El documento describe el Naturalismo como un estilo artístico y literario que surgió en Francia en el siglo XIX y se extendió por Europa, cuyo objetivo era reflejar la realidad de una manera objetiva y documental, incluyendo tanto los aspectos más nobles como los más vulgares de la condición humana. Se considera una evolución del Realismo enfatizando que el individuo está determinado por factores como la herencia genética, las influencias sociales y el entorno en que vive. Su máximo representante fue el periodista Émile Zola.