Este documento describe las principales cadenas musculares estáticas y sus correspondientes posturas de corrección. Identifica las cadenas inspiratoria, posterior, antero-interna de la cadera, anterior del brazo y antero-interna del hombro. Para cada cadena, describe sus músculos componentes y cómo su rigidez afecta la postura. Luego explica diversas posturas, como la rana en el aire y sentada, para estirar cada cadena de manera progresiva y global, mejorando la postura del cuerpo.
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Cadenas musculares estáticas y posturas de corrección
1. Las cadenas ntusculares y sus
posturas
Seamos claros, la noción de cadena muscular está vacía
de contenido si no tenemos en cuenta la diferencia
fundamental entre los músculos de la estática y los
músculos de la dinámica. Por lo tanto existen cadenas de
músculos estáticos y cadenas de músculos dinámicos1.
Por supuesto, es inútil abordar el problema de las
cadenas musculares si no se tiene a disposición un
método de reeducación realmente global y cualitativo.
Establecido claramente este principio, se deduce que
existen un cierto número de series musculares estáticas
que corresponden a las grandes hegemonías, definidas
por Souchard en su obra «El campo cerrado», método de
la Reeducación Postura! Global.
LAS CADENAS2
La serie inspiratoria
Comprende: músculos escalenos, pectoral menor,
intercostales y diafragma con su tendón diafragmático.
En caso de acortamiento de esta cadena ya no será posi
ble estirar la nuca, descargar los hombros o deslordosar
las lumbares sin provocar un bloqueo inspiratorio (foto 1).
En el caso de retracción más clara de los escalenos o
de los pectorales menores, afectará particularmente a la
parte alta del tórax. En caso de rigidez del diafragma, y
de sus pilares las seis últimas costillas estarán más clara
mente en inspiración. Recíprocamente la espiración ade
lantarán los hombros y la nuca (foto 2) y solo podrá reali
zarse correctamente con una compensación: la flexión an
terior dorsal.
La serie posterior
Comprende los músculos espinales, glúteo mayor, isquios
de la pierna, poplíteo, sóleo y flexores plantares, princi
palmente el flexor corto plantar.
El acortamiento de los espinales altera la armonía de las
curvaturas vertebrales: nuca corta y cabeza adelantada,
ausencia de cifosis dorsal o hiper-lordosis lumbo-dorsal.
El de los músculos estáticos de los miembros inferiores
destruye la buena colocación de los diferentes segmentos:
genu varum o valgum, calcáneo varus o valgum en los que
predomina la rigidez de los músculos del muslo, de la pan
torrilla o de la planta del pie.
La serie antera-interna de la cadera
Comprende los músculos psoas ilíaco, abductores pu
bianos (pectíneo, pequeño y mediano abductor, recto in-
Ph. Souchard
,.
terno y parte anterior del gran abductor). Por arriba con
tinúa con los músculos espinales gracias a su acción lor
dosante sobre los ilíacos y zona lumbar. Por debajo, por
la acción flexora y rotadora interna del fémur por el psoas
y abductores pubianos, cuando el sujeto está en posición
de pie, esta serie continúa con el músculo poplíteo, el trí
ceps y los músculos plantares.
La retracción de esta cadena afecta a los fémures en
abducción-rotación interna y a la zona lumbar en hiper-lor
dosis.
La serie anterior del brazo
Comprende todos los músculos suspensores del hrazo,
del antebrazo, de la mano y de los dedos. Es exclusiva
mente anterior y comprende el trapecio superior, deltoi
des medio, coracobraquial, bíceps, supinador largo, pro
nadar redondo, palmares, flexores de los dedos y todos
los músculos de la cavidad tenar e hipotenar.
Su rigidez lleva al hombro hacia delante (tracción del
bíceps sobre la apófisis coracoide) y flexiona exagerada
mente el codo y los dedos.
La serie antero-interna del hombro
Está constituída por la sub-escapular, coracobraquial y
el pectoral mayor (su fascículo clavicular es suspensor del
Natura Medicatrix. Otoño 1987 (n.0 17) - 17
2. Fig. 3 Fig. 4
18 - Natura Medicatrix. Otoño 1987 (n.0 17)
brazo). Esta serie se continúa por la parte anterior del brazo.
Su pérdida de flexibilidad afecta al brazo en abducción
rotación interna y molesta para la abducción.
Del bebé desplegado a la niña de pie
Todas estas cadenas estáticas son las que permiten el
reagrupamiento y enderezamiento del bebé desplega
do (fig. 3, fig.4).
Sorprendentemente, una simple observación con senti
do común, de la posición del bebé nos permitirá llegar
a la conclusión que para llegar a la postura de pie, obliga
toriamente se deberán desarrollar los músculos erectores,
abductores y rotadores internos (cadena posterior y serie
amero-interna de las caderas). De la misma forma si quie
re coger y llevarse hacia sí los objetos, deberá desarrollar
los abductores rotadores internos del hombro, flexores del
hombro, del codo, de la muñeca y de los dedos (cadena
anterior del brazo y antero-interna del hombro).
Finalmente, no le es posible suspender sus costillas sin
la cadena inspiratoria. Podemos llegar así a la conclusión
de que las grandes hegemonías, respiratoria, alimentaria
y la posición de pie, están aseguradas por los músculos
de la estática reagrupados en diferentes cadenas musculares.
LAS POSTURAS
Corrección de la cadena inspiratoria
Hemos visto que en caso de rigidez de los músculos ins
piradores todo alargamiento de nuca bloquea a la perso
na en inspiración por los escalenos y el diafragma que es
tirado por sus tendones.
Toda descarga de hombros eleva los 3.a, 4.a y 5.a costi
llas por la tracción del pectoral menor.
Toda deslordosis lumbo-dorsal tira sobre los pilares del
diafragma, bloquea el centro frénico en inspiración, lo que
eleva las seis últimas costillas.
Toda maniobra de corrección de la nuca, de hombros
o de lumbares tira sobre esta cadena inspiratoria.
Será pues necesaria en todas las posturas que vienen a
continuación cuidar en cada momento de que la persona
respire libremente si realmente se quiere estirar esta ca
dena muscular. Siguiendo el nivel del bloqueo del tórax
el terapeuta interviene manualmente, cualitativamente y
progresivamente para corregir más particularmente esta zo
na (foto 5-foto 6).
En caso de bloqueo torácico alto, la persona debe respi
rar hinchando el vientre. Para el tórax inferior en inspira
ción debe respirar metiendo el vientre (foto 7-foto 8).
Posturas de la cadena posterior
Supone una tensión de todos los músculos de esta ca
dena desde el occipital hasta la punta de los dedos del pie.
Se pueden emplear dos posturas: la rana en el aire y la
postura sentada. El interés recíproco de estas dos postu
ras muy parecidas la una de la otra se expondrá después.
4. 20 - Natura Medicatri.x. Otoño 1987 (n° 1 7)
1) La rana en el aire
A: Tracción sobre los espinales: Se efectúa por un alar
gamiento de nuca metiendo el mentón, una corrección res
piratoria del tórax que permite mantener la cifosis o vol
verla a provocar si ya no existe, una flexión coxa-femoral,
sacro colocado en el suelo para realizar la tracción sobre
los espinales lumbares y la corrección de la hiperlordosis
(foto 9).
B: Tracción sobre los músculos posteriores de los miem
bros inferiores: Se realiza a partir de una abducción
rotación externa de los fémures y flexión de las rodillas,
llamada comúnmente «la rana en el aire» (foto 10). Se pi
de a la persona que tienda progresivamente sus rodillas
en buena posición de rotación (ni varum, ni valgum de
rodilla). Se cierra lentamente el ángulo coxa-femoral em
pujando los pies hacia la cara de la persona y se colocan
poco a poco en talus (foto 1 1).
2) La postura sentada
A: Tracción sobre los espinales. Después de haber colo
cado correctamente la pelvis de la persona, el terapeuta
ejerce una tracción hacia arriba sobre el occipital y pide
que meta el mentón. Se alinea en el mismo plano vertical
el occipital, la región medio-dorsal y el sacro. Se efectua
rán, si son necesarias, correciones manuales del tórax
(foto 1 2).
B: Tracción sobre los músculos posteriores de los miem
bros inferiores. El paciente estira sus miembros inferiores
progresivamente orientando las rodillas, tirando de las pun
tas de los pies hacia sí. El terapeuta hace inclinar el busto
lentamente hacia adelante para cerrar poco a poco el án
gulo coxa-femoral (foto 1 3).
Posturas de la cadena antero-interna de la cadera
Aquí también las posturas deberán ser globales y supo
nen una apertura progresiva del ángulo coxa-femoral. Vol
vemos a encontrar igualmente una postura en decúbito un
poco más eficaz sobre los psoas-ilíacos y los abductores
pubianos pues permite más abducción de cadera y una
postura llamada «de carga» más severa para los muslos
puesto que autoriza una colocación más rigurosa de los
pies.
1) La rana en el suelo
A: Tracción sobre los espinales. Se realiza como prece
dente como un bombeo del sacro (foto 1 4) para obtener
una corrección eficaz de la región lumbar.
B: Tracción sobre la cadena antera-interna de la cadera.
La persona se coloca en flexión-abducción-rotación externa
de caderas (foto 1 5) y estira progresivamente sus miem
bros inferiores cuidando particularmente de no arquear
la región lumbar. Al final de la postura, el paciente debe
tener las rodillas estiradas, juntas y en buena orientación,
los pies en talus (foto 1 6).
2) La postura de pie
A: La correción del conjunto de la espalda se realiza co
mo en el caso de la postura (foto 17).
5. B: Los miembros inferiores se corrigen colocando los pies
de la persona sobre una placa que puede abrirse progresi
vamente un ángulo hacia delante de modo que realiza un
talus completo lo que tiene como efecto alargar los mús
culos del muslo (foto 18-foto 19).
El paciente tienden progresivamente sus rodillas en buena
rotación vigilando atentamente de no lordosar la región
lumbar anteriormente corregida (foto 20-foto 21).
Postura de brazos juntos
Siempre actuando de forma progresiva y global, permi
te la correción de las rigideces de la cadena anterior del
brazo. El miembro superior debe permanecer en abduc
ción a lo largo del cuerpo a fin de obtener un estiramien
to del trapecio superior y del deltoides medio. El paciente
relaja los hombros, es decir los desciende y los coloca so
bre el suelo en el mismo movimiento. Efectúa una exten
sión del codo con una pronación seguida de una exten
sión de la muñeca y de los dedos separarán el pulgar
(foto 22).
La postura de brazos juntos se podrá practicar durante:
la rana en el aire, la postura sentada (gracias a un tatami
-ver fig. 12), la postura de pie o la rana en el suelo.
La observación al comienzo de la sesión y los puntos
de reequilibrio (estas maniobras serán descritas posterior
mente) dan la indicación apropiada.
Postura de brazos en abducción
Flexibiliza la cadena antera-interna del hombro. Mediante
una abducción progresiva del brazo y hombro relajado,
hace ,fluir todos los músculos estáticos adductores del bra
zo. Se continúa con la cadena anterior. Para ello, la perso
na debe colocar su paletilla humeral directamente hacia
Natura Medícat1ix. Otoño 198 7 (n ° 1 7) - 21
6. 22 - Natura Medicatlix. Ot01io 1987 (n ° 17)
adelante (y no en hiperrotación externa). Termina con una
extensión y supinación del codo, extensión de la muñeca
y extensión de los dedos gracias a dos calces que prolon
gan el tatami plegable (foto 23). En caso de rigidez particu
lar del músculo subescapular, el terapeuta debe impedir
manualmente la abducción excesiva del omoplato.
La postura brazos en abducción puede practicarse con
las otras posturas descritas anteriormente (foto 24, foto
25 y foto 26).
Aquí también, la observación al principio de la sesión,
la anamnesis y los puntos de reequilibrio permiten aso
ciarla con la postura de miembros inferiores juzgada de
mayor eficacia.
(1) El problema de los músculos de las extremidades y músculos que han cam
biado a lo largo de la evolución de la especie (Psoas, Glúteo Mayor, Trapecic
Superior, Deltoides medio) será tratado posteriormente.
(2) Ver figura n° S, artículo «La Espalda>>, (pág. 5).
(3) Ver Boletín RP.G. n? 6.