2. Es una corriente filosófica influida por el pragmatismo americano y el evolucionismo que se desarrolló a
finales del siglo XIX y principios del XX en Estados Unidos. Frente al estructuralismo propuesto por
Titchener, el funcionalismo pretendió estudiar la mente para comprender cómo las distintas propiedades
y características de ésta facultan al individuo para el desenvolvimiento en su medio.
El estructuralismo se preocupó, fundamentalmente, por la estructura de la mente, mientras que el
funcionalismo por su función. Como consecuencia del punto de vista evolucionista, según el cual el
hombre no presenta diferencias absolutamente insalvables respecto de las otras especies animales, el
funcionalismo se preocupó por la investigación de la mente de los animales, y como consecuencia de que
la mente interacciona con el entorno merced a la conducta del individuo, el análisis de la conducta
también fue tema destacado. William James, James R. Angell, y John Dewey son los funcionalistas más
importantes.
No hay que confundir esta forma de funcionalismo con el funcionalismo filosófico: en este último caso, se
trata de una filosofía de la mente preocupada por caracterizar lo psíquico, tarea en la que concluye que lo
mental se define siempre por la función que cumple en relación a las necesidades del organismo. Para esta
teoría lo importante en los estados y procesos mentales no es la estructura física que sirve de soporte a los
mismos (como lo fundamental para ser un corazón es su capacidad para bombear la sangre a la totalidad
del cuerpo, no el hecho de que sea de metal o biológico).
Con esta tesis, el funcionalismo se convirtió en el fundamento filosófico del paradigma cognitivo en
Psicología: para entender la mente podemos prescindir de la comprensión de la base física en la que toma
cuerpo, pues lo esencial es el tipo de procedimientos que sigue al realizar una tarea, y su valor en relación
a la totalidad del sistema. La metáfora del ordenador es la consecuencia lógica de estas tesis filosóficas.
Funcionalismo.
3. El estructuralismo es una de las teorías más estudiadas en Psicología y se refiere a la teoría
fundada por Edward B. Titchener (1867-1923), con el objetivo de describir la estructura de
la mente en términos de los elementos más primitivos de la experiencia mental.
Esta teoría se centró en tres cosas: los elementos individuales de la conciencia, cómo se
organizan en las experiencias más complejas, y cómo estos mentales fenómenos
correlacionados con los eventos físicos. Los elementos de estructura mental de sí mismos,
de tal manera de permitir que la experiencia consciente. Para estudiar la conciencia
utilizaban como método la introspección para describir detalladamente las sensaciones,
emociones y pensamientos de las personas en determinadas situaciones.
Titchener Introdujo la medición y el experimento en esta disciplina, que hasta entonces
había sido una rama de la filosofía. Wund y Titchener pensaban que la misión de la
Psicología consiste en identificar los elementos básicos de la experiencia y en demostrar
cómo se combinan. A esta escuela del pensamiento se le llama Estructuralismo. Titchener
es el fundador de la teoría del estructuralismo debido a que fue alumno de Wilhelm Wundt
en la Universidad de Leipzig, Titchener tuvo ideas sobre cómo funcionaba la mente y que
estaban muy influenciados por la teoría de Wundt de voluntarismo y sus ideas de la
asociación y la percepción, Titchener intentó clasificar las estructuras de la mente, al igual
que los químicos clasificar los elementos de la naturaleza en la tabla periódica.
Estructuralismo.
4. Es un método de análisis político-económico, o también un movimiento político y social, o
una doctrina, nacida a partir de la década de 1840, siendo su mayor expositor y fundador
Karl Marx (filósofo alemán), quien utilizó al marxismo como método para el análisis del
capitalismo.
También tuvo gran importancia dentro del marxismo Friedrich Engels, filósofo alemán, de
ideas revolucionarias, que contribuyó intelectual y moralmente con el marxismo. Engels
era además un buen amigo de Marx, y ambos se complementaban muy bien, potenciando
así el poder del marxismo en todos sus aspectos.
El marxismo es denominado también “socialismo científico”, pues si bien no se puede
hablar de ciencia dentro de la política, con demasiada rigurosidad, el marxismo tiene una
base económica, y su plan se acerca al método científico lo más posible. El marxismo gira
principalmente en torno a las relaciones socioeconómicas que caracterizaban a la Europa
del siglo XIX en el momento posterior al estallido de la Revolución Francesa y en el período
histórico en el cual la industrialización cambió profundamente las formas sociales y
económicas conocidas hasta el momento. Para el marxismo la base de la organización social
era la división de clases, concepto ciertamente complejo que hasta el día de hoy genera
conflictos en torno a su definición. Para Marx y otros filósofos contemporáneos tales como
Engels, la sociedad capitalista se dividía en clases según se poseyeran los medios de
producción o se poseyera fuerza de trabajo.
Marxismo
5. Es un sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la
producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen
los precios y los mercados.
Por extensión se denomina capitalista a la clase social más alta de este sistema económico o "burguesía",
también a la forma común que tendrían los intereses individuales de los propietarios de capital, en tanto
accionistas y patrones de empresas. También se denomina capitalismo a todo el orden social y político
(legislación, idiosincrasia, etc.) que orbita alrededor del sistema y a la vez determina estructuralmente las
posibilidades de su contenido.
El origen del capitalismo como sistema económico, en teoría, no apareció hasta el siglo XVI en Inglaterra
sustituyendo al Feudalismo. Según Adam Smith, los seres humanos siempre han tenido una fuerte
tendencia a "realizar trueques, cambios e intercambios de unas cosas por otras". De esta forma al
capitalismo, al igual que al dinero y la economía de mercado, se le atribuye un origen espontáneo o
natural dentro de la edad moderna.
Este impulso natural hacia el comercio y el intercambio fue acentuado y fomentado por las Cruzadas que
se organizaron en Europa occidental desde el siglo XI hasta el siglo XIII. Las grandes travesías y
expediciones de los siglos XV y XVI reforzaron estas tendencias y fomentaron el comercio, sobre todo tras
el descubrimiento del Nuevo Mundo y la entrada en Europa de ingentes cantidades de metales preciosos
provenientes de aquellas tierras. El orden económico resultante de estos acontecimientos fue un sistema en
el que predominaba lo comercial, es decir, cuyo objetivo principal consistía en intercambiar bienes y no en
producirlos. La importancia de la producción no se hizo patente hasta la Revolución industrial que tuvo
lugar en el siglo XIX.
Capitalismo.
6. En un sentido amplio, el Positivismo es la escuela filosófica según la cual todo
conocimiento, para ser genuino, debe basarse en la experiencia sensible. El progreso del
conocimiento sólo es posible con la observación y el experimento y, según esta exigencia, se
debe utilizar el método de las ciencias naturales. La pretensión de algunos filósofos de
buscar conocimientos por medio de especulaciones metafísicas son intentos perdidos, si
bien la Filosofía debería tener como única tarea la de hacer comprensibles los métodos de
las ciencias naturales y desarrollar, además, las concepciones generales que se derivan de
las resultados de las diferentes ciencias particulares.
Francisco Bacon (1561 - 1626), que puede ser llamado el padre de la escuela, a la cual dio su
nombre, sostiene que los filósofos no deben buscar más allá de los límites de la naturaleza.
Hay hechos que deben ser abordados sin ninguna concepción previa y algunos de esos
hechos positivos deben ser aceptados por la fe en la experiencia. Saint Simón aplica la
palabra positivo a las ciencias que se basan en los hechos que han sido observados y
analizados.
Augusto Comte (1798 - 1857) tal vez es el autor más identificado con esta escuela_ destacó
el término ya acuñado en el título de su obra principal Curso de Filosofía positiva (1830-
1842) para poner de relieve que la función de la teoría consiste en coordinar los hechos
observados por las ciencias y de ninguna manera buscar las causas de su ocurrencia.
Positivismo.
7. Fue una corriente del pensamiento que se desarrolló en la Edad Media baja (siglos XVII y XVIII); inspirada y
fundamentada en el pensamiento de Descartes (racionalismo), sacando de allí sus ideas básicas. La modernidad se
caracterizó por la racionalización de la existencia tanto es así que llego a hablarse de "La diosa razón".
Este pensamiento fue marcado por el surgimiento de grandes utopías sociales, políticas, económicas, culturales,
tecnológicas, industriales, etc. Los ilustrados creyeron en la cercana victoria sobre la ignorancia y la servidumbre
por medio de la ciencia; los capitalistas confiaban en alcanzar la felicidad gracias a la racionalización de las
estructuras sociales y el incremento de la producción; los marxistas esperaban la emancipación del proletariado a
través de la lucha de clases. En lo que todos estaban de acuerdo (a pesar de las grandes diferencias ideológicas) era
en que "se puede". Lo resaltable de éstas era la búsqueda del bien común ("El todos antes que el Yo"), y la confianza
que éstas tenían en la razón y en los valores del "hombre".
El hombre modernista era un hombre comprometido con la humanidad, creía en ésta y en su avance. Creía en la
razón Universal y en que a través de ella se podía llegar a la pura verdad. El hombre modernista era un hombre
enamorado de la vida, con un proyecto claro e ideales firmes; los cuales no estaba dispuesto a canjear por bienes
materiales.
El modernista es un hombre, básicamente optimista, no acepta el mundo en el cual le tocó vivir, pero tiene
esperanza de cambiarlo. El hombre moderno convencido de que se puede cambiar la sociedad compromete su
presente por un futuro mejor, para él y para "todos". Fue una época de grandes dictaduras y tiranías, posiblemente
por el compromiso de los hombres con la sociedad.
En filosofía, el modernismo reacciona contra el positivismo, interesándose por la teosofía de Annie Besant y Helena
Blavatsky, así como por los estudios de Max Nordau sobre la degeneración, y las nuevas filosofías de la vida de
Henri Bergson y Arthur Blondel.
Modernismo.
8.
A cada generación le gusta identificarse con una gran figura mitológica o legendaria
que es reinterpretada en función de los problemas del momento. Los hombres
modernos gustaron identificarse con Prometeo, que, desafiando la ira de Zeus, trajo a
la tierra el fuego, desencadenando así, el progreso de la humanidad.
En 1942, Camus sugirió que el símbolo más representativo de la modernidad no era
tanto Prometeo sino Sísifo que fue condenando por los Dioses a hacer rodar sin cesar
una roca hasta la cumbre de una montaña, desde donde volvía a caer siempre por su
propio peso. Ahora, los posmodernos dicen: "Hace falta ser tontos para saber que
Prometeo no es Prometeo sino, Sisífo, y empeñarse una y otra vez en subir la roca
hasta lo alto de la montaña". ¡Dejémosla abajo y disfrutemos de la vida!
La posmodernidad surge a partir del momento en que la humanidad empezó a tener
conciencia de que ya no era válido el proyecto moderno; está basada en el
desencanto. Los posmodernos tienen experiencia de un mundo duro que no aceptan,
pero no tienen esperanza de poder mejorarlo. Estos, convencidos de que no existen
posibilidades de cambiar la sociedad, han decidido disfrutar al menos del presente
con una actitud despreocupada.
Postmodernismo