuales, auditivas, orales, motoras…).
Materializar los contenidos:
imágenes, mapas, gráficos...
Interactuar con el alumno/a
haciendo preguntas y
plantear dudas.
Facilitar los apuntes al
alumno/a.
ENSEÑANZA DE CONTENIDOS
7. ESTRATEGIAS PARA REGULAR LA
CONDUCTA IMPULSIVA
Establecer reglas claras y
consistentes.
Alentar y reforzar la
obediencia y el respeto.
Cambiar las conductas
incorrectas de una en una.
Establecer objetivos
realistas y ajustados a las
características del
alumno/a.
Aplicar sistemáticamente
las diferentes técnicas de
modificación de conducta.
Reconocer la mínima
mejora en su conducta y
reforzarla.
Usar la inatención del
docente para extinguir
conductas inadecuadas.
Evitar las críticas, los
sermones, el menosprecio
y las etiquetas.
Aplicar consecuencias
proporcionadas a la falta
cometida.
No castigar sin recreo ni
bajando la nota académica.
Anticipar y supervisar situaciones
de riesgo y las transiciones
(esperas en la fila, recreo, etc.).
Fomentar la espera del
turno y atenderle sólo
cuando espere o levante la
mano para contestar.
Pactar con el alumno/a
contratos de conducta
consensuados.