2. Introducción
La evolución de la psicomotricidad se da a tres niveles: Motriz: se refiere al movimiento corporal
del niño. Cognitivo: capacidades de concentración, memorización y habilidades creativas.
Socio-afectivo: permite al niño relacionarse con los demás de manera satisfactoria, superando
sus miedos y dificultades.
El objetivo principal de la psicomotricidad es: Desarrollar la capacidad sensitiva, perceptiva,
representativa, comunicativa y expresiva mediante la interacción activa del cuerpo con su
entorno.
3. La actividad corporal y el lenguaje como instrumentos de intervención.
Las propiedades educativas que aporta la actividad corporal son las siguientes:
Posibilita la toma de conciencia de las partes del cuerpo; la utilización y regulación en
función del objetivo inhibiendo movimientos innecesarios.
Conduce a la construcción del esquema corporal, con todos sus elementos y a la
organización de las percepciones y acciones en una estructuración espacio-temporal
adaptada a la realidad.
Permite el conocimiento de las cualidades de los objetos y elaborar imágenes mentales. La
manipulación de los objetos dará lugar, posteriormente, a las operaciones mentales.
Hace posible, mediante la percepción de relación entre la propia actividad y los resultados
de la misma, la anticipación de la acción, la programación de los movimientos a realizar en
función de unos deseos o necesidades.
La motivación y los refuerzos
Uno de los requisitos que ha de tener un planteamiento educativo es el de responder a las
necesidades intereses de a persona a la que se dirige, por ello en la intervención o practica
psicomotriz será muy conveniente tener presentes los factores motivacionales de los niños y
niñas con los que se ha de trabajar.
Los refuerzos y los castigos pueden ser positivos, cuando aportan algo a la situación, o
negativos, cuando eliminan algo de la situación. En la práctica educativa debemos
reforzar las conductas adaptativas o que signifiquen progreso en el aprendizaje, y recurrir a la
extinción o al reforzamiento de conductas alternativas, no al castigo, para suprimir conductas
inconvenientes. Los refuerzos deben ser inmediatos, directos, personales e ilimitados.
La organización espacial y temporal de las actividades
Con el fin de centrar la atención de los niños y organizar su comportamiento y su actividad, se
debe proporcionar al niño o a la niña, en esta etapa, una serie de ayudas externas como son
el orden y la organización espacial y temporal de las actividades, puesto que no existe por su
parte capacidad de estructurar el espacio y mucho menos el tiempo.
4. Para evitar la desorientación espacial o temporal conviene facilitarle una serie de normas de
manera que, una vez interiorizadas, sea capaz de organizar su actividad y respetar los turnos,
los espacios y tiempos de los demás.
Algunas normas son:
Cada cosa tiene un sitio
Cada persona tiene un espacio para trabajar
Cada actividad se hace en un espacio propio
Hay un tiempo para cada actividad y un orden de las actividades
A veces trabajamos juntos, pero individualmente
A veces trabajamos en equipo
Importancia de las obras de Wallon y Piaget
La obra de Piaget, como por lo demás cualquier otra, se esclarece cuando es puesta en
relación con la de quienes elaboraron obras en algún sentido próximas a la suya. Los puntos
de contacto o de contraste que puedan existir entre reflexiones dotadas de tal proximidad se
convierten en puntos de luz que iluminan, a veces desde ángulos no usuales, algunos de los
sectores que las componen.
La comparación de la obra de Piaget con la de Walton es clásica; tilos mismos polemizaron
poniendo de manifiesto algunos de los puntos de acuerdo y divergencia que entre sus
enfoques y puntos de vista existían. Uno de los problemas a propósito de los cuales
discreparon durante largo tiempo fue el de la génesis de la representación, el de los orígenes
de la función simbólica. La discusión en torno al papel de la imitación, a la distinción entre lo
figurativo y lo operativo, a la continuidad entre lo sensoriomotor y lo representative, fue en
buena medida el leitmotiv de sus oposiciones. artículo de E. Jalley y la contrarréplica
conciliadora de Piaget a Walton que siguen a esta introducci6n, aclaran bastante bien el origen
y desarrollo de las discusiones. En las Líneas que anteceden a esos artículos vamos a
reflexionar brevemente sobre algunos aspectos generales de las obras de Piaget y Wallon,
sobre lo que en ellas nos parece poder ver de semejante y diferenciador.
En contra de otros puntos de vista, que defienden que las de Piaget y Wallon son obras
5. radicalmente distintas, sostenemos que existen entre ellas abundantes puntos de contacto.
Para empezar, los dos tuvieron como objeto de estudio privilegiado, pero no exclusivo al niño,
y eso no puede por menos que producir concomitancias entre las explicaciones dadas por uno
y otro.
La historia de las ideas es una rama especial de la historiografía que estudia la determinación
y evolución de las ideas expresadas o reconstruirles a través de las distintas producciones
culturales. Si bien la historia de las ideas es relativa en general a disciplinas y ciencias,
religiones y creencias, es de reconocer que ha disfrutado especialmente de fuerte desarrollo
en las modalidades de historia de las ideas estéticas, campo en el que irrumpe durante el
último cuarto del siglo XIX por obra de Marcelino MenéndezPelayo,1 e historia de las ideas
políticas.
Cabe afirmar como campos de estudio frecuentemente relativos a la historia de las ideas tanto
la historiade la filosofía, la filosofía de la historia y la historia de la ciencia como la historia del
arte, la historia de la literatura o la historia de las religiones, al igual que la ética, la antropología
cultural, la estética, la musicología, la poética, la retórica, la gramática o la lingüística, entre las
ciencias humanas, o la jurisprudencia, la historia de las instituciones, la sociología del
conocimiento y la economía, entre las ciencias sociales.
Importancia de la génesis de la noción del cuerpo.
GENESIS DEL CUERPO La elaboración del cuerpo se estructura en sus líneas generales a lo
largo de la infancia y se proyecta en una permanente evolución dialéctica inacabada, durante
toda la existencia del individuo. Abordamos esta perspectiva genética poniendo en correlación
2 aspectos indisociables 1) El estudio de la noción del cuerpo en el cuadro cognitivo y ejecutivo
2) Aspecto psicoafectivo y relacional inherente a la construcción de la imagen del cuerpo.
6. Conclusiones
La psicomotricidad es un componente esencial que se debe trabajar en el aula desde edades
tempranas, ya no solo por hacer al alumno más hábil a nivel motor, sino porque el
conocimiento; lo cognitivo, tiene su base en la acción motriz, que pone al niño en contacto con
los que le rodean.