2. La Historia Del Jabon
El jabón (del latín tardío sapo, -ōnis, y
este del germánico saipôn) es un
producto que sirve para
la higiene personal y para lavar
determinados objetos. Se puede
encontrar en pastilla, en polvo, en
crema o en líquido.
3. La Historia Del Jabon
El jabón generalmente son sales sódicas o
potásicas resultadas de la reacción
química entre
un álcali (generalmente hidróxido de
sodio o de potasio) y algún lípido; esta
reacción se denomina saponificación. El
lípido puede ser de origen vegetal (aceite)
o animal (grasa), por ejemplo, manteca de
cerdo o aceite de coco. El jabón es soluble
en agua y, por sus propiedades detersivas,
sirve comúnmente para lavar.
4. La Historia Del Jabon
Tradicionalmente es un material sólido.
En realidad la forma sólida es el
compuesto "seco" o sin el agua que
está involucrada durante la reacción
mediante la cual se obtiene el jabón, y
la forma líquida es el jabón "disuelto" en
agua, en este caso su consistencia
puede ser muy viscosa o muy soluble.
5. La Historia Del Jabon
Origen del jabón
Como ocurre con otros muchos productos no está claro cuando
ni cómo se inventó el jabón, y diversos pueblos y leyendas se
atribuyen su invención.
Según la leyenda, se descubrió en Italia. Cuentan que en el
Monte Sapo, cerca de Roma, se hacían sacrificios
ceremoniales de animales. En ese mismo monte ardían fuegos
para la realización de esas ceremonias de sacrificio. Cuando
llovía el agua arrastraba la grasa animal y las cenizas de esos
fuegos, que bajaban por riachuelos hasta la base del monte.
Los esclavos que lavaban la ropa de sus amos en las aguas
que bajaban desde ese monte descubrieron que esas aguas la
limpiaban mejor e indagando en la razón de esto descubrieron
cómo hacer jabón.
Los restos de jabón más antiguos son de origen babilonio y
datan del 2800 a. C.
6. La Historia Del Jabon
Tipos:
Jabón para afeitar.
Existen innumerables tipos de jabón; científicamente no pueden estar
marcadas por la consistencia, el olor, la forma, el color, la textura, o sus
propiedades limpiadoras o terapéuticas. Algunos de los más conocidos
tipos de jabones son:
Jabón de Marsella.
Jabón de Castilla.
Azul y blanco portugués.
Jabón de brea.
Jabón de coche.
Para afeitar.
Jabón de Alepo. Fabricado en Alepo, Siria, utilizando extractos
de laurel y aceite de oliva.
Jabón líquido.
Jabón de aceite.
Jabón de glicerina.
7. La Historia Del Jabon
Acción detergente:
Los jabones ejercen su acción limpiadora sobre las grasas en
presencia del agua debido a la estructura de sus moléculas. Estas
tienen una parte liposoluble y otra hidrosoluble.
El componente liposoluble hace que el jabón «moje» la grasa
disolviéndola y el componente hidrosoluble hace que el jabón se
disuelva a su vez en el agua.
Las manchas de grasa no se pueden eliminar sólo con agua por ser
insolubles en ella. El jabón en cambio, que es soluble en ambas,
permite que la grasa se diluya en el agua.
Cuando un jabón se disuelve en agua disminuye la tensión superficial
de ésta, con lo que favorece su penetración en los intersticios de la
sustancia a lavar. Por otra parte, los grupos hidrofóbicos del jabón se
disuelven unos en otros; mientras que los grupos hidrofílicos se
orientan hacia el agua generando un coloide, es decir, un agregado de
muchas moléculas convenientemente orientadas. Como
las micelas coloidales están cargadas y se repelen mutuamente,
presentan una gran estabilidad.
8. La Historia Del Jabon
Métodos de obtención[:
Caja de jabón "Amigo del Obrero" de México. De la colección del Museo del Objeto.
En esencia el proceso de obtención del jabón, sea industrial o artesano, consta de tres fases:
saponificación, sangrado y moldeado.
Saponificación: se hierve la grasa en grandes calderas, se añade lentamente soda cáustica (NaOH) y
se agita continuamente la mezcla hasta que comienza a ponerse pastosa. La reacción que ha tenido
lugar recibe el nombre de saponificación y los productos son el jabón y la lejía residual que contiene
glicerina: grasa + soda cáustica → jabón + glicerina.
Sangrado: el jabón obtenido se deposita en la superficie en forma de gránulos. Para que cuaje de
una manera completa se le añade sal común (NaCl). Esta operación recibe el nombre de sangrado o
salado; con ella se consigue la separación total del jabón (que flotará sobre la disolución de glicerina),
de la sosa cáustica (que no ha reaccionado) y de agua.
Moldeado: ya habiendo realizado el sangrado, el jabón se pasa a otro recipiente o vasija donde se le
pueden añadir perfumes, colorantes, productos medicinales, etc. Entonces, todavía caliente, se vierte
en moldes, se deja enfriar y se corta en pedazos.
Tradicional jabón de Marsella.
El jabón líquido está constituido principalmente por oleato de potasio, preparado por
la saponificación del ácido oleico con hidróxido de potasio. También es muy usado (por ser más
económico), el estearato de sodio o palmilato de sodio, análogo al anterior, usando ácido
estearílico, esteárico o palmítico e hidróxido sódico, respectivamente.
En la actualidad hay dos métodos de obtención del jabón, ambos basados en la saponificación.
9. La Historia Del Jabon
Primer método:
En el primer método se produce la saponificación directamente
sobre la grasa, se hace reaccionar el álcali con la grasa, y se
obtiene el jabón y glicerina. Este método tiene como desventaja
que es más difícil la separación de la glicerina y el jabón.
Segundo método:
En este método, primero se produce la ruptura química de la
grasa, y se obtiene la glicerina y los ácidos grasos; éstos se
separan antes. Luego se produce la sal del ácido graso y los
alcalinos.
Variantes:
También se le suele agregar colorantes, cargas (para abaratar
el costo), glicerina, etc.
Farmacéutica:
En farmacéutica se puede utilizar amoníaco u otro alcalino, o
un óxido metálico, sobre aceites, grasas o resinas, y se mezcla
a veces con otras sustancias que no producen saponificación.
10. La Historia Del Jabon
Fabricación industrial:
Las materias primas se mezclan con agua hasta que forman
una pasta. Después se realiza la atomización, que consiste en
transformar la pasta en polvo:
La pasta pasa por un tubo a presión y entra en una gran torre,
donde es "rociada" con aire caliente a contracorriente.
El aire evapora el agua de la pasta y se forma el polvo (es más
o menos fino según la presión con la que ha salido del tubo y el
diámetro de los orificios del "rociador").
Algunos de los ingredientes, que no pueden resistir la
temperatura del aire caliente o la humedad, se añaden al polvo
obtenido después de la atomización.
A continuación, el polvo se revuelve en un tambor giratorio.
Finalmente, pasa por un cedazo que separa las partículas
demasiado finas o gruesas, esto hace un contraste en los
diferentes tipos de jabones que podemos encontrar en los
mercados.