Este documento discute dos enfoques sobre la sociedad de la información: uno que enfatiza el rol central de la tecnología en la economía, y otro que argumenta que la política debe regular el desarrollo tecnológico y de la información considerando a la sociedad. También presenta una propuesta alternativa para una verdadera sociedad del conocimiento basada en ver la información como un bien público y el conocimiento como una construcción social colectiva en lugar de una mercancía o propiedad privada.