La organización formal de las escuelas secundarias tiene una estructura piramidal con el director a la cabeza. El director se encarga de organizar las actividades académicas, vigilar que se cumplan las reglas y los programas escolares. Otras figuras como los prefectos, trabajo social y orientación ayudan a mantener el orden y monitorear el rendimiento y comportamiento de los alumnos. El objetivo principal de esta organización es mantener una buena imagen de la escuela y lograr un trabajo académico satisfactorio entre los estudiantes.