1. ÁNONIMO (1554) El Lazarillo de Tormes .TRATADO SEGUNDO
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La mezquindad del clérigo
Esta obra fue editada por primera vez en el año 1554 no es claro quién es su autor y por eso
se le considera anónima, aunque después de varios años en marzo del 2010 se dice que la
paleógrafa Mercedes Agulló publicó en el libro 'A vueltas con el Lazarillo' que es una obra
escrita por el diplomático y poeta español Diego Hurtado de Mendoza. Para realizar esta
afirmación se basa en documentos de la testamentaría del cronista López de Velasco, quien
actuó como albacea del poeta granadino. En este tratado, el autor da a ver como su propósito
España del siglo XVI Esta obra se va dando en: El Imperio de Carlos V: Conflictos internos,
Comunidades y Germanías también se puede hablar que en la Monarquía hispánica de Felipe
II: la unidad ibérica, la España del siglo XVI: El modelo político de los Austrias, la unión de
reinos economía y sociedad en la España del siglo XVI, Inquisición. En esos tiempos la iglesia
tenía mucho poder por los regalos o de las ofrendas que le daban los fieles a cambio de la
intersección, todas esas ofrendas las guardaban celosamente porque consideraban que ellos
se lo merecían, siendo mezquinos y guardándoselo solo para ellos, a pesar de lo que decía la
biblia de dar a los que lo necesitan aunque ellos no lo hacían.
Lázaro encuentra a un clérigo en Maqueda, lo conoció un día cuando este pedía limosna,
también su segundo amo era aún más avaro que el primero y además solo le alimentaba
cuando moría alguien y la familia del difunto les daba pan, no obstante el clérigo le daba una
cebolla por semana a Lázaro para que se alimente.
La cuestión es que en seis meses que estuvo con el clérigo solo murieron 20 personas, así que
Lázaro se vio obligado a hacer una copia de una llave que abría un baúl donde el cura
guardaba todas las provisiones y, cada vez que el clérigo abandonaba la casa, Lázaro
aprovechaba para comer, cuando su amo vio que faltaba pan decidió asegurar el más el baúl.
Pensando que eran ratones, pero faltaba comida, pensó que era una culebra. Lázaro, con
miedo a que le descubriese, se guardaba la copia de la llave en la boca a la hora de dormir.
Pero una noche se le atravesó la llave y parecía que silbaba. El clérigo al oír semejante silbido
pensó que era la serpiente y fue a golpearla con una pala, golpeando la cabeza de Lázaro. Sin
embargo, al recuperarse del golpe, que le dio y de curarlo el religioso echó a Lázaro.
El lenguaje que se muestra era extensiva como las palabras: fuime, sin embargo este lenguaje
ya no se usa en este tiempo; el propósito del autor es criticar y denunciar la mezquindad de
uno de los representantes de la iglesia realizaba, además en el tema se pude ver la corrupción
y la avaricia del clérigo mostrando la mezquindad por sus alimentos.
El clérigo debería ser bueno, amoroso con su prójimo, sin embargo se le nota como una
persona mezquina, en lugar de mostrarse como los que son en la iglesia verdaderamente, ya
que los clérigos pertenecían a él, también el personaje tuvo mala suerte con sus amos, su
nivel económico no era buena porque incluso llega a pedir limosna, va de mal a peor.
Me parece inaudito cómo el personaje del clérigo, que está investido de formación cristiana, no
se comporte a la altura de su investidura, por lo contrario hay aspectos rescatables de este
personaje como cuando ayuda a su prójimo al dar refugio a un desconocido. No me parece el
actuar del clérigo al mostrar apariencias buenas ante los demás, aunque no lo usaba con su
prójimo Lázaro cuando había mezquindad y egoísmo con sus alimentos al guardar para él.
Tampoco me parece este lenguaje que muestra el autor ya que no se usan en el tiempo actual,
al final rescato algunos actos buenos del clérigo, por su sirviente Lázaro, también no me gusta
cómo pone el autor a Lázaro que cada vez va de mal en peor con los amos que obtuvo en su
vivir, incluso que ahora comía menos que antes. Peralta López Alex Junior