1. ¿Cómo afecta
el estrés
la salud?
Alumno: Esmeralda Román Beltrán
Materia: Estrés y Trastornos
Psicológicos.
Prof. Nicolás Tlalpachicatl Cruz.
El estrés (tensión) es una reacción
fisiológica del organismo en el que entran
en juego diversos mecanismos de defensa
para afrontar una situación que se percibe
como amenazante o de demanda
incrementada, el estrés es una respuesta
natural y necesaria para la supervivencia, a
pesar de lo cual hoy en día se confunde
con una patología.
ESTRÉS CRÓNICO:
El estrés crónico tiene una característica
particular que le diferencia de otros tipos de
estrés. Y es que el evento o factor estresante se
manifiesta una y otra vez, es decir, que el
estresor no es temporal y permanece
inmodificable a lo largo del tiempo.
El efecto del estrés en el organismo es
profundo:
Predominio del sistema nervioso simpático
(vasoconstricción periférica, midriasis,
taquicardia, Taquipnea, ralentización de la
motilidad intestinal. Etc.)
Liberación de catecolaminas (adrenalina y
noradrenalina), de cortisol y encefalina.
Aumento en sangre de la cantidad circulante de
glucosa, factores de coagulación aminoácidos
libres y factores inmunitarios.
Todos estos mecanismos lo desarrolla el cuerpo
para aumentar las probabilidades de
supervivencia frente a una amenaza a corto
plazo, no para que se los mantenga
indefinidamente, tal como sucede en algunos
casos.
A medio plazo el estado de alerta sostenido
desgasta las reservas del organismo y puede
producir diversas patologías como (trombosis,
ansiedad, depresión, inmunodeficiencia, dolores
musculares, insomnio, trastornos de atención,
diabetes etc.)
El estrés provoca inmunodepresión.
La liberación de hormonas de estrés inhibe la
maduración de los linfocitos, encargados de la
inmunidad especifica, las consecuencias por
ende terminan siendo fisiológicas, psicológicas,
y conductuales, estas generan daños en el
cuerpo que afectan la calidad de vida de las
personas, los estragos mas comunes que
sobrevienen a consecuencia del estrés son:
Obesidad, Perdida del cabello, Depresión,
Reducción de deseo sexual, Menstruación
irregular, Acné, Úlceras, Insomnio…
2. TIPOS DE ESTRÉS:
ESTRÉS POSITIVO (EUSTRÈS)
El Eustrès es el fenómeno que se presenta cuando las
personas reaccionan de manera positiva, creativa y
afirmativa frente a una determinada circunstancia lo
cual les permite resolver de manera objetiva las
dificultades que se presentan en la vida y de esta forma
desarrollar sus capacidades y destrezas.
ESTRÉS NEGATIVO (DISTRÉS)
Se puede decir que el estrés puede ser visto como un
fenómeno de adaptación en los individuos ya que depende
de cada persona y de la situación que se le presente el tipo
de respuesta que proporcione a su entorno y esta le podrá
beneficiar o no en su crecimiento personal y/o profesional.
DIEZ ESTRESORES DESENCADENANTES :
1. situaciones que fuerzan a procesar información rápidamente.
2. estímulos ambientales dañinos.
3. percepciones de amenaza.
4. alteración de las funciones fisiológicas (enfermedades,
adicciones, etc.)
5. aislamiento y confinamiento.
6. bloqueos en nuestros intereses.
7. presión grupal.
8. frustración.
9. no conseguir objetivos planeados.
10. relaciones sociales complicadas o fallidas.
FASES DEL ESTRÉS
La fase de ALARMA: Constituye el aviso claro de la
presencia de un agente estresor.
La fase de RESISTENCIA cuando la presencia del estrés
supera la primera.
La fase de AGOTAMIENTO, en la cual se produce una
disminución progresiva en el organismo, la cual conduce a
un estado de deterioro que se caracteriza por la presencia
de fatiga, ansiedad y depresión
Si, a pesar del agotamiento, no nos detenemos a descansar
y hacer una pausa para recuperar energías, nuestro
organismo podría entrar en una fase
de CRONIFICACIÓN de las manifestaciones de la fase de
agotamiento del estrés.
MANIFESTACIONES FÍSICAS
Corresponden a los síntomas que se generan en
nuestro cuerpo frente a los estresores habituales,
algunos de ellos son:
1. Somnolencia, mayor necesidad de dormir
2. Cansancio y fatiga
3. Dolores de cabeza o jaquecas
4. Dolor de estómago y/o color irritable
5. Bruxismo (tensión de mandíbulas)
6. Dolor de espalda
7. Taquicardia o palpitaciones fuertes
8. Aumento o disminución del apetito
9. Resfríos frecuentes (baja en el sistema inmune)
10. Dificultades para dormir (insomnio o pesadillas)
MANIFESTACIONES PSICOLÓGICAS Y EMOCIONALES
Son las reacciones emocionales y cognitivas que tenemos
frente a situaciones de estrés, entre las que destacan:
1. Inquietud e hiperactividad
2. Tristeza y/o desgano
3. Ansiedad constante
4. Dificultades para concentrarse
5. Dificultades para pensar (quedarse en blanco)
6. Problemas de memoria, olvidos frecuentes
7. Irritabilidad frecuente
8. Temor a no poder cumplir con las obligaciones
9. Baja motivación para actividades académicas
10. Angustia y/o ganas de llorar frecuente
MANIFESTACIONES CONDUCTUALES
Consisten en los cambios que experimentamos en nuestra
conducta producto de la vivencia de situaciones de estrés,
que son fácilmente observados por otros, entre los que
podemos encontrar:
1. Frecuente tendencia a discutir con los demás
2. Necesidad de estar solo, aislarse
3. Uso de fármacos para estar despierto (auto
medicados)
4. Preferir otras actividades por sobre el estudio
5. Uso de fármacos para dormir (auto medicados)
6. Dificultad para sentarse a estudiar (“sacar la vuelta”)
7. Aumento del consumo de café y/o tabaco
8. Dejar de asistir a clases
9. Frecuente participación en carretes poco saludables
10. Tendencia a dejar de hacer, por desgano o apatía, lo
que se acostumbra normalmente
PREVENCIÓN Y AFRONTAMIENTO DEL
ESTRÉS
Una vez que identificamos las situaciones que nos
generan estrés y que sabemos cómo
reaccionamos frente a ello, necesitamos distinguir
qué estamos haciendo para prevenir que esto
ocurra o mitigar los efectos.
Algunas de las estrategias que ayudan tanto a
prevenir la cronificación del estrés como a
afrontar las manifestaciones en la fase de
agotamiento son:
• Planificar actividades priorizando entre ellas
• Alimentarse saludablemente en horarios
estables
• Practicar deporte o actividades recreativas
• Dedicar tiempo a pasatiempos y hobbies
• Mantener ciclos de sueño estables
• Buscar ayuda y compartir con otros
• Practicar relajación y respiración profunda
• Mantener el sentido del humor
• Esforzarse en mantener la calma y tranquilidad