En tiempos en los que las relaciones comunitarias han cobrado una relevancia sin precedentes en la historia del sector extractivo, el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) tiene el compromiso de fortalecer la implementación y difusión de las mejores prácticas en este campo.
2. EL CONGRESO DE
GESTIÓN SOCIAL
MÁS IMPORTANTE DEL SECTOR
EXTRACTIVO PERUANO
En tiempos en los que las relaciones comunitarias han cobrado una relevancia sin precedentes en la
historia del sector extractivo, el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) tiene el compromiso de
fortalecer la implementación y difusión de las mejores prácticas en este campo por lo que organizamos
el III Congreso Internacional de Relaciones Comunitarias, bajo el lema: “Gestión Social Sostenible:
Mejorando Capacidades”.
Es así que, con un espíritu de apertura y participación plural, invitamos a los diversos actores del sector
público, privado y la sociedad civil a protagonizar este espacio de diálogo constructivo e intercambio
de ideas, que nos llevó a encontrar el camino correcto para alcanzar juntos el desarrollo sostenible de
las comunidades, y por supuesto, del país.
Presidente
Víctor Gobitz Colchado
Primer Vicepresidente
Fernando Gala Soldevilla
Segundo Vicepresidente
Miguel Cardozo Goytizolo
Secretario
Germán Arce Sipán
Prosecretario
Eutemio Calderón Chumbile
Tesorero
Juan Carlos Ortiz Zevallos
Protesorero
Fernando Maldonado Astorga
Vocales
Marcelo Santillana
Luis Rivera Ruiz
Luis Alberto Brocos Gutiérrez
Pedro Cárdenas Medina
Raúl Garay Villanueva
Víctor De La Cruz Matos
Presidente saliente del Consejo Directivo 2014 -
2016 como Vocal Nato
Antonio Samaniego Alcántara
Representante del Capítulo de Minas del
Consejo Departamental de Lima del Colegio de
Ingenieros del Perú
Benjamín Jaramillo Molina
CONSEJO DIRECTIVO IIMP
COMISIÓN ORGANIZADORA III CIRC
Gonzalo Quijandría Fernández
Presidente de la Comisión Organizadora
III Congreso Internacional de Relaciones Comunitarias
Presidente de la Comisión Organizadora
Gonzalo Quijandría Fernández
Presidente del Consejo Directivo IIMP
Víctor Gobitz Colchado
Fernando Castillo Torres
Carlos Castro Silvestre
Felipe Quea Justo
Ricardo Morel Bosio
Lucio Ríos Quinteros
Abraham Vila Matos
Luis Zapata Palacios
Comisión
Isabel Arias Vargas
Eutemio Calderón Chumbile
Pedro Cárdenas Medina
3. Líder del bloque: Lucio Ríos, profesor universitario y consultor de responsabilidad social y relaciones
comunitarias.
OBJETIVOS
Dar a conocer los avances, impactos y desafíos en gestión social de las empresas extractivas para el
desarrollo sostenible de las comunidades.
SÍNTESIS
Luego de agradecer a todos los panelistas y conferencistas por su valioso aporte a lo largo de las
intervenciones, el Ing. Lucio Ríos destacó las últimas conclusiones de la Mesa Redonda “Análisis,
reflexiones y oportunidades del impacto social de las industrias extractivas" un reto importante: dejar de
ver a la gestión social como una labor asumida como un área complementaria para entenderla como
un trabajo transversal, que se deberá incorporar en el planeamiento estratégico del negocio minero. A
partir de ahí todos los objetivos podrán ser planteados con una visión más integral.
Ríos consideró importante generar un trabajo de integración entre las empresas extractivas, más allá de
los esfuerzos aislados. Este proceso deberá aplicarse en la organización interna de las propias
empresas. En ese sentido, será necesario realizar un trabajo de sensibilización, de involucramiento y de
compromiso desde los niveles más altos hasta los más bajos.
Asimismo, destacó que aún existen desafíos para articular los esfuerzos de las empresas con lo que
realmente requieren las comunidades, superando la incredulidad y construyendo confianza con
mecanismos de diálogo a fin de lograr la sostenibilidad de los programas sociales en alianza con el
Estado, gobiernos regionales, locales y comunidades.
Por otro lado, indicó que no pueden verse con malos ojos a los conflictos sociales. Según Ríos, se tratan
de herramientas muy útiles para revisar la propia actuación. A título personal, mencionó que le sirvieron
para involucrar, de una manera más eficiente, a todas las áreas de la empresa.
En el repaso de las intervenciones del día, destacó la ofrecida por Tim Johnston que se basó en la forma
en la que las empresas se interrelacionaron con los gobiernos locales (municipalidades) y se integran en
el plan de desarrollo de las comunidades. Consideró valioso rescatar esa experiencia para poder
adaptarla a la realidad peruana. Asimismo, agregó que los avances del programa Comunidades
Inclusivas y Sostenibles de América Latina de la Federación Canadiense de Municipalidades
(FCM-CISAL), dentro de estos dos proyectos peruanos, podrían ser conocidos con mayores detalles para
su difusión a otros actores.
De la conferencia de Alejandro Hermoza, Ríos valoró cómo los objetivos del desarrollo de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) son articulados con los planes que deben fijarse los
proyectos de las áreas de relaciones comunitarias. No obstante, sugirió no quedarse en la medición de
resultados macros, sino centrarse en el impacto a nivel local.
Otro punto a tener en cuenta-añadió- es la búsqueda de mejores formas de comunicar para difundir
todas las implicancias de los proyectos realizados. Por último, valoró el diálogo como un mecanismo
fundamental para el desarrollo social, pero no solo a partir de un conflicto sino como una forma de
construir un capital social que permita un óptimo engranaje con la sociedad.
Finalmente, remarcó que es prioritario crear una cultura colaborativa de capital social entre las
industrias extractivas y los grupos de interés, a favor del desarrollo sostenible. Con esa visión informó
que el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) suscribirá próximamente un convenio marco de
mutua colaboración con la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM).
CONCLUSIONES
BLOQUE: DESARROLLO SOCIAL EN INDUSTRIAS EXTRACTIVAS
4. OBJETIVOS
Reflexionar sobre la importancia del modelo multiactor para establecer relaciones de confianza con las
comunidades y prevenir conflictos sociales.
El modelo multiactor requiere de monitoreo constante. También mencionó la importancia de la
capacitación de todos los actores involucrados para tener una visión y un plan de desarrollo
sostenible en los territorios intervenidos, así como acabar con el asistencialismo.
Propiciar una responsabilidad moral de parte de los líderes mineros, además de una responsabilidad
social y ambiental.
Documentar los errores y la forma en que fueron resueltos para no repetirlos. Garantizar una mejor
comunicación entre las áreas de la empresa ya que a veces el problema es más de corte interno.
Realizar una auditoría social en todas las etapas del proyecto. Generar institucionalidad desde la
empresa para generar confianza y predictibilidad.
Elaborar un análisis de riesgo social, en el que se incluya a los actores de la comunidad.
Pasar del enfoque bilateral al enfoque multiactor, respaldado por un consenso general.
Fijar un tiempo de vida de los proyectos mineros y que las oficinas de gestión territorial tengan la
capacidad para resolver problemas de forma inmediata.
Dar importancia al factor económico, pero tener muy claro de que no es suficiente. Pasar de la
responsabilidad social a la responsabilidad social territorial con un enfoque multiactor. Además,
pasar de la soberbia a la humildad.
Pasar de una incidencia política para beneficios del sector a una que beneficie a la comunidad.
Gestionar la diferencia.
Tener en cuenta la diversidad de las emociones, la mente y el cuerpo: alinearlas a la búsqueda de
mejores entendimientos.
Asumir el reto de que el Perú puede ser un ejemplo, como sostuvo Asier Hernando. Considerar la
importancia del lenguaje. Tener una visión de país, por ahora inexistente en un sector clave para el
desarrollo nacional.
Recoger las experiencias de otros países como Chile, Australia y Colombia. Lograr metas a corto
plazo para restituir la confianza. Fijar una hoja de ruta para encarrilar la visión que se construya.
Trascender los ciclos de vida política: ir más allá del corto plazo.
Revisar justamente la experiencia colombiana donde el diálogo se hizo imposible en un inicio, y
donde se entendió que cuanto más tiempo pase para resolver esa falta de comunicación, más
complicado es volver al punto de inicio.
SÍNTESIS
BLOQUE: ESPACIOS DE CONCERTACIÓN MULTIACTOR
Líder del bloque: Ricardo Morel, consultor experto en estrategia social.
5. OBJETIVOS
Presentar los alcances e implicancias del Convenio 169 de la OIT y la Ley de Consulta Previa en el
relacionamiento de las comunidades con el sector extractivo.
A modo de compromiso con el panel anterior, Felipe Quea anunció que enviará al Ministerio de Cultura
parte de la información que demuestra los potenciales vacíos en los mecanismos de identificación de los
pueblos indígenas y originarios, las dificultades para la sistematización de un registro que esté en
consonancia con los criterios dados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Dicho lo anterior, planteó cuatro conclusiones derivadas del bloque:
En primer lugar, señaló que existen similitudes y diferencias en los procesos de aplicación de consulta
previa en los países de la región: las similitudes se pueden advertir en el marco legal, dijo. Resaltó el
enfoque del colombiano Carlos Quesada que entiende a la consulta previa más como un principio
que como un marco normativo. De ese modo, se garantiza el cumplimiento de los derechos colectivos
de grupos postergados desde una visión más inclusiva, de respeto y de acceso a los derechos
fundamentales.
Como segundo punto mencionó que varios países en Latinoamérica recientemente empezaron a
describir las características de sus ciudadanos a partir de la implementación del proceso de la
consulta previa. Recordó que el convenio 107 de la OIT se creó en la década de los cuarenta en un
escenario geoestratégico bipolar y que el convenio 169 se dio en 1989, poco antes de la caída del
Muro de Berlín y del inicio de la crisis de paradigmas.
Quea indicó que ambos puntos guardan relación con lo expresado por Mirna Cunningham: que la
agenda a futuro de estos derechos colectivos empezó a ser reconocida y se están extrapolando a
otras poblaciones vulnerables. Mundialmente viene ocurriendo una expansión de derechos
colectivos. Ante eso, no se puede estar ajenos a que cada vez más la sociedad exige el respeto de
derechos colectivos y una defensa de las comunidades en situación de vulnerabilidad.
Por lo tanto, el rol de los Estados pasa por el desarrollo de más capacidades para poder garantizar
el cumplimiento pleno de estos derechos: menos abogados y más especialistas que construyan
herramientas adecuadas. Parafraseando a Cunningham señaló que la labor actual de los Estados es
poder ayudar en la consolidación de las capacidades que permitan a las comunidades estar a la
altura de las exigencias.
En el tercer punto señaló que el mecanismo de consulta previa no es una herramienta para empoderar
a un grupo ideopolítico, sino una forma de reconocer derechos postergados. Aunque se ha advertido
su utilización como una herramienta para solicitar otros tipos de demandas postergadas por años.
Del mismo modo, Morel remarcó que a veces los estrictos requisitos exigidos para la minería terminan
propiciando la existencia de una minería informal, que puede llegar a convertirse en una minería ilegal.
Por esa razón es necesario más que nunca contar una visión de país para este sector, indicó.
Su exposición finalizó con un llamado a la reflexión sobre la necesidad de tener una Sociedad de
Minería desligada de la actual Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE). Señaló que
esta entidad netamente minera sería un espacio de diálogo para escuchar a los que discrepan e
involucrar a los diferentes actores. Incluso se propuso como expositor de las razones para justificar un
gremio minero. “Me quedo con la frase 'la minería sí, pero no así'”; concluyó.
Líder del bloque: Felipe Quea, gerente de proyectos, Pleno Ingeniería Social.
SÍNTESIS
BLOQUE: MECANISMOS DE CONSULTA
6. Por eso Quea pidió que no se confunda la responsabilidad del Estado ante los derechos que se vean
afectados por medidas administrativas con otro tipo de obligaciones del pasado.
En ese sentido, sugirió que la industria mire este mecanismo como una medida de Estado y lo incorpore
dentro de sus políticas corporativas para un mejor relacionamiento con su entorno social. Solo de esa
forma se podrá reconocer de una mejor manera a los sujetos de un grupo indígena legítimo.
Finalmente, como último punto, señaló que esta nueva etapa de implementación y ejecución de la
consulta previa aún está en ciernes. Tanto los panelistas nacionales e internacionales así lo indicaron
a lo largo de sus intervenciones. La experiencia muestra que los países latinoamericanos apenas
llevan diez años en la construcción de las herramientas necesarias para aplicar la consulta previa.
Como no existe una única receta y cada país debe identificar a sus sujetos de derecho, eso obligará
a transitar un camino muy estrecho en el que se deberá afinar las herramientas para que el
mecanismo no sea desvirtuado y legitime cualquier proyecto de inversión de las industrias extractivas.
Luis Zapata inició su exposición pidiendo reflexionar sobre la enorme tarea en gestión social que tienen
las industrias extractivas en nuestro país. Consideró que hay mucho camino por hacer. Sobre todo, la
necesidad de ir a trabajar con las comunidades en las mismas zonas de influencia. Ser actores de
cambio para demostrar que la minería permite el crecimiento económico y social.
Es totalmente reconocido que las industrias extractivas han desarrollo tecnología para mejorar la gestión
del agua. Este valioso recurso podría ser empleado como una herramienta para promover el diálogo.
Por ignorancia, aprovechamiento o manipulación, se quiere dar una percepción de permanente
enfrentamiento entre el comunero y el trabajador de la mina con relación al tema del agua, indicó.
A través de Autoridad Nacional del Agua (ANA) y sus directivas se han podido constituir los consejos
de las cuencas. Son ocho en total que tienen a su cargo 35 cuencas de agua en todo el país.
Asimismo, afirmó que es necesario reconocer las múltiples oportunidades que un proyecto puede
generar en sus diferentes etapas para las comunidades. Ya muchos vienen trabajando este tipo de
iniciativas, lo que evidencia que la minería forma parte del desarrollo sostenible del país.
A través de los servicios locales y el fortalecimiento de capacidades, se gana la licencia social. Si bien
algunos prefieren denominarla como una continuidad de operaciones, lo cierto es que ese un intangible
muy importante para la legitimidad de las actividades.
Finalmente, resaltó el importante anuncio de la Oficina Nacional de Diálogo y Sostenibilidad (ONDS)
de la Presidencia del Consejo de Ministro (PCM) sobre el establecimiento de un sistema de prevención
y gestión de conflictos: con alertas tempranas complementadas por mecanismos de monitoreo y
cumplimiento de acuerdos. De ese modo, se conseguirá que la actividad minera opere sin problemas
para el bienestar de todos los peruanos.
OBJETIVOS
Demostrar con rigor académico que muchas afirmaciones negativas en torno al sector minero son en
realidad mitos, prejuicios o medias verdades.
Expositor: Luis Zapata, gerente corporativo de Comunicaciones y Gestión Social, Petroperú
SÍNTESIS
BLOQUE: DERRIBANDO MITOS