1. Actividades
Para comenzar con el trabajo del módulo la propuesta es la siguiente:
1. Realiza un cuadro de doble entrada que contenga las características
del movimiento “Modernismo” y “Realismo”:
MODERNISMO REALISMO
Fenómeno revolucionario que, surge
a finales del siglo XIX y principios del
XX, en un contexto de metamorfosis
sociocultural e influenciado por
numerosos cambios de ideologías.
Época innovadora en todos los
terrenos del saber humano, hasta en
la religión (donde para algunos se
manifestó primero).
En la literatura descubrió una serie de
normas absorbidas por el sincretismo
perenne hispanoamericano.
El artista modernista es antitético.
Sale a flote la individualidad, que
aumenta con el correr de los años.
Busca lo ideal sin perder de vista las
realidades más inmediatas de la vida.
Se centra en la solución de síntesis y
armonía.
La primera generación modernista
(1882-1896) la encabezan José Martí
y Manuel Gutiérrez Nájera
Rubén Darío es el que emplea la
expresión "modernismo" refiriéndola a
literatura. Lo hace en 1890 en un
ensayo sobre Ricardo Palma. Un
Corriente estética que llegó para
romper con el romanticismo existente.
Surge en la segunda mitad del siglo
XIX.
En Hispanoamérica el realismo
comenzó a manifestarse hacia 1880
aproximadamente. Los temas fueron
propios de cada país.
Sus pioneros fueron Honoré Balzac y
Henri Beyle Stendhal y, se desarrolló
plenamente con Gustavo Flaubert.
En Balzac, la imagen del personaje
estaba concebida, en primer término,
y era expresada a través de los
detalles de vestuarios inventados
según esa imagen. En Flaubert se
siente que es la documentación la que
crea a los personajes. Así nació el
realismo documental.
Es la transformación del romanticismo
individual en un romanticismo de lo
social, que implica a la vez, la mirada
del punto de vista histórico.
Predomina la prosa: novela y ensayo.
La novela conoce la tentación de la
totalidad.
2. movimiento que se inspiraba en el
simbolismo francés, que se nutría
tanto en Whitman y Poe como en el
Siglo de Oro español.
La segunda generación está
compuesta por: Leopoldo Lugones,
Ricardo Jaimes Freyre, Amado Nervo,
y Julio Herrera y Reissig.
Se divide en dos etapas: Preciosista y
Mundonovista.
El modernismo coincide con un rápido
y pujante desarrollo de ciertas
ciudades hispanoamericanas, que se
tornan cosmopolitas y generan un
comercio intenso con Europa.
En narrativa, se opone al realismo,
optando por la novela histórica o la
crónica de experiencias de
alucinación y locura, y la descripción
de ambientes de refinada bohemia;
introduce un elemento erótico con la
aparición del personaje de la mujer
fatal, que lleva a los hombres hacia el
placer y la muerte.
El modernismo reacciona contra el
Romanticismo, el Naturalismo y el
Realismo. Y, se nutre del
Parnasianismo y el Simbolismo.
Aporta un cambio definitivo en el
manejo expresivo del idioma
(español).
Cuando se lee realismo podemos
visualizar e imaginarnos en medio de
la lectura porque, posee una detallada
información de los personajes,
paisajes, etc.
Realismo textual y Realismo
simbólico.
El realismo se opone al género
maravilloso y a lo fantástico.
El propósito del realismo es
presentarse como un discurso
traslúcido y coherente porque tiene un
carácter predominantemente
informativo. Toma como modelo al
discurso científico.
Para los realistas el mundo es
conocible, penetrable, abordable.
La trama de la novela realista se
expondrá sin elipsis narrativas que
den lugar a dudas o ambigüedades.
Para el texto realista, los personajes
no tienen ninguna intimidad, son
traslúcidos.
En la novela realista se quiere dar la
ilusión de que los hechos narrados no
interrumpen el flujo vital, que son
continuación del extratexto, o lo que
es lo mismo, quiere que desaparezca
ese corte arbitrario entre lo real y lo
ficticio.
El realismo, es un producto histórico
de la burguesía europea después de
la formación de los estados-nación.
3. Es la base sobre la que se
desarrollará la literatura
hispanoamericana del siglo XIX.
2. Realizar una autobiografía de José Martí para la cual deberán
posicionarse como si uds. fueran él.
Mi nombre es José Julián Pérez Martí soy uno de los iniciadores del movimiento
conocido como modernismo en el siglo XIX, en donde inicia una revolución
literaria. Formé parte de la primera etapa del mismo (1882-1896) en conjunto con
mi compañero Manuel Gutiérrez Nájera. Inicie el modernismo latinoamericano.
Nací en La Habana el 28 de enero de 1853. Mi padre era Mariano Martí, natural
de Valencia (España), y mi madre Leonor Pérez Cabrera, de Santa Cruz de
Tenerife, Canarias, España.
Fui un escritor y político republicano democrático de origen cubano;
pensador, periodista, filósofo y poeta. Además, fui el creador del Partido
Revolucionario Cubano y organizador de la Guerra del 95, o la llamada guerra
de Independencia de Cuba.
Me matricule en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana. Ingresé
también en la clase de Dibujo Elemental en la Escuela Profesional de Pintura y
Escultura de La Habana.
El 21 de octubre de 1869 ingrese en la Cárcel Nacional acusado de traición por
escribir una carta Carlos de Castro (un compañero que servía como voluntario
en el ejército opositor a los independistas). El 4 de marzo de 1870, fui condenado
a seis años de prisión, pena posteriormente conmutada por el destierro a Isla de
Pinos. Sin embargo, el 15 de enero de 1871, por gestiones realizadas por mis
padres, logré ser deportado a España. Allí comencé a cursar estudios en las
4. universidades de Madrid y Zaragoza, donde me gradué de Licenciado
en Derecho Civil y en Filosofía y Letras.
Durante mi estancia en Zaragoza, colaboré en el Diario de Avisos de Zaragoza,
publicación de tendencia republicana dirigida por Calixto Ariño.
El 8 de febrero de 1875, llego a Veracruz para reunirme con mi familia.
En México entablé relaciones con Manuel Mercado y conocí a Carmen Zayas
Bazán, la cubana de Camagüey que posteriormente sería mi esposa.
Del 2 de enero al 24 de febrero de 1877 estuve de incógnito en La Habana como
Julián Pérez. Al llegar a Guatemala trabaje en la Escuela Normal Central como
catedrático de Literatura y de Historia de la Filosofía. Retorne a México, para
contraer matrimonio con Carmen el 20 de diciembre de 1877.
En 1878, comencé mis labores conspirativas figurando entre los fundadores del
Club Central Revolucionario Cubano, del cual fui elegido vicepresidente el 18 de
marzo de 1879. Posteriormente el Comité Revolucionario Cubano, radicado
en Nueva York bajo la presidencia del Mayor General Calixto García, me nombró
subdelegado en la isla.
Entre el 24 y el 26 de agosto de 1879 se produce un nuevo levantamiento en las
cercanías de Santiago de Cuba. El 17 de septiembre fui detenido y deportado
nuevamente a España.
En los siguientes años, colaboré y encabecé reiterados levantamientos, como el
de 1895, y participé del Plan Fernandina.
Mis últimos días de vida los viví luchando por mi país. El 19 de mayo de 1895
una columna española se desplegó en la zona de Dos Ríos, cerca de Palma
Soriano, donde acampábamos. Yo marchaba entre Gómez y el Mayor
General Bartolomé Masó. Al llegar al lugar de la acción, Gómez me indicó
detenerme y permanecer en el lugar acordado. No obstante, en el transcurso del
combate, me separé de las fuerzas cubanas, acompañado solamente por mi
ayudante Ángel de la Guardia. Cabalgué, sin saberlo, hacia un grupo de
españoles, ocultos en la maleza, y fui alcanzado por tres disparos que me
provocaron heridas mortales.
5. Mi cadáver no pudo ser rescatado por los mambises (soldados cubanos). Tras
varios entierros, fui finalmente sepultado el día 27, en el nicho número 134 de la
galería sur del Cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba.
3. Buscar poemas de Rubén Darío y marcar partes que crean que
representa al modernismo.
Cantos de vida y esperanza
Prefacio
Podría repetir aquí más de un concepto de las palabras liminares de Prosas
Profanas. Mi respeto por la aristocracia del pensamiento, por la nobleza del Arte,
siempre es el mismo. Mi antiguo aborrecimiento a la mediocridad, a la mulatez
intelectual, a la chatura estética, apenas si se aminora hoy con una razonada
indiferencia. El movimiento de libertad que me tocó iniciar en América se propagó
hasta España, y tanto aquí como allá el triunfo está logrado. Aunque respecto a
técnica tuviese demasiado que decir en el país en donde la expresión poética
está anquilosada, a punto de que la momificación del ritmo ha llegado a ser un
artículo de fe, no haré sino una corta advertencia. En todos los países cultos de
Europa se ha usado del hexámetro absolutamente clásico, sin que la mayoría
letrada y, sobre todo, la minoría leída, se asustasen de semejante manera de
cantar. En Italia ha mucho tiempo, sin citar antiguos, que Carducci ha autorizado
los hexámetros; en inglés, no me atrevería casi a indicar, por respeto a la cultura
de mis lectores, que la Evangelina, de Longfellow, está en los mismos versos en
que Horacio dijo sus mejores pensares. En cuanto al verso libre moderno..., ¿no
es verdaderamente singular que en esta tierra de Quevedos y Góngoras los
únicos innovadores del instrumento lírico, los únicos libertadores del ritmo, hayan
sido los poetas del Madrid Cómico y los libretistas del género chico? Hago esta
advertencia porque la forma es lo que primeramente toca a las muchedumbres.
Yo no soy un poeta para las muchedumbres. Pero sé que indefectiblemente
tengo que ir a ellas.
6. Cuando dije que mi poesía era mía, en mí, sostuve la primera condición de mi
existir, sin pretensión ninguna de causar sectarismo en mente o voluntad ajena,
y en un intenso amor a lo absoluto de la belleza.
Al seguir la vida que Dios me ha concedido tener, he buscado expresarme lo
más noble y altamente en mi comprensión: voy diciendo mi verso con una
modestia tan orgullosa, que solamente las espigas comprenden, y cultivo, entre
otras flores una rosa rosada, concreción de alba, capullo de porvenir, entre el
bullicio de la literatura. Si en estos cantos hay política, es porque aparece
universal. Y si encontráis versos a un presidente, es porque son un clamor
continental. Mañana podremos ser yanquis (y es lo más probable); de todas
maneras, mi protesta queda escrita sobre las alas de los inmaculados cisnes, tan
ilustres como Júpiter.
Rubén Darío.
Cantos de vida y esperanza (1905).
4. Leer la obra “M´ hijo El dotor” de Florencio Sánchez y realiza una
reseña crítica de la misma.
La obra nos muestra la desdichada vida de Jesusa, una joven honesta, inocente,
alegre y muy valiente; y, por el otro lado, nos encontramos a Julio, un doctor en
proceso, un hombre con ideas nuevas y desconocidas en el campo (lugar de sus
orígenes), pensamientos traídos de la ciudad, muy ajenos a las costumbres y
tradiciones de sus padres.
A mi parecer es una historia atrapante, con un desenlace un poco incognito y
abierto al no saber cuál será la “fortuna” de la joven embarazada, si por fin
comprendió su valor como mujer, algo muy poco convencional en aquella época
en donde, la figura femenina obedecía a lo impuesto por el género masculino; ya
que ante sucesos como estos se los pronunciaba como deshonras para las
mismas y sus familias.
Algo que critico también, es la actitud de Julio, al darse cuenta, quizás, un poco
tarde de todos los errores cometidos, y las tragedias que trajo a su familia. Sin
7. embargo, esta obra supo transportarme a cada uno de los escenarios en donde
se desarrolló, las reacciones de cada uno de sus personajes y el lenguaje
particular utilizado.
A mi parecer me parece una buena obra, que tendría que tener una resolución
del problema, porque queda inconclusa, y sería bueno que tuviera un buen
desenlace.