3. Análisis
El objetivo de toda organización es materializar sus esfuerzos en capitales
tangibles y productivos, para esto es indispensable y necesario un buen entorno laboral a
todo nivel. Basándose en esta filosofía de trabajo, se deben plantear mejoras a largo plazo y
que presenten cierta flexibilidad que permita adaptarse a los cambios que inevitablemente
experimenta una organización en sus ciclos y procesos.
Cuando no se tiene una visión definida, o se gerencia a través de una
administración autocrática, la organización se ve expuesta al deterioro del clima
organizacional lo cual le llevará a consecuencias negativas tales como: mayores niveles de
ausentismo, tasas de rotación y renuncia, retiro psicológico del personal en sus labores,
desgano, indiferencia y lentitud en los procesos. En cambio, mientras más fortalecida y
cohesionada se encuentre la organización se generará un clima organizacional positivo y
estable que defienda la cultura de la organización y se aplique en la búsqueda de soluciones
y adaptaciones de los cambios que puedan presentarse.