El liderazgo consciente, clave para la adaptación al cambio
1.
2. El perfil de empresario actual se
acerca a la imagen de líder, pero con
importantes áreas de mejora.
El líder actual trabaja muy bien las
competencias de integridad y
honestidad, tiene pericia en las
cuestiones técnicas, valora y
promueve los resultados, toma la
iniciativa y practica una buena gestión
en las relaciones externas de su
empresa.
3. Sin embargo, todavía
existen áreas en las que
se debe mejorar, como
la de la comunicación,
la de cooperación y
trabajo en equipo, la de
motivación y la de
inspiración.
4. Esto es lo que
complementa lo que yo
denomino el liderazgo
transformacional, un
liderazgo más
consciente donde
tenemos que poner más
foco, porque es
realmente importante.
5. La figura de líder actual tiene
que trabajar para adaptarse
a un nuevo escenario, donde
se necesitan líderes
conscientes que sepan
cómo gestionar el talento
que hay en las
organizaciones y que
pueden influir tan
positivamente.
6. Mejorando estas competencias,
centradas principalmente en la
comunicación y las relaciones
interpersonales, se abre una
línea de crecimiento muy
positiva para los líderes
empresariales, que actualmente
ya están ejerciendo un buen
liderazgo, y que podría ayudar a
conseguir un liderazgo
excelente.
7. “No se puede tener éxito
con otras personas
mientras no se pague el
precio del éxito con uno
mismo”. Stehphen Covey.
Y ahí es donde radica el
éxito de un líder: en el
descubrimiento de su líder
interior; de aquello que le
moviliza, sus valores, sus
creencias…, aquello que le
lleva a pasar a la acción.
8. Si uno quiere liderar a otras
personas tiene que empezar
por liderarse a uno mismo.
Tiene que empezar
reconociendo sus fortalezas,
sus áreas de mejora y esos
patrones que se repiten y
que marcan la parte que
necesitamos reprogramar.
9. En resumen, para que
un jefe se convierta
en líder es necesario
que haga un intenso
trabajo de
introspección y de
pasar a la acción.
10. Porque para liderar es
necesario tomar
consciencia de tus
áreas de mejora y
poner más foco en la
parte de humanización
de cada organización.
11. No debemos olvidar
el ‘heart’, el corazón de cada
empresa; y, por supuesto, no
debemos olvidarnos de los
beneficios, de los resultados
o de la estrategia, sin
anteponerlos al bienestar de
empleados y colaboradores
en el corto plazo.
12. Y ésta es un área en la
que tenemos que
profundizar: la
introspección, mirar hacia
dentro, valorar a tus
colaboradores por lo
que son, y no tanto por
lo que hacen.
13. Tenemos que mejorar nuestra
capacidad de adaptación.
El concepto de cambio no es nada
nuevo.
Al contrario, es algo que deberíamos
haber asumido ya desde hace
mucho tiempo.
La vida es un constante movimiento.
De hecho, la pandemia que hemos
vivido nos lo ha recordado de una
manera brusca y de gran impacto.
14. También debemos considerar
que se ha puesto de manifiesto
la necesidad de tener unos
líderes que no solamente
abracen el cambio, sino que,
además, sean capaces de
adaptarse a la velocidad
adecuada y sean conscientes del
impacto que ocasiona cada
decisión.
15. Saber adelantarnos al
cambio es otra área de
mejora que debemos
considerar los líderes
actuales.
Es lo que llamamos
innovación, que ya forma
parte de nuestro ADN.
16. Pero la figura de líder actual
tiene que trabajar para
adaptarse a un nuevo
escenario, donde se
necesitan líderes
conscientes que sepan
cómo gestionar el talento
que hay en las
organizaciones y que
pueden influir tan
positivamente.
17. Reforzar la escucha, la
humanización, el
reconocimiento, la
implicación.
Es necesario saber qué
tecla tienes que tocar
para alcanzar
determinados resultados.
18. Ese liderazgo consciente
es lo que permite que te
responsabilices de tus
errores, los analices y
aprendas de ellos, que
hagas lo mismo con los
aciertos, para poder
replicarlos en el futuro.
19. Estamos en un momento en
el que tenemos que decidir
por qué queremos ser
líderes.
Tenemos que entender que
no solo debemos esperar el
cambio, sino también ser
transformadores y creadores
de nuevos cambios.
20. Se recomienda el
libro Gladiador o esclavo, tú
decides, la principal
diferencia entre uno y otro es
la libertad.
Una libertad que implica
cambio en el estilo de
liderazgo, que
significa evolución, acción y
movilización, para
adaptarnos a un nuevo
escenario.
21. Y esa libertad
comienza por la
consciencia de uno
mismo, ya que no
puedes mejorar un
área si no eres
consciente de ello.
22. Nos encontramos ante una
nueva tendencia dentro del
mundo del emprendimiento,
posiblemente incentivada
por la situación actual en la
que nos encontramos,
donde el papel del líder es
más relevante que nunca.
Para mí, el emprendimiento
es una actitud.
23. Es el primer paso para el
despertar de una idea
innovadora y que pueda
tener cabida en el mercado.
Y mantener siempre esa
actitud, esa capacidad de
aprendizaje, ese
autoconocimiento que nos
permita tener los pies en el
suelo..
24. Reconocer que el cambio, precisamente,
genera nuevas oportunidades y hay que estar
preparados para encontrarlas y generarlas